Juan Zanotto: Entre el Futuro y Mujeres de Poca Ropa,  el Adiós

Por Guido Barsi

      Hace un año, específicamente hablando un 13 de Abril del 2005 a las 7am, nos dejaba uno de los más grandes dibujantes de la historieta argentina e internacional ya que su obra recorrió varios países llevándose la admiración y varios de ellos (sobretodo su país natal, Italia).

Zanotto nace en Cucelio, Torino, el 26 de septiembre de 1935 y en 1948 junto a su familia llega a la Argentina a la edad de 13 años. Pasan los años y en 1953 empieza a forjarse como el dibujante que termino siendo, dando los primeros pasos en Publicaciones Universales para luego publicar en la editorial Codex trabajos como “Tatin” y “El Fantasma”. Dos años después, en 1955, junta cabeza con el guionista Alfredo Grassi (con el cual volverían a juntarse en varias oportunidades) para dibujar “Rick de la Frontera” y “El Mundo del Hombre Rojo” para después terminar en la Editorial Frontera la editorial de H.G. Oesterheld donde (como Zanotto) varios dibujantes importantes de la historieta daban sus primeros pasos de la mano de uno de los mejores guionistas de historietas, nombres como: Francisco Solano López, Hugo Pratt, Carlos Vogt, José Muñoz, Alberto Breccia, Arturo del Castillo, y un largo etcétera de excelentes dibujantes.

Pero poco duraría el trabajo de Zanotto en algunas portadas e historietas ya que en 1961 la Editorial Frontera pasaba a manos de la Editorial Ramírez por las deudas que la acosaban. De todas formas su carrera ya estaba lanzada: en 1960 empieza a trabajar (como muchos dibujantes argentinos) para la inglesa Editorial Fleetway, en la cual trabajaría hasta 1970 dibujante historietas de la Segunda Guerra Mundial y en 1965 se convierte en el Jefe de Arte de la Editorial Codex.

Los años pasan entre historieta e historieta para diferentes rincones del globo hasta que en 1974 se funda la Editorial Record, encabezada por Alfredo Scutti, y Zanotto pasa a ser el Jefe de Arte de la misma y empezaría el lanzamiento definitivo de su carrera para convertirse en el maestro que es. Desde el numero 1 de la revista “Skorpio” empieza a salir “Henga” con guiones de Eugenio Zappietro (o como todos lo conocen bajo el seudónimo de Ray Collins), tal es el éxito de esta serie que mas adelante saldría un hijo de la misma: “Hor”, donde vuelve a colaborar con Alfredo Grassi. Pero todo lo que empieza termina y luego de muchos episodios “Henga” y “Hor” llegan a su final. Aunque esto no seria lo ultimo que veríamos de Henga ya que en 1983 el director italiano Antonio Margheriti se encargaría de llevarla a la pantalla grande bajo el titulo de “Yor, the Hunter or the Future”, recordemos que el cine italiano por aquellos años volcaba su producción al cine yanqui y por eso las películas llevaban titulo y voces en ingles (para no decir que los actores eran de habla ingles), y que en Italia la traducción de Henga era Yor.

Tampoco seria lo ultimo que veríamos de Zanotto, por ejemplo en 1976 “Wakantanka” con guiones de Héctor Oesterheld, sobre un joven indio que se convierte en “el gran espíritu de la guerra justa” (significado de Wakantanka). Pero su creador no podría ver (ni dárselo) de su creación ya que un grupo de hijos de puta (y quedarme corto en el adjetivo) decidió quitarle la vida como a otras miles de personas. Carlos Albiac seria el sucesor de Oesterheld para terminar la serie. En 1979 trabajaría por primera vez con Ricardo Barreiro para hacer “Bárbara”, seguramente su trabajo mas recordado y admirado, el cual nos coloca en un futuro algo lejano para ser testigos de una invasión. Que se publicaría hasta 1983 cuando Zanotto se ve obligado a escribir los guiones ya que Barreiro se iría a España. Pero esto no significaba el adiós a la dupla, sino un hasta pronto... que se vería terminado cuando la dupla vuelve a trabajar junta en la miniserie “Nueva York: Año Cero” ubicada en un futuro no muy alentador. Terminada esta miniserie vuelve a juntarse con Grassi para dibujar “Tagh, El Guerrero del Ocaso” con una trama algo parecida a “Henga” pero con un Grassi mas inspirado que cuando escribió “Hor”.

Luego de esta gran producción se toma un descanso (y con razón) entre 1984 y 1987 que solo lo encontraríamos en historietas unitarias con guiones de Grassi y Emilio Balcarce. Ese ultimo año (1987) pone fin a su descanso para dibujar “Crónicas del Tiempo Medio” con guiones de Balcarce, el cual también se ubicaría en un futuro dominado por las maquinas y con los hombres siendo esclavos de ellas. El éxito de la serie (o miniserie) permitiría dos secuelas mas: la segunda parte en 1991 y la tercera parte en 1992. Antes de estas secuelas volvería (por ultima vez) a juntarse con Ricardo Barreiro para crear “Penitenciario” en 1989, sobre una cárcel de mujeres que el único modo de escapar de ella es ganando un torneo de lucha libre.

Después de toda esta producción publicada en “Skorpio” y en revistas italianas (como “Lanciostory”, entre otras), en 1992 se vuelva a trabajar para el mercado yanqui (que lo pudo apreciar en varias ediciones de sus trabajos) con “Warman”, una novela grafica con guión de Chuck Dixon.

Pero la nostalgia le hace efecto en ese pequeño lapso y vuelve a publicar en “Skorpio” la serie “Horizontes Perdidos” parte I y II con guiones propios, la miniserie nos presenta a Falka, un hombre en el cuerpo de una mujeres (una amazona para ser exactos), que se convertiría en la protagonista de diversos tomos realizados por Zanotto para el viejo continente (como “Le Soufflé du Diable”, “Le Cristal Rouge”, “Le Grand Secret”) hasta el 2003. Durante su producción de Falka realiza una aventura futurista en el espacio: “Starlight” con guiones de Robin Wood (uno de los últimos grandes guionista con el que le faltaba trabajar) que se publico acá en 1995, y se realizo en 1993. Como dato extra, en la editorial de la palomita (Columba) luego de publicar “Starlight” se republico “Crónicas del Tiempo Medio” partes I y II bajo el nombre de “Crónicas del Apocalipsis”, ¿la diferencia? El color tan criticado de Columba. También entre Falka y Falka, en 1998, guioniza y dibuja “Los Ladrones del Tiempo” sobre, como su titulo lo indica, ladrones que toman prestado un experimento para viajar por el tiempo y robar ciertas cosas.

Lamentablemente esta ultima etapa de su trabajo no fue publicada en nuestro país y nos perdimos el ultimo tramo de este gran historietista que un 13 de Abril se fue y nos dejo su obra para que la apreciemos una y otra vez, para que podamos apreciar su excelente trabajo en las maquinas futuristas perfectas (no solo luces que parpadean, como dijo una vez), mujeres mas que perfectas (que te hacían quedarte mirándolas ante de dar vuelta la pagina) y, como nos demostró al final, una escritura llena de aventuras alrededor del tiempo y del espacio. Un adiós para el maestro. 

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