Mónica Brandi nació en Córdoba, Argentina
en 1943.
Realizó estudios en la Escuela de Artes de la Universidad
Nacional de Córdoba entre los años 1964 y 1966.
Tiene trayectoria como docente de arte en diversos talleres privados
y oficiales de Córdoba. En los últimos años
enseña en el Colegio de Abogados de esta ciudad.
Entre otras actividades de aplicación artística, participó
como miembro de Jurados; fue colaboradora de ilustraciones en el
Suplemento Cultural del diario "Tiempo de Córdoba"
en 1981 y ejerció la dirección técnica durante
la construcción del Monolito Portal de la localidad de Río
Primero, Provincia de Córdoba.
Conocida en su labor artística primero como ceramista, disciplina
a la que dedicó varios años, incursionó luego
en otras técnicas, entre ellas, el grabado. Actualmente está
dedicada con mayor énfasis a la pintura sobre diversos soportes
tales como lienzo, papel y cajas.
Es una artista muy productiva que desde 1964 participa en muestras
individuales, colectivas y salones de arte de Argentina siendo premiada
en numerosas oportunidades.
En 1975 durante un viaje con estadía prolongada en España
realizó una exposición individual en la Sala "Poeta
Quintana" de Alicante.
Efectuó una muestra individual de Objetos en 1987 en Radio
Nacional, Córdoba.
En 1990 obtuvo el "Premio Pintura Intendencia" de la Municipalidad
de Córdoba.
En el mismo año expuso Pinturas en el Instituto Italiano
de esta ciudad.
En 1991 integró la exposición de 60 artistas plásticos
de origen italiano en la muestra "Herencia Italiana en el Arte
de Córdoba" realizada en Galería de arte Jaime
Conci y organizada por el Consulado de Italia en Córdoba.
En 1992 fue invitada por el Museo Provincial de Bellas Artes Emilio
A. Caraffa de Córdoba la mega exposición en ocasión
de los 400 años del descubrimiento de América en la
cual participó con una instalación artística.
Durante el 2000 una muestra individual de sus pinturas en cajas
organizada por Agencia Córdoba Cultura SE. recorrió
el interior de la provincia.
Está representada en colecciones privadas de Argentina y
Alemania y en las oficiales del Museo Municipal" Dr. Genaro
Pérez" de Córdoba y el Municipal de la Provincia
de San Luis, entre otros.
Su pintura se aísla de medios descriptivos y acomodaticios
evitando la belleza estéril. Son pinturas sin destino religioso
o mágico, no estrictamente estéticas en el sentido
tradicional sino empeñadas en ligar una marcha con la propia
vida.
Su investigación actual la aleja cada vez más del
documento como ilusión de lo real en una enérgica
búsqueda por sobrevivir con lo esencial: los personajes representados
no encuentran otra meta ni semejanza que " estar allí".
Paulatinamente soluciona una abstracción simbólica
de amplias referencias en el plano cultural americano de los discursos
sólidos y primigenios.
La obra de Brandi es en cierto grado marginal: separa la teoría
de la práctica, postulando que aquélla sólo
es permitida intelectualmente para otorgar al flujo afectivo la
posibilidad de protagonizar una figuración libre a la medida
de una real necesidad interior.
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