Desde
el año 1980, asistí a talleres municipales y privados
con maestros (todos) de la escuela de Bellas Artes de Neuquén.
Por lo que en esta primera muestra aunque me mostrara bastante
audaz, cuidaba mucho el respetar ciertas reglas academicas. Como
no usar negro, respetar lo que era figurativo y separar lo abstracto,
no dejar blancos de la tela, etc.
