Estos puntos de referencia permiten determinar los pilares que fundamentan el equilibrio particular que caracteriza a una situación observada, bien sea la postura de otra persona o un fenómeno social o también puede ser un fenómeno cósmico que este ocurriendo. Estos pilares de equilibrio, se convierten en la herramienta que sitúa a la conciencia del observador dentro de la perspectiva propia del evento, otorgándole la posibilidad de evaluar las causas que fundamentan el fenómeno a profundidad, y permiten determinar causas y efectos que a simple vista no pueden ser comprendidos.
Esto forma parte del principio de que
todo lo que ocurre se encuentra en el marco del equilibrio universal,
y por lo tanto es regido por una serie de eventos trascendentes
directrices de todos los factores que influyen dentro de un determinado
ser, evento o fenómeno, que son los pilares fundamentales
de un todo.
Todo aquello que existe, forma parte
de un sistema que lo contiene a todo y a su vez, cada parte es
un sistema individual.
Estos sistemas, tiene como materia prima
energía, la cual, a su vez, tiene un nivel de conciencia
que la caracteriza y esta conciencia está determinada por
los pilares de equilibrio del sistema observado definidos por
la naturaleza de su origen y el desarrollo e interacción
con el entorno en el cual está, aquello que permite a este
sistema existir, coexistir e interactuar.
Esto determina que todo lo existente posee un microcosmos que posee su propio pilar fundamental de equilibrio alrededor del cual se basa todo lo que en el ocurre y la forma como este interactúa con su entorno.
Por ello, es necesario efectuar el proceso de ajustar la conciencia que poseemos dentro de las características del pilar fundamental de equilibrio de lo que deseamos comprender, y así tener la posibilidad de evaluar los factores que afectan de una manera u otra el sistema que deseamos comprender, bien sean otros hombres o el universo en general.
Al ejercitar esta práctica, se desarrolla la habilidad de efectuar comprensiones más profundas de los fenómenos y eventos cósmicos, así como de los eventos personales, ya que brinda la posibilidad de efectuar evaluaciones más objetivas de lo observado, bien sea hacia nuestro universo interior o exterior.
De éstas, la visión interior permite encontrar cual es la directriz elemental de nuestro propio ser, es decir, cual es el principal pilar de equilibrio que está dictado por nuestra esencia divina y que nos rige.
Además, en la medida en que nos centremos alrededor de este pilar fundamental conseguiremos identificar todo aquello que nos descompense y como lo hace, lo que nos facilita el camino para lograr un equilibrio interior, que como consecuencia, nos permitirá comprender también, como funciona la conciencia universal ya que al lograr este equilibrio, entramos en armonía con todos los seres existentes, todos los fenómenos cósmicos y con la voluntad universal que es a donde Dios quiere que todos y cada uno de nosotros nos dirijamos.
"Conócete a ti mismo y conocerás
al Universo y a los dioses".
Por Webgnostic 1997