Reproducción del boca de fuego Cichlasoma meeki

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Reproducción del boca de fuego Cichlasoma meeki

Por: Bernardo Ascanio.

Meeki Bueno vamos al hecho que nos trae, el Cichlasoma meeki es un cíclido que muchas veces pasa desapercibido en los acuarios, ya que presenta un color grisáceo, solo salpicado por una ligera mancha rojiza y unos puntillos azules por el cuerpo, pero a este pez, como a todos, hay que verlo mantenido en plenas condiciones y sobre todo en época de reproducción, entonces es cuando sacan a relucir toda su librea amatoria y permítamen decirles que son todo un espectáculo.

El Boca de Fuego es originario de México, más concretamente de la península del Yucatán, y Guatemala, suele vivir en aguas claras y bien oxigenadas, con plantas en abundancia.

En la naturaleza llega a los 15 cm, pero los míos nunca han superado los 12 cm, siendo los machos algo más grandes que las hembras. Para diferenciar los sexos, podemos fijarnos en varios aspectos, si tenemos en cuenta los colores el macho presenta el pecho de un rojo intenso, mientras que la hembra es de un color anaranjado. Como en muchos peces de la familia Cichlasoma, los machos presentan un mayor desarrollo de las aletas terminando en punta, mientras que en las hembras son romas en los extremos. En el macho la aleta caudal está bordeada en rojo y la anal en negro. Otro aspecto que podemos tener en cuenta a la hora de diferenciar los sexos es que los ojos de los machos son oscuros, mientras que los de las hembras son azules.

meeki Los meeki que mantenía estaban en un acuario de 110 l., densamente poblado y con numerosas cuevas hechas con piedras y algunas macetas. Las condiciones del agua eran dureza: 10º Gh, Ph 7, temperatura 25º. La filtración se componía de una placa de fondo y un filtro biológico interno, que mantenían el agua perfectamente limpia. En estas condiciones se encontraban dos parejas. Generalmente he comprobado que el mantener varias parejas induce antes a la puesta a los peces, más que si mantenemos aislados a los peces. El mantener varios peces induce a la territorialidad de los mismos y a la formación de parejas, al menos es mi experiencia.

Pronto una pareja tenía como territorio casi la totalidad del acuario, un tronco hacía las veces de frontera entre las dos parejas. La abundante alimentación a base de una papilla de mejillón, corazón, arroz y zanahoria hizo que la puesta tuviera lugar pronto. Esta se produjo a última hora de la tarde y encima de una pizarra que estaba sobre el suelo de forma horizontal.

La puesta fue grande para ser la primera que tenían, unos 200 huevos. A los dos días ya no estaban los huevos, los alevines habían sido cogidos por los padres y depositados en un hoyo que habían hecho en el suelo. A los cuatro días ya nadaban libremente en el acuario y los padres por la noche los recogían y volvían a depositar en el hoyo, no siendo siempre el mismo, ya que pude comprobar que los trasladaron dos o tres veces de sitio.

Ante lo difícil que resulta alimentar a un cardumen de alevines en un acuario de 110 l. Opte por sacar a los mismos y trasladarlos a un acuario de 10 l. con agua del acuario de los padres. En este acuario fueron alimentados a base de artemia salina y con cambios frecuentes de agua, ya que los tanques pequeños suelen corromperse pronto. La alimentación debe ser abundante dado el numero de alevines que tendréis.

Dentro de este pequeño acuario tenía como único método de filtrado un filtro de esponja accionado por un compresor de aire.

A los dos meses tu única preocupación es que hacer con más de 150 pequeños bocas de fuego, y ahí no parará la cosa, porque si las condiciones se mantienen, pronto o ya mismo tendrás otro pequeño acuario lleno con los hermanos pequeños de estos.

Bueno espero que esto os anime a mantener y cuidar de nuestros maravillosos Bocas de Fuego, garantizo que la experiencia merece la pena.

Bernardo Ascanio