Las Festividades de Dios

Tres veces cada un año parecerá todo varón tuyo delante de Jehová tu Dios en el lugar que él escogiere: en la solemnidad de los ázimos, y en la solemnidad de las semanas, y en la solemnidad de las cabañas. Y no parecerá vacío delante de Jehová (Deuteronomio 16:16)

 

LA IGLESIA DE DIOS SOLAMENTE GUARDA TRES FIESTAS, ADEMÁS DEL SÁBADO, QUE SE ENCUENTRAN SUSTENTADAS BÍBLICAMENTE Y QUE FUERON OBSERVADAS POR LOS PRIMEROS CRISTIANOS EN EL NUEVO TESTAMENTO:

PASCUA

PENTECOSTÉS

CABAÑAS

 

 

1. PASCUA (ÁZIMOS)

 

1.1 ORIGEN Y CELEBRACIÓN:

La fiesta de la Pascua es la primera de las tres grandes solemnidades de Jehová las cuáles se proclamaban como santas convocaciones (Levítico 23:4-5). En esta fiesta se ofrecían a Dios las primicias del ganado y el pan sin levadura hecho con las primeras espigas de la cosecha; pero su gran importancia radica no sólo en su carácter agrícola, sino en que esta solemnidad conmemoraba la milagrosa liberación de la esclavitud del pueblo de Israel y su salida de Egipto.

La fiesta de la Pascua se celebraba por mandato divino el día 14 del primer mes del calendario hebreo y se prolongaba hasta el día 21, en los cuáles se debería comer el pan sin levadura.

La institución de la fiesta de Pascua se relaciona con la última de las diez plagas que Dios envió a Egipto como manifestación de su poder para liberar a su pueblo. Por eso los israelitas recibieron instrucciones de tomar un cordero sin defecto en el día 10 del primer mes, un cordero por familia, el cual debería inmolarse (sacrificarse) el día 14 del mismo mes entre las dos tardes, utilizando la sangre para señalar los dos postes y el dintel de las casas. Esa misma noche, en el vínculo familiar, se debía comer asado al fuego con panes sin levadura y hierbas amargas, no debiendo quebrantar ninguno de sus huesos.

Cuando Jehová envió la décima plaga, el Angel del Señor penetró por toda la tierra de Egipto hiriendo al primogénito de cada casa, desde el hijo del faraón hasta el primogénito de los animales, excluyendo los lugares hebreos, donde encontró la señal de sangre de la Pascua. Y es por lo que su nombre Pascua (en hebreo Pesaj) significa "salto" o "brinco".

Después de esto, faraón permitió la salida del pueblo de Israel de la tierra de Egipto.

 

1.2 EN EL NUEVO TESTAMENTO

El testimonio de los Evangelios señala que en el último tiempo de la vida Cristo se realizó dos veces la Pascua, sólo que 24 horas una después de la otra. La primera es la Pascua que celebró Jesús con sus apóstoles en el principio del día 14 del mes primero; y la segunda es la "pascua de los judíos" que celebraron un día después, al comienzo del día 15 (Juan 13:1-2; 19:42).

En los días de Cristo, los israelitas que eran galileos y samaritanos celebraban la Pascua al principio del día 14, tal como se hizo cuando salieron de Egipto. Por otra parte, los israelitas judíos en aquella época ya habían unificado en un solo día el sacrificio del cordero con el comienzo de los panes sin levadura (día 15) (marcos 14:12; Lucas 22:1).

Este día 14, después de comer con sus apóstoles la cena del cordero pascual aderezado con yerbas (la llamada Cena del Señor), Jesús también comió la cena Mística o Emblemática que consiste en la consagración que realizó bendiciendo un pan mediante una oración y que representaba su cuerpo, mismo pan que repartió a sus apóstoles; luego hizo lo mismo con el vino, que de igual modo dio a sus discípulos en un vaso (al que Pablo llama la Copa de Bendición). Al final, como un ejemplar acto de humildad, Jesucristo, el Señor y Maestro, lavó los pies de los doce hombre que le seguían, quedando esto instituido como la Pascua Cristiana a partir de ese momento y que constituye el Nuevo Pacto por su sangre.

 

1.3 LA PASCUA EN LA IGLESIA DE DIOS

La Iglesia de Dios (Israelita) celebra esta solemnidad tal como la Escritura lo dice, con todos los lineamientos establecidos:

 

 

Cabe aclarar que los emblemas representan la confirmación de un Pacto entre nosotros y el Señor.

Los siete días siguientes en que de acuerdo a la Ley deberían de comerse los panes ázimos, representan simbólicamente el tiempo total de la Iglesia antes de la segunda venida de Cristo, durante el cual debe permanecer exenta de levadura, es decir sin malicia y sin maldad.

 

Limpiad pues la vieja levadura, para que seáis nueva masa, como sois sin levadura: porque nuestra pascua, que es Cristo, fue sacrificada por nosotros

(1 Corintios 5:7)

 

 

2. PENTECOSTÉS (SEMANAS)

 

2.1 ORIGEN Y CELEBRACIÓN:

La fiesta de las semanas es la segunda de las tres festividades grandes del año en Israel instituidas por el Señor. El pueblo la celebraría cuando entrara a la tierra prometida y comenzara a segar su mies (Levítico 23:10; Deuteronomio 16:10).

