Cíclidos-Sp > Artículos

www.ciclidos.org

Sexo peligroso en el lago Victoria

Por:  Héctor T. Arita

Publicado originalmente en la sección "Del Bestiario", Revista Ciencias 50:20-22. (Con expreso permiso del autor).


            El 30 de julio de 1858, John Hanning Speke se convirtió en el primer europeo en contemplar la inmensidad del lago Victoria.   Speke formaba parte de la expedición de Richard Burton que pretendía encontrar la fuente de las aguas del río Nilo.  Después de haber descubierto el lago Tangañica en febrero de 1858, y tras haber comprobado que sus aguas no drenan hacia el Nilo, Burton y Speke siguieron caminos separados.  Cinco meses después, Speke tenía frente a sí la verdadera fuente del Nilo, pero su momento de gloria se transformaría poco tiempo después en tragedia.  Burton, sintiéndose traicionado por Speke, fustigó a su antiguo amigo y cuestionó acremente la noción de que el lago Victoria era la auténtica fuente del Nilo.   El día en que debía debatir públicamente con Burton en la sede de la Royal Geographic Society, Speke murió en condiciones extrañas durante una cacería, herido por su propia arma.

            Además de descubrir para los europeos las fuentes del Nilo, Speke, sin siquiera sospecharlo, encontró un verdadero laboratorio natural de evolución que en muchos aspectos supera a sitios más afamados, como las islas Galápagos o el archipiélago de Hawai.  Así como las Galápagos tienen sus pinzones y las tortugas gigantes que le dan nombre, el Victoria posee la más asombrosa de las faunas de peces en el mundo: entre 300 y 500 especies diferentes de cíclidos.  Los cíclidos son peces de agua dulce conocidos en México con diversos nombres, tales como mojarras y tilapias.  Son populares también entre los acuaristas a través de especies como el pez ángel, los discos y el cíclido boca de fuego.  Los cíclidos se distribuyen en América desde Texas hasta Sudamérica; en África desde Egipto hasta la provincia del Cabo, además de Madagascar; y existen también tres especies en la India y Sri Lanka. 

            La radiación evolutiva más espectacular de los cíclidos, por mucho, se ha dado en el África Centro-oriental, particularmente en los lagos Tangañica, Alberto y Victoria.  En este último, a través de mecanismos aún no bien comprendidos, han evolucionado varios centenares de especies con sutiles variaciones en sus hábitos de vida que se reflejan en diferencias morfológicas.  Existen, por ejemplo, especies con bocas grandes y labios engrosados que se alimentan de insectos.  Otras especies, de cuerpo más redondeado, boca más pequeña y diminutos dientes, son especialistas en alimentarse de pequeños caracoles.   Existen también especies que se alimentan de algas, que remueven los sedimentos en busca de alimento, que depredan a otros peces, etc.  Lo más increíble de este grupo es que todas estas especies, con la gran diversidad de formas que presentan, descienden de un ancestro común que existió hace no más de 200,000 años, de acuerdo con un estudio de DNA mitocondrial publicado en Nature a principios de los 90s, o no más de 12,500 años, según un reporte geológico publicado más recientemente en Science, que sugiere que el lago Victoria debió haberse secado por completo durante la última glaciación. 

            La posibilidad de que medio millar de especies hayan podido surgir a partir de un ancestro común en un lapso de unos cuantos miles de años es ciertamente fascinante y plantea un reto enorme para las teorías sobre la evolución de las especies: ¿Cómo explicar esta impresionante radiación adaptativa?  Para empezar, debemos recordar que estamos hablando de un lago enorme: 70,000 km2 de superficie y cerca de 3,300 km de orilla, equivalentes aproximadamente a la superficie del estado de Baja California y a un tercio de la extensión de los litorales de México.  Además, el lago es muy heterogéneo, con orillas rocosas intercaladas con playas y una fuerte variación en profundidad, así como una serie de islotes que producen condiciones particulares a su alrededor.  Esta heterogeneidad, aunada al gran tamaño del lago, ha llevado a algunos científicos a explicar la gran diversificación de los cíclidos del Victoria en términos de adaptación de cada especie a una combinación particular de hábitat y hábitos.  Esta teoría se sustenta en un proceso de especiación alopátrica, en la que poblaciones de una especie se ven separadas por algún tipo de barrera física que limita los encuentros entre los individuos, hasta que cada población se convierte en una especie separada.

