Prontuarios
Eleuterio PlumaNo es un extraterrestre. Vive en Argentina donde pierde su tiempo estudiando ingeniería. Su perfil nasal consolida el origen de su apellido. Gusta de maldecir a la gente que ocupa los cargos de poder. Sueña con un mundo mejor, aunque no lucha por cambiar nada.El hombre es un ladrón de ideas que no pertenecen a nadie. Se considera un fracaso en el arte de fracasar, pues ha alcanzado algunas metas que se propuso, aunque no aquellas de mayor prioridad. Como ejemplo se puede comentar su capacidad para atarse los cordones de las zapatillas sin ayuda. Es un amante de las causas justas y de las mujeres, en especial de su novia. Sin embargo no alcanza idénticos logros con ambas. A unas las trata mal, y es tratado mal por las otras, aunque se desconoce cómo se corresponde esta relación. Conociéndolo, uno se da cuenta de que es un charlatán de bar atorrante (atorrante tanto el bar como el autor). Da consejos torpes a quienes ni siquiera le piden opinión y contesta con un silencio revelador de su ignorancia a quienes ruegan por su ayuda. Ni siquiera es un gran bebedor, nunca ha alcanzado un estado de ebriedad importante, lo que no lo priva de carecer de juicio. Se ha topado con verdades indiscutibles y con personajes gloriosos. Pero más vale no hablar de los mismos, para no desilusionar a nadie.
Marcelo De LiraMarcelo de Lira no quiere dejar muchas pistas que faciliten su captura por parte de las fuerzas del orden. Así es que promete no martirizarlo, pobre lector, extendiéndose en exceso sobre su persona (la suya lector, la suya). De Lira estudia la carrera de Comunicación Social, razón por la cual se debate a diario entre escritos de los más abominables científicos sociales. Se las rebusca para estar en desacuerdo con todos, aunque las malas lenguas (la del autor incluida) dicen que hace trampa y que utiliza argumentos desacreditados un instante antes para refutar los de turno.De Lira prefiere el choripán antes que el pancho. Pero esto no debe llevarnos a conjeturar apresuradamente sobre sus inclinaciones sexuales: el autor no deja de manifestar su amor ilimitado por las mujeres. Tan ilimitado que en ocasiones se ha pronunciado con sospechosa efusividad a favor del incesto diciendo que no tiene nada de malo mientras todo quede en familia.
El Manco del EspantoEl Manco del Espanto, tal como se lo conoce, estudia (aunque no sabe para qué) Licenciatura en Administracion de Empresas, pero como no piensa vivir de sus estudios se dedica a esperar el futuro comodamente en su casa.Debido a esta forma de vida ha logrado la completa desaprobación de sus padres y de sus hermanos, quienes le aconsejan que se suicide. A pesar del desaliento de sus seres más cercanos y también de los que han tenido la desgracia de conocerlo, sigue su lucha contra el destino (hasta el dia de hoy siempre perdiendo) argumentando que algún día encontrará una bella mujer que lo mantenga. El brillante autor aun cree que existe un lugar en la tierra reservado para él, donde pueda ser realmente quien quiere ser. Por eso es posible que se lo crucen en algún lugar de este planeta, buscando la felicidad.
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