MIRADOR
Como Una Dama
Leí esta historia. La dama de elevada alcurnia decidió invitar a una niñita pobre a merendar, como parte de sus actos de caridad.
Tan pronto la niñita entró en la elegante mansión paseó una mirada escrutadora a su alrededor y dijo a la señora:
-Procuren siempre tener su casa limpia. Eso evita muchas enfermedades.
La señora se sorprendió por aquella observación.
-Trabaja su marido? - pregunta con acento severo la chiquilla.
-Claro que trabaja!- prorrumpe estupefacta la señora. -Por qué me lo preguntas?
-Que no deje de trabajar - dice la niña.- Y tanto él como usted manténganse alejados del alcohol.
-Oye niña grosera! - estalla la mujer-. Cuando alguien te invite a su casa debes portarte como una dama!
-Me estoy portando como una dama - responde la pequeña -. Eso es lo que nos dicen las damas que van a nuestra casa a hacer la caridad,
Armando Fuentes Aguirre
Saltillo, Coahila, noviembre de 1997
