Dark Warriors

Hathor - Plaga de Langostas
Invoca una plaga de langostas que destruirá las granjas o pesqueros enemigos. Ya que ambos son caros, este poder te permite azotar la economía enemiga. No se puede atacar a las langostas y éstas causan daño mínimo a los aldeanos.
Sugerencia: trata de que tu enemigo no vea el daño causado por las langostas. De ese modo, no sabrá que ha perdido buena parte de su economía y no se preocupará por solucionarlo.
Cómo contrarrestarlo: construye un monumento de Isis cerca de tus áreas con varias granjas.

Neftis - Ancestros
Este poder divino de la edad heroica llama a unos guerreros ancestrales que lucharán junto a tus ejércitos por un breve período de tiempo. Este poder es similar al de Serpientes con la excepción de que a los ancestros se le pueden dar órdenes igual que a las unidades militares normales. Los ancestros pueden ser últiles para luchar en un ejército, para desbaratar la economía de un enemigo o como defensa ante un ataque sorpresa. Volverán a su descanso eterno en un breve período de tiempo. Asegúrate de convocarlos en un sitio que sea de utilidad, si se utiliza en el agua se convocarán barcos fantasma.
Sugerencia: invócalo en un lugar donde se esté librando una batalla en la que te ves superado o en un lugar donde tu enemigo no pueda huir demasiado; por ejemplo, entre sus edificios militares.
Cómo contrarrestarlo: retira tus tropas humanas del lugar y ataca a los Ancestros con arqueros y héroes, ya que son unidades míticas. El poder de Alto el Fuego inutiliza totalmente a los Ancestros.

Sekmeth - Ciudadela

Este poder divino transforma un centro urbano en una poderosa ciudadela con muchos puntos de resistencia y ataque, por lo demás, la ciudadela tiene las mismas funciones que un centro urbano. Puedes utilizar la ciudadela en centros urbanos aliados, incluso si son griegos o nórdicos.
Sugerencia: el mejor lugar para alzar una Ciudadela es en un centro urbano construido en un asentamiento que hayas robado a tu enemigo. Sino, puede servir defensivamente para mejorar tu centro urbano original.

IV - Edad Mítica

Osiris - Hijo de Osiris
Este poder divino de la edad mítica transforma a tu faraón en el Hijo de Osiris, con la cabeza de halcón y portador del rayo. Esta unidad tiene todos los poderes de un faraón normal, como contraatacar unidades míticas, curar y otorgar poderes, pero es mucho más poderoso en combate. Está bajo tu control y dispondrás de él mientras esté vivo, pero no se le puede curar. Cuando muera volverás a tener un faraón normal.
Sugerencia: jamás dejes solo al Hijo de Osiris, ya que será la unidad preferida de tu enemigo. Su utilidad es atacar con el rayo desde el seno de tu ejército, pero si tus fuerzas se ven superadas, retíralo hasta que puedas formar nuevamente tu ejército.
Cómo contrarrestarlo: manda todas las unidades que lo tengan a su alcance a atacarlo. El poder de Rayo es ideal para contrarrestar al Hijo de Osiris.

Thot - Meteoro
Thot invoca una lluvia de meteoros de fuego sobre un área. Todo lo que se encuentre alrededor del área resultara dañado golpeado por los meteoros, aunque las unidades saldrán despedidas en lugar de sufrir un daño significativo. Los meteoros pueden dañar y afectar tanto a unidades como a edificios.
Sugerencia: es muy útil en áreas con gran aglomeración de edificios enemigos, desde fortalezas y edificios militares hasta casas (dejar a tu enemigo sin casas puede representarle una disminución de hasta 100 unidades de población). Prepara tus tropas para atacar lo que quede de los edificios dañados, ya que la lluvia de meteoros puede no destruirlos del todo.
Cómo contrarrestarlo: retira tus tropas del lugar.

Horus - Tornado
Horus desata su ira en una nube con forma de torbellino. El tornado puede barrer ejecitos enteros, o convertir ciudades en montones de escombros, el tornado se moverá aleatoriamente y puede dañar edificios y unidades aliadas si se acerca a ellas, aunque hará mas daño a edificios y unidades enemigas.
Sugerencia: es similar al meteoro, salvo que es más eficaz contra ejércitos, aunque causa menos daño global.
Cómo contrarrestarlo: retira tus tropas del lugar.

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