MENSAJES DADOS POR LA VIRGEN MARÍA
DEL ROSARIO DE SAN NICOLÁS

1-12-86           1034

Hija mía: Soy para todos mis hijos sin distinción de credos, la Madre que, por la 
misericordia de Dios, infunde vida, esperanza y amor en los corazones.
Gloria al Altísimo.


2-12-86           1035

Digo a mis hijos: Obrad en el presente siguiendo al Señor. Veréis qué felicidad 
interior produce el saberse seguidores de Cristo.
Pobres los insensatos que rechazan el llamado de Dios, porque corren detrás de 
una quimera que nunca saciará la sed del verdadero cristiano.
Queda expresado mi deseo de veros ligado a Cristo, sin tardanza.
Amén, amén.



4-12-86          1036

Dios alcanza a sus hijos Su Amor y con Su Amor, su perdón.
Ya veréis cumplido cuanto os digo y comprobaréis la clemencia del Señor.
La Palabra de Dios ha sido dicha.
Bendita sea.



5-12-86          1037

Gladys: Quiero decir a mis hijos que he llegado como Madre, que está sobre 
ellos mi dulce amor de Madre y que quiero hacer  brillar firmemente en cada 
corazón, la Luz de Cristo.
Gloria al Señor


6-12-86          1038

Hijos: Jamás os levantéis en contra del Señor y pedid que El os libre de continuar 
ofendiéndolo.
Cuando el hombre quiere cambiar lo que para él dispone el Señor, todo lo tuerce, 
todo lo anula. Dios edifica para el hombre según su Ley, no viole éste, esa Ley.
Amén, amén.



6-12-86           1039

En la noche siento cantar a los Ángeles:

Quiero tus ojos Madre
y al mundo con ellos mirar,
dame tus manos María,
enséñame a caminar.

Madre, Madre, Madre de Cristo Jesús. (bis)

Muéstrame Tu Corazón,
encierra tanto dolor,
quiero curar esa herida,
dando mi pobre oración.

Madre, Madre, Madre de Cristo Jesús. (bis)

Oyere Madre querida, 
hazme amar a mi Señor,
tu Amor que todo lo puede,
me hará llegar hasta Dios.

Madre, Madre, Madre de Cristo Jesús. (bis)



7-12-86     (Intención de la Novena del 17 al 25)   1040

Mis queridos hijos, en la Novena de este mes: Orad, id preparando vuestros 
corazones para recibir Navidad.
Benditos los que lo hagáis. ¡Esta Madre tiene tanto para daros, amor, Gracia y 
bendición!
¡Venid, ved a la Madre, venid, ved a su Niño!
Alabado sea mi Divino Hijo.



8-12-86      (Inmaculada Concepción)         1041

Hoy, día de fiesta en mi querida Iglesia, día en que veneráis especialmente a 
vuestra Madre.
Hoy, de un modo muy particular estaré con el que me invoque; hoy, mi Corazón 
estará con el que sufre. Será éste, un día de verdadera unión entre el hijo y la 
Madre.
Bendito sea el Señor.



10-12-86          1042

Querida mía, hablo a mis amados hijos, sacerdotes, religiosas y consagrados.
Mucho necesito la oración de todos ellos, mucho necesito el amor de todos ellos. 
Deben llevar una vida ejemplar y sacrificada, una vida entregada y humilde. 
Deben obrar de manera que Dios, siempre habite en ellos y no se verán por El, 
jamás abandonados. Las almas necesitan de las almas y todas ellas necesitan de 
Dios.
Gloria a El, por todos los siglos.



10-12-86          1043

En la noche. Veo a la Santísima Virgen: Hija, que lo que digo llegue a tus 
hermanos.
Id al Señor, sed del Señor, su mano bienhechora retribuirá a los corazones que 
sean hermosos a sus ojos.
Os diré, corazones hermosos son aquellos donde se encuentra humildad, 
generosidad y piedad.
Si falta lo primero, lo demás fenece antes de nacer. Quiero paz, haya paz en mis 
hijos. Gloria al Santísimo.

Leed: Jeremías C. 17, V. 10
        10      Yo, el Señor, sondeo el corazón y examino las entrañas, para dar a cada uno  según su 
conducta, según el fruto de sus acciones.