            Para otros científicos, la especiación alopátrica no sería suficiente para explicar la multiplicación de los peces en el Victoria, y se han propuesto diferentes hipótesis basadas en procesos de especiación simpátrica, es decir de separación de una especie en dos o más especies nuevas sin que existan barreras físicas entre ellas.  Recientemente, O. Seehausen, de la Universidad de Leiden en los Países Bajos, y sus colaboradores han propuesto que el mecanismo que produce la diferenciación entre las especies de cíclidos en el lago Victoria es la selección sexual.  Se ha demostrado que las hembras de algunas especies de cíclidos son capaces de reconocer los colores de los machos.  En particular, hay hembras que prefieren aparearse con machos de color azuloso, mientras otras hembras prefieren los machos rojo-amarillentos.  En forma paralela, entre los machos existen individuos con colores claramente azulados o claramente amarillentos.  Una combinación de variación entre las hembras en sus preferencias por los machos y de variación en coloración entre estos últimos sería suficiente, de acuerdo con Seehausen y sus colaboradores, para producir barreras reproductivas dentro de las poblaciones, llevando eventualmente a la aparición de especies nuevas en forma simpátrica.

            Esta teoría de la selección sexual es sólo una de las muchas que se han propuesto para explicar el origen de la gran diversidad de cíclidos de los lagos africanos.  El debate continúa, pero las discusiones podrían ser fútiles de continuar el impresionante proceso de extinción que se está dando actualmente en el lago Victoria.  Sólo en la década de los 80s, hasta 200 de las especies de cíclidos podrían haberse extinguido, y en la actualidad casi todas las restantes están al borde de la desaparición.  ¿Qué es lo que está causando esta impresionante debacle ecológica?  Generalmente se culpa de la catástrofe a la introducción de la perca del Nilo (Lates niloticus), un pez que alcanza una talla tan grande—cerca de dos metros de largo y hasta 180 kg de peso—que se le conoce como “el elefante acuático”.  Hacia 1980, la perca del Nilo constituía algo así como el 2% del total de la pesca en el lago Victoria; para 1986, el porcentaje se había incrementado hasta el 80%, coincidiendo con bruscas disminuciones en el tamaño de las poblaciones de los cíclidos nativos.

            La causa de la extinción masiva de los cíclidos del Victoria parece ser más compleja que la simple acción de la perca del Nilo.  Aparentemente, una combinación de depredación por la perca, eutroficación del lago, con la consecuente disminución en la concentración de oxígeno, y pérdida de hábitat natural produjo un efecto de dominó que ha acabado con la mayoría de las especies nativas del lago.  Más recientemente, Seehausen y sus colaboradores han propuesto que el mismo mecanismo de selección sexual que habría originado la gran diversidad de los cíclidos podría haberse convertido en su perdición.  El incremento en la materia suspendida en el lago estaría produciendo mayor turbidez y una menor penetración de la luz, lo que causaría una reducción en la capacidad de los cíclidos hembras para distinguir los colores.  Esto a su vez provocaría que las hembras serían incapaces de reconocer a los machos de su propia especie, se hibridizarían con otros machos y de esa manera se perdería el delicado balance que permitía anteriormente la coexistencia de tantas especies de cíclidos endémicos.   La selección sexual se habría transmutado en un peligroso juego sexual que estaría llevando a los cíclidos a su extinción.

            Aunque es probable que otros factores más directos, como la contaminación o la depredación por la perca del Nilo, tengan una influencia más importante sobre la extinción de los cíclidos del Victoria, es interesante observar como la disrupción de un mecanismo de conducta tan sutil como la selección de la pareja para la reproducción puede tener consecuencias tan catastróficas como en el caso de los peces del Victoria.   La extinción masiva más impresionante de los últimos años sería causada simplemente por la incapacidad de los peces para reconocer sus parejas.  La gran riqueza que Speke nunca imaginó que existía en aquel lago que encontró un día de julio de 1858 podría haberse ya perdido para siempre.

 Lecturas adicionales:

Galis, F. y J. A. J. Metz.  1998.  Why are there so many cichlid species?  Trends in Ecology and Evolution 13:1-2.  Revisión del estado actual del conocimiento sobre la fauna de cíclidos del Victoria.

Wilson, E. O.  1992.  The diversity of life.  Belknap Press of Harvard University Press, Cambridge.  En el capítulo 7 (Adaptive radiation) se presentan varios ejemplos de grupos de animales que han alcanzado gran diversidad: pinzones de las Galápagos, pájaros de Hawai, tiburones y los cíclidos del lago Victoria.

Seehausen, O. et al.  1997.  Cichlid fish diversity threatened by eutrophication that curbs sexual selection.  Science 277:1808-1811.

 

| Página Principal | Artículos en línea | Galería | Grupo Ciclidos-Sp | Bibliografía | Enlaces | Colaboradores | E-mail |