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ANTECEDENTES
La invención de la bicicleta es anterior a la del automóvil o a la del avión. Sus orígenes se remontan a mediados del Siglo XIX en Europa, al principio, como una moda entre las clases más pudientes para paseos ocasionales y eventualmente como medio de transporte popular por mucho tiempo hasta que fue sustituida por las motocicletas, de esa época, y luego por el automóvil cuando fue masificado por los industriales estadounidenses.

Si bien esta simple máquina de transporte personal se continuó fabricando por décadas con diseños rústicos, más bien como juguetes o transporte popular, es por las competiciones deportivas que la bicicleta –de “carrera”- se convierte en uno de los deportes para audiencia más difundidos, gracias principalmente al Tour de Francia, el cual continua hasta el momento.

A principios de los setenta, en Estados Unidos, surge el nuevo diseño conocido como “Mountain Bike” o bicicleta de montaña, pensado para transitar a campo-traviesa (volviendo a los orígenes) en virtud de una estructura tubular más rígida y ergonomía acorde con su uso. En pocos años, se difundiría por todo el mundo conviertiéndose en una actividad practicada por no menos de 50 millones de personas.

El deporte del ciclismo, con más de 100 años, se ha visto diversificarse ampliamente, contándose con variedades como el “Bicicross” (término del idioma inglés para carreras en pistas artificiales de obstáculos), el “Montaincross” (versión adulta), el “Cross Country”, para travesías por terrenos variados, entre otros. Continuan, por supuesto, las versiones tradicionales de carretera y variaciones para estadios llamados Velódromos.

Naturalmente, la tecnología ha modernizado al máximo la bicicletas, donde ahora se usan aleaciones sofisticadas y toda una variedad de accesorios ciclísticos o personales. En algunos casos, los precios pueden llegar hasta unos 10,000 dólares por una bicicleta de carrera!

CICLISMO TODO-TERRENO
La robustez de las bicicletas modernas, la variedad de modelos y precios para todos los presupuestos y la conciencia colectiva sobre el medioambiente han puesto a la bicicleta –de nuevo- como una de las mejores formas para trasladarse sin contaminar el planeta. El ciclista todo-terreno, no tan despacio como el excursionistas de a pie, o abarcando menos espacio, ni tan rápido –o contaminante- como el motociclista u automovilista, se perfila como una opción de turismo accequible para las masas y ecológicamente correcta. La bicicleta para excursionar combina el inconciente infantil de diversión: casi todo el mundo gusta montar en bicicleta…con la proporcionalidad de la capacidad atlética, al menos en los países occidentales. En oriente, la tradición es tan superior que mantiene la supremacía como medio básico de transporte.

LOCACIONES
Las zonas de playa se conectan con el noreste del país componiendo una zona ideal donde se combinan los atractivos tradicionales de playas caribeñas –Boca Chica/Guayacanes- con zonas de montaña baja –Comatillo- y zonas exóticas como los Haitises, incluyendo ríos, saltos de agua, cuevas y parques naturales para visitar sin que medien distancia excesivas.

Esto permite diseñar toda una serie de circuitos de ecoaventura ciclística con una alta capacidad de absorción de visitantes, generación de empleos inmediatos y directos y revitalización de la porción norte de la región este, enlazándola incluso con prospecciones para la misma ciudad de Santo Domingo.

Por otro lado, es factible el construir pistas de obstáculos artificiales, el “Bicicross”, para niños o jovencitos (una pasión mundial parecida a la de la versión adulta) en terrenos a lo largo de la misma costa, por ejemplo, en San Andrés o la misma Boca Chica.

Asimismo, al disponerse de zonas naturales -con grados bajos de deterioro- relativamente cercanas al aeropuerto internacional Las Américas, hacen posible vislumbrar recorridos competitivos, por ejemplo, La Caleta, Guayacanes entre otros.

SENDEROS
Se plantea la construcción de rutas especiales para ciclistas todo-terreno (por lo general de un metro de ancho y sobre la simple tierra) que lleven por lugares atractivos hasta una distancia razonable. Los senderos, una fuente rapida de empleo tierra adentro, van trazados combinando caminos vecinales existentes o, en su defecto, cruzando propiedades privadas –con derecho de paso especial- para llegar a los destinos que sean productivos turísticamente.

PLAN DE ACCIÓN URBANA
Se plantea hacer un experimento urbano, por ejemplo, en Boca Chica/Andrés (por su cercanía a la capital) como probablemente en otros pueblos como San Pedro de Macoría, Hato Mayor, Bayaguana u otros, diseñando rutas especiales para ciclistas en como una forma de ahorro de combustible e incentivo para los turistas. Las rutas visitarían lugares culturales específicos o atractivos naturales. En días especiales, se podría interrumpir todo el tráfico automotor en favor de jornadas de salud.

Todos los recorridos generan la necesidad de contratación de personal como guías, intérpretes, asistentes, entre otros. Incluso, es probable la creación –más empleos- de una versión criolla de los bicitaxis orientales…

CENTRO DE ENTRENAMIENTO
Como el ciclismo es un deporte olímpico, se plantea la construcción de tanto instalaciones –naturales y artificiales- especiales para atraer a los grandes equipos internacionales para practicar en nuestros meses de invierno, o, para entrenar en la variedad “montain bike” a los atletas nativos.

Es posible que podamos convertirnos en una potencia caribeña ciclistica en este sentido.

ESCUELA DE MECÁNICA
Otra manera de crear empleo entre los jóvenes es mediante su entrenamiento como mecánicos de bicicletas. Esto permite además el soporte tecnológico y logístico para tanto los turistas como para los deportistas. Eventualmente, es posible pensar que se incorpore una versión industrial de ensamblado o fabricación de componentes.

CALENDARIO DE COMPETENCIAS
Se propone la organización de la más amplia posible variedad de competiciones ciclísticas, atractivas al mercado regional/internacional, como una manera de capitalizar las singulares características de nuestro territorio, clima y competitividad atlética.

El llamado “Turismo Deportivo”, versión ciclismo, puede convertirse en un renovador del destino donde se benefician tanto los hoteles de la costa, como los que podrían surgir en provincias cercanas y por ende, para los habitantes de la región.

FINANCIAMIENTO
El presente programa vislumbra que por medio de aportes proporcionales de tanto el Estado como del sector privado –los patrocinios comerciales- como aportes de organizaciones internacionales, deportivas o no, puede dar frutos en muy corto plazo.

Mediante una implantación preliminar de rutas básicas, es posible comenzar a operar de inmediato –sobre todo atrayendo el mercado puertorriqueño- mediante competencias amateur.

Se plantea, además, el considerar la compra de cantidades de bicicletas –de diferentes tipos- para tanto dar el servicio a los turistas (negociando con los touroperadores especializados) como para uso de los locales. Es posible conseguir también donaciones (los visitantes traen sus bicicletas y las donan posteriormente) de países amigos o de los mismos fabricantes, sobre todo en norteamérica.

Por otro lado, los hoteles, empresas turísticas o los conglomerados industriales en el municipio, pueden invertir capital en la puesta en marcha –y sostenimiento- del programa. Lo mismo, de las inversiones de parte de organismos deportivos internacionales.

Como acotación interesante, el “Banco de Desarrollo Económico y Social de Venezuela”-BANDES aprobó un préstamo de más de un centenar de millones de dólares al Gobierno Dominicano donde se incluyen extensiones de préstamos para un “Programa de Construcción, Reconstrucción y Equipamiento de Instalaciones Deportivas”. Esta información aparece el 7 de septiembre en el website del BANDES.