12-12-86         1044

¡Cuántas cosas hermosas encierra el amor a Dios !
Amar a Dios, es querer al prójimo.
Amar a Dios, es ofrecerse a Dios.
Amar a Dios, es dar la vida por Dios.
Pensamiento y obra sean de Dios.
Amén, amén.



13-12-86         1045

Me dirijo a todos tus hermanos: Todos los días de vuestra vida, vivid tratando de 
edificarla. Es doloroso para esta Madre, ver como el hombre se destruye.
El Señor os está proporcionando en estos días, de generosas bendiciones.
Haced lo correcto como os lo pido, hijos míos; nada justifica el hecho de estar 
alejados de Dios.
Que mis palabras fecunden en vosotros.
Gloria al Señor.


15-12-86         1046

Hija mía: Por unos pocos buenos, se salvarán muchos malos. Quiero decir que, 
con la oración, con la continua oración. de los verdaderos cristianos, muchos se 
lograrán salvar.
Explico aquí, el porque de Mi presencia, el significado de mis Mensajes, que son 
en definitiva, la Palabra del Señor.
Debe haber conversión, para que sea posible la salvación del alma.
Bendito sea el Señor.

Leed: Eclesiástico C. 2, V. 7 - 8 - 9
        7       Los que temen al Señor, esperen su misericordia, y no se desvíen, para no caer.
        8       Los que temen al Señor, tengan confianza en El, y no les faltará su recompensa     .
        9       Los que temen al Señor, esperen sus beneficios, el gozo duradero y la misericordia.



16-12-86         1047

Tengo una visión de un valle; veo allí, mucha claridad; parece como si me 
sumergiera en esa claridad.
También siento paz, mucha paz.
Luego veo a la Santísima Virgen y me dice:
Allí no hay odios ni rencores, amarguras ni sinsabores, injusticias ni dolores.
Es un estado de continua Gracia, porque se está con el Señor; es la gloria que 
con su poder se alcanza.
Amén, amén.



16-12-86         1048

En la noche la veo y me dice: Vuestra Madre está entre vosotros.
Quiero que seáis predicadores de Cristo.
Sed predicadores, hijos míos y no temáis.
Recordad: No hay Madre sin hijo y no hay hijo sin Madre. Yo os acompaño y lo 
haré siempre.
Bendito sea el Señor.


17-12-86          1049

El Señor es generoso en el tiempo y es misericordioso con sus criaturas.
Es este, un llamado de la Madre a sus hijos, para que cada uno sienta a Dios y 
para que en ese sentir, nazca la esperanza en El.
Gloria a Dios.


18-12-86          1050

Jamás quieran mis hijos, rehusar a Dios, porque se perderán.
Aquellos que amen al Señor, que lo amen con una total entrega y serán recibidos 
por el Señor.
Amén, amén.



19-12-86         1051

Digo a mis hijos: Los hombres de hoy quieren sostenerse por su propia fuerza; 
no tienen en cuenta la fuerza de Dios Padre.
Pretenden vivir de acuerdo a sus métodos por ellos inventados, sin aceptar que 
Dios Todopoderoso es el justo, el que dispone, el que se antepone a todo poder 
humano y a toda voluntad humana.
Es la Divina Luz, el máximo poder, y el más grande Amor, por sobre todo lo 
creado.
Alabado sea el Altísimo. Hazlo conocer al mundo.

Leed: Apocalipsis C. 3, V.15 - 16 - 17- 18

        15      Conozco tus obras: No eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueras frío o caliente ! 
        16      Por eso, porque eres tibio, te vomitaré de mi boca.
        17      Tú andas diciendo: Soy rico, estoy lleno de bienes y no me falta nada, y no     sabes que 
eres desdichado, digno de compasión, pobre, ciego y desnudo.
        18      Por eso, te aconsejo: Cómprame oro purificado en el fuego para enriquecerte, vestidos 
blancos para revestirte y cubrir tu vergonzosa desnudez, y un colirio para ungir tus ojos 
y recobrar la vista.



20-12-86         1052

Hija mía: Jesucristo actúa en los hombres según los hombres. Si estos lo aceptan 
o no , ya que El quiere ser compañía continua y duradera.
La transformación de cada uno, depende de la entrega de cada uno hacia Dios.
Amén, amén.



