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ANÁLISIS, COMENTARIO Y DEMÁS

 

DVDs

 

Que este DVD no falte en su estante

Bee Gees
One Night Only 
Universal/2002

Hay grabaciones que se convierten en documentos, y ésta es una de ellas. Nadie imaginaba en aquel momento que esa sería la última vez que Barry, Robin y Maurice Gibb actuarían juntos pues en el 2004 el último falleció en lo que los hermanos consideraron "negligencia médica" con lo cual también se cerró uno de los capítulos más brillantes del pop mundial.

Fue por tanto un acierto enorme el que se haya grabado esta presentación que aparte de haber salido como CD más tarde apareció como edición en DVD. Simplemente nagnífico: "Es tiempo regresar por el tiempo", anuncia Barry, con lo cual abre con "New York Mining Disaster", su primer gran hit de 1967. De ahí en adelante todo es disfrute, y no hay asistente que quede insatisfecho. Durante poco más de 1 hora y 20 minutos los hits avanzan "How can you mend a broken heart", "Words", "Lonely Days". "To Love Somebody" y, claro, un medley de sus días como monarcas de la música disco que incluye "You should be dancin'", "More than a woman" y "Night Fever".

Pero sin duda uno de los momentos más emotivos del One Night Only es el homenaje que los Gibb rinden a su hermano Andy al interpretar "Don't throw it all away" mientras en la pantalla aparece la imagen del menor de la familia. Es éste el instante en que los Bee Gees y el público pasan a ser un solo ente, unidos no sólo por el recuerdo de Andy sino por una étapa que en su tiempo fue vilipendiada pero cada día adquiere más revalorización.

Se ha dicho muchas veces que la música es el soundtrack de nuestras vidas. Huele a lugar común pero es cierto: las versiones en vivo del One Night Only no desmerecen a las originales y son interpretadas con cariño y cuidado. Fue una noche espléndida aunque los aplausos disminuían cada vez que el grupo presentaba canciones de su entonces nuevo disco, titulado Still Waters. Para quien guste de los conciertos de calidad, One Night Only es indispensable en la devedeteca. Es un legado que los fanáticos del buen pop siempre agradeceremos a los Bee Gees.

Only You
Robert Downey Jr., Marisa Tomei, Bonnie Hunt
Dirigida Por Norman Jewison
Columbia/1994

La suerte de esta película quedó ligada a lo que sucedió con Robert Downey Jr, quien apenas terminado el rodaje fue sometido al primero de sus hoy innumerables procesos de rehabilitación por su adicción a las drogas. En las últimas escenas del filme su estado es evidente, tanto así que quien aparece en la portada de este DVD no es Downey sino un actor desconocido. Sin embargo consiguió una actuación bastante buena en la que fue una de las comedias románticas más recordadas de los 90 (quién dijera que esa década ya empieza a producir nostalgia).

También conocida es Marisa Tomei. Muchos creen que el Oscar que recibió en 1993 por My Cousin Vinny se debió a que leyeron el sobre equivocado durante la ceremonia. Pero desde ese tiempo a Tomei, una neoyorquina menudita y con cara de modelo, ya no le faltó trabajo. En cuanto a Downey, hoy es un ejemplo de cómo las drogas pueden convertir en detritus todo el talento que tuvo alguien que, de actor secundario de comedias ochenteras, llegó a caracterizar a Charlie Chaplin, un rol que otros actores habían encontrado demasiado demandante, Y Downey lo hizo bien.         

Tomei caracteriza a Faith Corvatch, una muchacha de Pittsburgh a quien la ouija dice quién será el hombre de su vida, un tal Damon Bradley. Años después una gitana le proporciona el mismo nombre pero no vuelve a oír de él hasta que, mientras se prueba su vestido de novia y está a unos días de casarse con un ortopedista recibe una llamada: es Damon Bradley, quien se encuentra en el aeropuerto y está a punto de viajar a Venecia. Menos de media hora después Corvatch, aún con su vestido, llega al aeropuerto pero ya no alcanza al Príncipe Platónico así que decide ir a Italia hasta encontrarlo.    

Ya en Venecia se encuentra con otro norteamericano (Downey) quien se hace pasar por Damon Bradley. La situación es perfecta hasta que él le confiesa ser alguien más. Ahí da inicio esta comedia que en momentos parece estar patrocinada por el Ministerio de Turismo italiano. Cuando fue estrenada en 1994 se esperaban pocas cosas pero constituyó una sorpresa taquillera en el verano de aquel año.

El final no es muy convincente (pero, si somos francos, tampoco lo sería una chica tan obsesionada que pospone su boda en busca de un hombre que quizá no existe) pero sin duda aún constituye una comedia romántica per se para esos momentos con la novia o la esposa. 

(Dato adicional: el mensaje en la página del Internet Movie Database [imdb.com] respecto a este filme es una muestra irrefutable de ocio absoluto: un tipo dice haber estado en el mismo departamento donde se filmó la escena donde Tomei toma un taxi hacia el aeropuerto --la película fue rodada en Pittsburgh-- y afirma que ese recorrido en realidad toma "exactamente 43 minutos, tiempo insuficiente para alcanzar un avión que saldrá en media hora". Que alguien le ofrezca empleo a ese sujeto, por favor.

Fantastic Voyage DVD Edition
Stephen Boyd. Raquel Welch, Donald Pleasance, Arthur O'Donnell
Dirigida por Richard Fleischer
(1966)

Esta película levantó controversias, ganó portadas en las principales revistas norteamericanas y fue objeto de discusiones éticas, además de ser en su momento una cinta de ciencia ficción de alta calidad.

La historia es sencilla: un importante científico que posee importantísima información deserta de la Unión Soviética es agredido, tras lo cual sufre daño cerebral. El asunto pasa a ser de seguridad nacional pues con la muerte del científico se perderían todos los datos considerados Top Secret. La única manera es reducir una nave espacial a un tamaño microbiano, insertarla en el organismo del científico y aplicar una operación láser al cerebro. Sin embargo cuentan con 48 horas de lo contrario la nave adquirirá nuevamente su tamaño normal.

Así, los cinco tripulantes ingresan mediante una inyección. Su objetivo es llegar al cerebro y evitar que los glóbulos blancos los devoren por considerarlos organismos extraños. Sin embargo no todos están contentos con la misión, y aun habrá un espía infiltrado quien hará lo posible para que falle la misión.

Por supuesto que un aspecto que se agradece es la presencia de Raquel Welch quien pos aquellos años pasaba por su mejor etapa como auténtico forro y de Donald Pleasance, por muchos años el actor preferido de Roman Polanski.

Ya se habla en Hollywood de la posibilidad de hacer una nueva versión de Viaje Fantástico. Mientras llega ese momento --quizá necesario para que luego dejen esta cinta en paz-- nada mejor que volverla a ver, ahora en DVD, y comprobar cómo la ciancia ficción de los sesenta tenía lo suyo, tanto así que Kubrick lo corroboró en 1968 con su 2001 A Space Odissey

 

 

 

 

 

 

 

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