Artículo publicados en el diario Síntesis por: Miguel Santiago Reyes Hernández Para
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Publicado en Síntesisel 27 de Noviembre del 2000 CAMINITO A LOS PINOS .... PARA EL INICIO DEL FOXENIO / I Camilo Estrada Luviano Dicen los "grandes" del PAN, muchos de los cuales se encuentran en el FOBAPAN, aprobado en contubernio por panistas y priístas, en la LVII legislatura; que ellos ganaron la elección del 2 de julio de 2000. En el supuesto de que Fox no se hubiera montado en la burra vieja que era el partido que nació en contra de las medidas revolucionarias del General Lázaro Cárdenas, la Alianza por el Cambio obtuvo 15 988 725 votos que constituyen únicamente el 27.2% del total de los electores, cuya cifra se eleva a 58 789 209 ciudadanos. Con toda mala fe manejan que Vicente Fox obtuvo el 43.43% de los votos, pero este porcentaje se refiere única y exclusivamente a los votos emitidos que fue solamente el 62.57%, es decir, 36 781 572 votos, pues hubo una abstención del 37.43% lo que significa que 22 millones de ciudadanos, no pudieron o no quisieron ejercer su derecho al voto. Así que señores panistas bueno sería que dejaran a un lado su simpleza y empezaran a ver con objetividad la realidad. No ganó el PAN y Fox ganó solamente con el vergonzante 27.2% de los votos emitidos y aún en el colmo del entusiasmo falso y cínico de que los 2 millones que no votaron se los sumáramos a Fox, éste sólo llegaría al 30.6% del total de los electores. Pero, en primer lugar, esos dos millones que se abstuvieron, solamente un desquiciado mental puede pensar que serían votos para las botas de Fox y, en segundo lugar, de los casi l6 millones de votos que obtuvo Fox hay que descontar todos los votos de los matavíboras "Amigos de Fox". Señores panistas, ¿cuántos ciudadanos votaron por su partido? El hacerse ilusiones pueriles, por no decir la palabra más exacta, solamente le servirá a la cáfila de vendepatrias cocacoleros que andan con nuestro presidente electo que, como la Chimoltrufia, conforme dice una cosa dice otra, pero que tienen bien claros sus objetivos de servirle cada vez más y mejor a las instituciones de su amo que es el imperio gringo, aunque ellas sean disfrazadas como instituciones mundiales o internacionales y apoyar a esa caterva de traidores nos llevará inexorablemente al aumento de la miseria de la mayoría de la gente y al enriquecimiento cada vez mayor y más ofensivo de un ínfima minoría de la población. Este fenómeno es indefectible porque el capital sólo persigue la ganancia y cuando los dueños de él, los capitalistas y sus empleados, los gobernantes, se "preocupan de la gente" es para apagar o por lo menos detener los estallidos sociales que se incuban en tan excelente caldo de cultivo que es el yugo que con buena coyunda nos unce el imperio para servirle a sus intereses. Esto es lo que están haciendo los panistas como miembros de un partido que fue tomado por asalto por los grandes empresarios de "buen corazón". Y fue tomado por asalto por sus coincidencias ideológicas, trasnochadas la de los panistas y ultramodernas las de las Amigos de Fox que se sincretizaron para ofrecer changarros a la gente, como Zedillo ofreció "bienestar para tu familia" y ni uno ni otro cumplió ni cumplirá porque simple y llanamente no se pueden cumplir esas promesa, es imposible hacerlo con el imperio que nos tiene bajo su suela y que ahora nos tendrá, además, bajo unas, dicen que buenas, botas nacionales. Por eso, no es ninguna casualidad que los grandes personeros del gobierno priísta que entregará la estafeta a Vicente Fox se desviven por limpiar el caminito a los Pinos. Y eso lo está haciendo a la perfección, desde Ernesto Zedillo, pasando por los secretarios de estado, hasta el más humilde militante de ese verdadero ganador de las elecciones pasadas que fue, no Fox ni Fax, sino las decenas y decenas de años que el PRI ha dedicado a tejer esa gran red de negocios y complicidades que nos está matando de hambre a la inmensa mayoría de los mexicanos y en la que se encuentran asociados tanto panistas como priístas: ambos maman de la misma ubre. |