Algunos antecedentes de Daniel Scioli

• 1) Daniel Scioli construyó un quincho ilegal en un aire y luz de su edificio de Callao y Posadas, que luego se incendió y causó la muerte del portero que intentaba salvar a un chica cercada por el fuego.
     Mientras el fiscal Comparatore anda queriendo culpar a Reutemann de homicidio culposo (por las inundaciones),  a Scioli le "escondieron" el expediente.  

• 2) Scioli nunca pagó los US$ 200.000 de daños por la destrucción total del inmueble de su vecino del piso de arriba, el Sr. Maradan, de nacionalidad suiza.
     Scioli se declaró insolvente  mientras su mujer tiraba la plata en negocios inútiles.   

• 3) Karina Rabollini, su eterna concubina, le debía más de US$ 2 millones al Banco de la Provincia de Buenos Aires que pasaron al fideicomiso de la provincia, es decir entre los incobrables.
     Este es el modelo de honestidad y ética de la nueva politica, no devolver los millones de dólares que se llevaron como préstamo de favor de los bancos estatales  aprovechando el puesto politico.   

• 4) Tuvo una hija extramatrimonial a la que no reconoció por 19 años, la madre de ella debió hacerle un juicio de filiación y cuando el escándalo salió en la tapa de Revista Gente, Scioli finalmente reconoció su paternidad  por imposición de Karina.  

• 5) Gracias a sus vinculaciones políticas tuvo un millonario contrato de la YPF estatal durante el gobierno de Menem -¡Oh los 90!- como sponsor de su lancha.
     Es el tipo de curros que quebró las empresas del Estado.  

• 6) Ante la quiebra de la compañía familiar, Casa Scioli de Electrodomésticos, levantada con esfuerzo por el padre y fundida por los "planes de renovación y crecimiento" del motonauta Daniel, entre esos planes estaba la "importación de novedosos elementos electrónicos" que terminó en dos procesos por "contrabando".  Y hoy se desgarra las vestiduras en contra de las importaciones y en defensa de la industria nacional.   
     El deshonesto Daniel Scioli culpó de la quiebra y del contrabando a su propio padre para evitar dar explicaciones judiciales y hacerse cargo de su conducta.
     Obviamente sus acreedores nunca vieron un peso y si no le hacen juicio político, tampoco los verán.

   ¿Ud. cree que puede confiar en un hijo que para salvar sus

irresponsabilidades comerciales destruye la memoria de su propio padre?

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