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Octavio paz Los lectores de poemas, siempre pocos aunque sean muchos, participan individual y colectivamente en lo inmenso. ¿Y que es lo inmenso? Aquello que no tiene medida o aquello que es imposible medir o calcular. Los muchos-pocos que leen poemas se internan en realidades inconmensurables y, en esos espejos de palabras, descubren su propia infinitud. La lectura de un poema conecta al lector con una zona transpersonal, y, en el sentido recto de la palabra, inmensa. Ese contacto es casi siempre, breve. A veces cabe en cinco palabras:
POESIA
"Muerte sin fin", José Gorostiza leer
"Alas" Enrique González Martínez leer
"Jardines místicos" Juan Ramón Jiménez leer
"He anhelado alejarme..." Dylan Thomas leer
D'altri diluvi una colomba ascolto....
De otros diluvios una paloma escucho