CONCLUSIÓN

Nos sorprende la inmensa cantidad de niños y niñas dedicados a la prostitución y pornografía infantil. No es posible y no se justifica con nada la demanda de estos servicios, es horrible mirar como crece este nacer de la humanidad, pero peor aún es descubrir que detrás de esto existen muchos intereses creados y alguien o algunos se llevan barbaridades de dinero, mientras se extingue el concepto: INOCENCIA, propia de un niño.¿Quién o quienes son los culpables?¿Son los padres, la familia, las autoridades?¿Quién puede hacer o decir algo al respecto? El silencio por parte de la sociedad sólo tranquiliza esta enfermedad, que tarde o temprano nos afecta a todos.

Con este proyecto quisimos demostrar (esperamos conseguirlo) que cada vez son mas los niños dedicados a prestar servicios sexuales; y, además hacerle saber a las personas lo que puede pasar cuando un niño se ve abandonado por su familia y atraído por parte de los dueños, a estos negocios asquerosos.

Nadie sabe nada y nadie dice nada (al menos eso parece) como si se tratara de un hecho completamente normal. Nadie se inmuta por lo que sucede enfrente.

Esto pasa en publico, nos preguntamos: ¿qué sucederá en donde hay pocas personas, en lo oscuro?. Por toda la información recolectada se hace obvio que esto sucede en primera instancia por conflictos en el ámbito familiar, nos referimos al abandono, el poco interés, la violencia y a algunos factores negativos como estos detalles que pueden empujar a un niño a este mundo de engaños y deseos mórbidos. La sociedad, con un silencio casi total y sin saberlo, minimiza y diluye el problema. Se trata de una demanda creciente, se trata de un silencio y de un problema que puede comenzar con la familia; es sabido que en el caso de otras atrocidades que sucede dentro de algunas familias, puede nacer el interés por parte de los niños a este tipo de practicas.

Este problema es universal, pero puede prevenirse, con cosas tan simples como la unión familiar, el amor a los hijos, el cuidado de los mismos, la denuncia de hechos relacionados con el tema, la educación sexual entre padres e hijos, y algunos detalles tan simples como estos, ¿es posible disminuir este problema o por lo menos prevenirlo en nuestros hogares?. Creemos que sí, todo depende de cada uno de nosotros al realizar esto, pero aun mas depende del Estado, este se tiene que responsabilizar y encargar de hacer cumplir los derechos de los niños, y de que cada uno de ellos se encuentre en un clima familiar apto para él, apto para su crecimiento y educación.

El avance de una sociedad no se mide por la ciencia, la tecnología, las guerras o los terroristas, se mide en todo casi por el bienestar de nuestros niños, son ellos la sonrisa del planeta, la sencillez de una mirada y honestidad y la inocencia que tanta falta hace; de que sirve contar con tantas cosas, si un niño se está prostituyendo allá afuera.

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