LE SALIÓ EL TIRO POR LA CULATA

Camilo Estrada Luviano

Decía mi abuela: hay que vivir para ver y vaya que estamos viendo cosas que si no fuéramos de este país nos quedaríamos con la boca abierta, porque el surrealismo mexicano con el presidente en turno se ha hecho más surrealista de lo cualquiera hubiera esperado aún en un mundo fantasmagórico. Vicente Fox y Quesada llegó a la Presidencia de la República impulsado por una organización que él mismo hizo ad hoc, Los amigos de Fox, que avasalló al único partido que lo podía lanzar y que, por cierto, era al que pertenecía, el PAN. Por supuesto el, hasta entonces, sempiterno PRI permitió que su candidato perdiera porque podrían haber brotes de descontento difíciles de controlar y eso los gringos no estaban dispuestos a permitirlo por eso Don Vicente Fox y Quesada consiguió los mejores asesores allende la frontera norte y como había sido Director General de la Coca Cola para toda Latinoamérica le fue fácil organizar una campaña ágil, moderna, con mucho marketing, y pudo vender muy bien su imagen y ahí lo tenemos sentado en la silla que ha sido tanto de grandes hombres como de grandes canallas.

Pero lo que realmente sorprende es que él diga: "ciertamente no somos un gobierno de derecha; somos un gobierno de derechos" (versión estenográfica del programa radiofónico Fox en Vivo, Fox Contigo, Los Pinos 10/III/01) y que diga con gran desparpajo "en este sábado tan importante donde estamos dando la bienvenida a los zapatistas a la ciudad de México... La verdad es que ha funcionado con mucha tranquilidad, con mucha paz, esta marcha desde Chiapas hasta la Gran Tenochtitlán (sic): hoy ya están aquí los zapatistas, esperamos que el lunes se inicie ya el diálogo con la COCOPA, primero, y enseguida con el Congreso y que de hecho ya esto es el inicio del diálogo; el diálogo que hemos buscado todos los mexicanos y mexicanas, el diálogo ansiado que nos llevará a la paz. Así que, ¡bienvenido subcomandante Marcos, bienvenidos los zapatistas! ¡Bienvenidos a la arena política, a la discusión de las ideas y al trabajo de gran compromiso para sacar adelante a 10 millones de hermanos y hermanas indígenas de todo el país! (Ibid).

Posiblemente Vicente Fox y Quesada esté pensando en quitarle la chamba a doña Xóchitl para ofrecérsela a Marcos o a Tacho o a algún otro comandante del EZLN. De que es capaz de eso y de mucho más, lo es. Lo hemos visto y lo seguiremos viendo. Si hasta de cómico la ha hecho, de qué no será capaz. Pero estas tan efusivas palabras se las ha ganado Marcos a pulso y de paso ha hecho que muchos, si no todos los comandantes, reciban tal ofensa.

El Presidente de la República que se siente muy feliz y que "quisiera tener la boca más grande para tener una sonrisota todavía más amplia de cómo estoy disfrutando esto" (haber cumplido los primeros cien días en el puesto) (Ibid), bien que usa su boca para deslizar que "Es indispensable que unamos el sur con el norte... El propósito de esta Marcha hacia el Sur es llevar empleos, llevar maquiladoras, llevar grandes empresas, llevar los programas educativos, llevar los programas de salud, llevar adelante un ambiciosísimo programa de infraestructura carretera, de grandes ejes carreteros que van a conectar desde Canadá hasta Panamá, pero prácticamente en el sureste mexicano..." (Ibid).

Más claro no canta un gallo. Ese es el sueño de Bush. Que todo el continente esté atado a la economía de los capitalistas gringos y Vicente Fox y Quesada está dispuesto a hacer la obra negra para que el patrón quede contento y si para esto tiene que darle la bienvenida a Marcos, pues de la da; y si para esto tiene que engañar al pueblo mexicano diciendo que el diálogo con Marcos y algunos de los comandantes del CCRI nos llevará a la paz y que este diálogo lo han buscado mucho todos los mexicanos y mexicanas pues también lo hace. El diálogo no lo han buscado prominentes panistas, como el jefe Diego o San Ignacio de Loyola Vera ni lo han buscado dinosáuricos priístas y muchos otros mexicanos y mexicanas y el tal diálogo NO NOS LLEVARA A LA PAZ, porque la causa de la rebelión de los indígenas del sureste es la miseria en la que viven y ésa no se va a acabar con poner maquiladoras, mucho menos entregando el país a los gringos.

camiloel@minsky.eco.buap.mx