El año pasado varios grupos de estudiantes, entre ellos nosotros, los jóvenes comunistas, tomamos clara posición frente a las elecciones que vivíamos en ese momento : planteamos la única alternativa real de cambios, nos jugamos por REFUNDAR, es decir, desde la participación activa de todo el estudiantado fundar las bases de una nueva federación para la UC. El llamado fue a abstenerse, no votar para así dar paso a una Feuc democrática y pluralista, en consecuencia con nuevos estatutos.
¿Porqué era y continua siendo necesaria la refundación ? principalmente porque las condiciones estatutarias, y los manejos de facto de la Feuc no le permiten ser una alternativa real, plural y democrática de representación estudiantil. Es imposible canalizar a través de ella el creciente movimiento universitario del cual se supone nuestra organización estudiantil debiera formar parte generando movlización y debate.
En ese entonces ya establecimos el momento critico en el cual se encontraba y se encuentra la federación, la progresiva baja de participación en el proceso eleccionario, la falta de democracia en el mismo y la incapacidad de la organización para influir en el destino de la universidad,. Todos estos puntos se han ido reconfirmando desde el mismo momento en que terminaron las elecciones : el quórum se confirmo recién al segundo día a las 16:30hrs, se impuso de forma absoluta el proyecto de una sola de las listas por menos de 10 votos y la federación fue incapaz de detener el alza de aranceles demostrando una vez mas su absoluto sometimiento a rectoría.
Ya no necesitamos más pruebas y el tiempo nos urge es absolutamente indispensable una reforma estatutaria, no un maquillaje de la misma basura, sino que un cambio real que elimine la enorme concentración de poder que se instituye en la federación con la que se monopoliza la voz del estudiantado y se margina cualquier critica al sistema, es decir, lo que necesitamos tampoco son cambios cupulares como los que se pretende imponer por las clásicas comisiones creadas por Feuc o mini reformas incentivadas por un grupusculo de iluminados, la refundación debe nacer de todos, para que así el estudiantado se haga parte y responsable del proyecto de universidad, de nuestra universidad.
Terminemos definitivamente con nuestra propia y particular herencia de la dictadura. Para esto es que invitamos a participar, a abrir espacios de reflexión , a discutir el tema en los pasillos, a escribir sobre él en los diarios, en fin, a poner el tema sobre el tapete.