21-12-86          1053

Me dice nuestra Madre: En el peregrinar de mis hijos, estoy Yo para ayudarles a 
marchar hacia la eternidad.
Hijos míos, os quiero pequeños, porque siendo pequeños creceréis en Mí; os 
quiero dóciles, ya que si sois dóciles os abandonaréis en Mí.
Nunca como ahora se hace tan necesaria la protección de la Madre.
Alabado sea el Santísimo.

Leed: Proverbios C. 21, V. 2 y C. 23, V. 26
        2       Al hombre le parece que todo su camino es recto, pero el Señor pesa los corazones.

Capítulo 23, V. 26
26  Hijo mío, préstame atención y acepta de buena gana mis caminos.



22-12-86          1054

En los mayores sacrificios y en las durezas de las pruebas se hace presente 
Cristo.
Junto a Cristo el hombre sufre, junto a Cristo el hombre se salva.
Redención y salvación vienen de Cristo Jesús.
Gloria al Señor.

23-12-86         1055

El Señor es bondad, misericordia y paz.
Benditos los que proclamen al Señor.
Bienaventurados los que lo alaben.
Felices los que se consuelen en El.
Gloria al Señor.

 24-12-86         1056

Acompañadme en esta Santa Noche con vuestra oración, recordad conmigo el
nacimiento de mi amado Jesús.
Humilde nacimiento, mas no carente de amor, ya que con mi esposo José le
dábamos todo nuestro amor, desde ese momento y para siempre.
Hijos míos, entregad con vuestra oración, también vuestro corazón.
Aleluia.

25-12-86    (Natividad del Señor)      1057

Celebrad con esperanza, con fe y con alegría este día.
Uníos a esta Madre; que este mi gozo sea vuestro gozo, que junto a María
despertéis, que junto a María reviváis, que el Mensaje de María no se diluya y en
vosotros, mi amor quedará encendido.
Mi dulce y adorado Hijo alumbrará a este mundo en tinieblas.
La Madre os lo dice.
Amén, amén.

26-12-86           1058

Hija: En la desnudez del alma y en el corazón abierto entra el Señor. Conozco a
mis hijos y es por eso que, sabiendo que hay corazones blandos, me preocupo por
acercarlos a Cristo.
El hombre es cambiante en su pensamiento, en su forma de amar, hasta que
encuentra al Señor, es en ese momento que fija su mirada en El.
Que nadie se sienta indiferente ante mis palabras, porque ellas elevan el espíritu.
Alabado sea el Señor.

29-12-86         1059

Veo a Jesús, desde el medio de su pecho sale una gran Luz blanca.
Me dice: Mira, este es mi Corazón, herido por la indiferencia de los hombres.
Nada será tan terrible como muchos temen, si las ofensas a Dios son reparadas.
Tus hermanos deberán nutrirse espiritualmente, deberán amar a mi Corazón
golpeado tan crudamente.
Pido amor a Dios y no desprecio, sin amor a Dios, desaparece el hombre, si hay
amor a Dios, perdurará el hombre.

29-12-86          1060

Veo a la Santísima Virgen. Hija: Los hijos de Dios son hijos del Amor y por lo
tanto hijos de la Luz.
Satanás, príncipe de las tinieblas, quiere sobrepasar la Luz que en estos días,
quiere ser para el mundo más esclarecedora.
Quieran mis hijos verla.
Amén, amén.

31-12-86         1061

Digo a mis hijos: Negar a la Madre, es negar al Hijo, y negar al Hijo es negar a
Dios Padre, es negar la Vida Eterna que por El, se puede lograr alcanzar.
Algunos de vosotros, poco habíais oído hablar de Mí, tampoco habíais aprendido
a amarme.
Desde aquí, lugar en que me manifiesto, llegaré hasta los descreídos y juntos
conmigo experimentaréis todos, la inmensa alegría de amar al Señor.
Orad a María, que la oración a esta Madre fructificará grandemente.
Gloria al Todopoderoso.
Que esto sea conocido y meditado.

Leed: I de Timoteo C. 4, V. 4
 4              Todo lo que Dios ha creado es bueno, y nada es despreciable, si se lo recibe con
acción de gracias.
 

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