El día 16 del primer mes se presentaba un omer (gavilla, manojo) por primicia , el cual debía mecer (agitar y levantar) el sacerdote como ofrenda delante del Señor Jehová. A partir de aquí se contaban siete semanas y el siguiente día (cincuenta) se celebraba la solemnidad de las semanas (Shavuot en hebreo), en el día 5 del mes tercero.

El establecimiento de esta fecha, además de su carácter agrícola, es un memorial o recuerdo de la data de los Diez Mandamientos, y era considerado como Sábado Ceremonial o santa convocación conforme a la Ley del Señor, por tanto no se haría ninguna obra servil (Levítico 23:21; Números 8:26).

 

2.2 EN EL NUEVO TESTAMENTO

En el Nuevo testamento, la fiesta de las semanas se conoce con el nombre de Pentecostés, palabra de origen griego que significa quincuagésimo (cincuenta).

En los días de los apóstoles esta fiesta seguía siendo observada. En el año 33 dC, pocos días después de la ascensión de Jesús a los cielos, estando los discípulos reunidos en el día de Pentecostés, recibieron el Espíritu Santo (Hechos 2:1).

En el libro de Hechos se menciona que Pablo procuró cumplir con la observancia de esta fiesta y de ser posible celebrarla en Jerusalem (Hechos 20:16).

 

    1. PENTECOSTÉS EN LA IGLESIA DE DIOS

La Iglesia de Dios (Israelita) cree que tanto guardar de la Ley como tener el Espíritu Santo son elementos indispensables y complementarios para la salvación el verdadero creyente.

En éste día se celebra una Santa Convocación y ninguna obra servil se hace. Se realizan tres cultos: uno para el recibimiento del día, a la puesta del sol; otro matutino en la mañana; y otro vespertino.

 

Y como se cumplieron los días de Pentecostés, estaban todos unánimes juntos

(Hechos 2:1)

 

 

3. CABAÑAS (TABERNACULOS)

 

3.1 ORIGEN Y CELEBRACIÓN:

La fiesta de la cosecha, llamada también Cabañas o Tabernáculos (en hebreo Sucot) era la última festividad del año y se celebraba con el propósito de recordar todas las bendiciones que Dios proporciona a lo largo del año representada a través de la recolección de los frutos, así como la peregrinación de los hijos de Israel por el desierto durante un período de 40 años desde la salida de Egipto.

Esta solemnidad se celebraba por espacio de 7 días, comenzando el día 15 del mes séptimo, siendo el primer día santa convocación, así como el octavo día, en los cuáles ninguna obra servil debían hacer (Levítico 23:34-36).

El pueblo de Israel se regocijaba delante de Dios tomando en esta fiesta ramos con fruto de árbol hermoso, ramas de palmas, de árboles espesos y sauces de los arroyos, celebrando a Jehová con gran gozo y alegría.

Al regreso de la cautividad de babilonia, el pueblo de Israel celebró de forma especial esta solemnidad, de manera que hicieron cabañas cada uno sobre su terrado, en sus patios y en los patios de la Casa de Dios, ya que desde Josué no habían hecho así los hijos de Israel (Nehemías 8:14-18).

 

3.2 EN EL NUEVO TESTAMENTO

La fiesta de las Cabañas ocupaba un lugar predominante en la existencia de Israel, ya que se celebraba como un estatuto perpetuo que recordaba la época en que fueron peregrinos en la tierra y errantes en el desierto a la espera de la tierra prometida.

Nuestro Señor Jesucristo mostró fidelidad a Dios asistiendo anualmente a esta fiesta (Juan 7:6-9).

 

3.3 CABAÑAS EN LA IGLESIA DE DIOS

La festividad de la Cabañas se celebra a partir del día 15 del mes séptimo y se prolonga durante 7 días.

Cumpliendo con el precepto bíblico de Levítico 23:40, se llevan ramas de árbol espeso y ramas de palma para representar una cabaña entro del lugar de adoración de Dios, acostumbrando colgar frutos entre las ramas.

Durante esta solemnidad se respira el agradable aroma de los frutos y ramas colocadas en la casa de oración, la cual permanece adornada hasta el séptimo día, en el cual se retiran para dar inicio al octavo día, que corresponde a una santa convocación o sábado ceremonial.

Espiritualmente hablando, habitar en Cabañas es una representación de nuestra estancia en el mundo, la cual es sólo pasajera y en la que cada uno de nosotros representa una cabaña o tabernáculo que espera el establecimiento del reino de Cristo. Por o tanto, somos también probados en este desierto espiritual y guiados por la palabra y voluntad de Dios, la cual es nuestra sombra y protección.

Las ramas representan al cristiano que ha sido ingerido en el árbol de la buena oliva que es el pueblo de Israel; los frutos simbolizan las acciones que presentamos delante del Creador; los 7 días de la fiesta representan 7 épocas que ha tenido la Iglesia desde la primera venida de Cristo y el 8º día es en representación del milenio.

 

 

Y todos los que quedaren de las gentes que vinieron contra Jerusalem, subirán de año en año a adorar al Rey, Jehová de los ejércitos, y a celebrar la fiesta de las Cabañas.

(Zacarías 14:16)

 

 

 

Página Principal

Puntos de Fe

El Sábado

Las Fiestas de Dios

Los Diez Mandamientos

Eventos

Acerca de

Himnario

Imágenes

Lugares De Interés