La poetisa Madeleine E. Belliard (Puertorriqueña por derecho propio)
ve la luz de la vida en República Dominicana a principio de la década
de los '60. De temprana edad llega, traída por sus padres, a Puerto
Rico donde reside desde entonces. Su inclinación por la poesía y el
cuento es algo que ha traído consigo desde su nacimiento. Siendo muy
niña escribía cuentos y al llegar la adolescencia se vió atrapada por
las garras del amor... ¡Ah, el amor...!
Divino y perfecto Amor...
Por la década de los '80 entró de lleno en el fluír de las musas
mientras se descubría en la actuación, en la guitarra compañera, en
la pentacromía del pastel-acuarela, y en la pasión...
Navegó impúdica los caminos intrínsecos de las imágenes. Desdobló el
alfabeto de los sueños.
Elaboró estrategias lisonjeras y enamoró el amor sin mucho esfuerzo;
después se entregó, como entrega una virgen su pureza... así es
Belliard...
Con el tiempo ya no eran suficientes los propios amores y tuvo que
recurrir a los ajenos (el vuestro por ejemplo). Descubrió el amor
incondicional, ese que todo lo llena y todo lo da sin pedir
recompensas. Descubrió el desamor y sus dolores. Descubrió la tristeza
y también descubrió la tibieza; es decir que se hizo parte del Amor
y sus mil recovecos... Ahora te lo redacta con su estilo único...
entra en su mundo y siéntete bienvenido o bienvenida...
Aspira la magia de un viaje sin retorno al corazón del amor...
Atrévete... ¡Te Reto!
Estás escuchando "Endúlzame los oídos" de la argentina Patricia Sosa
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