|
ASEDIO
AL CAMPAMENTO GOBLIN
El asedio a este campamento, es una historia en la que podremos llegar a
comprender la importancia de formar grupos y la potencia de los mismos cuando
las clases de sus miembros son variadas.
Todo comenzó una lluviosa noche en el bosque cercano a la ciudad de
Kaladin (ciudad de los enanos), en este lugar abunda la caza y esta poblada de
seres indeseables: orcos, goblins, esqueletos y otros más que representan una
seria amenaza para un solitario viajero. Tal y como os iba contando yo me
encontraba cazando en el cruce de caminos al sur de Kaladin, allí se
encontraban otros muchos como yo, cazando animales y exterminando monstruos de
todo tipo. Tras una hora de intensa caza, apareció en la fría y húmeda noche
una silueta blanca, delgada, aparentemente femenina, que se aproximaba hacia
nosotros, parecía herida y tras ella podía distinguirse un gran numero de
seres que parecían acompañarla.
Al cabo de unos segundos aquella mujer se desplomó, y sus acompañantes
comenzaron a golpearla; nosotros, al menos la gran mayoría corrimos a
auxiliarla, éramos unos 10: 2 magos elfos, 2 guerreros humanos, 2 guerreros
enanos, 1 druida elfo del bosque, 1 clérigo enano, 1 clérigo humano y yo 1
paladín enano; al acercarnos tan solo unos metros nos dimos cuenta de que no
eran acompañantes sino un elevado numero de goblins ( como unos 15
aproximadamente, entre ellos 2 Goblin Magos y 1 Goblin Shaman)que atacaban a la
muchacha mientras ella agonizaba en el suelo, emprendimos una dura lucha contra
ellos para intentar salvar a aquella bella elfa que ya yacía muerta, yo intenté
imponerle las manos pero ya era tarde, había perdido mucha sangre y su corazón
ya no latía, así que no perdí mas tiempo y desenvainé mi espada para luchar
al lado de mis compañeros, mi primera intención era proteger a los dos clérigos
para que no les molestaran mientras curaban a los guerreros, pero me di cuenta
de que quien realmente corrían peligro de muerte eran los magos, comencé a
cubrirlos hasta que los dos guerreros humanos se pusieron a mi lado, tras esto
creí que nuestros magos estaban lo suficientemente protegidos así que me
dispuse a atacar al Shaman goblin que era el que yo consideraba de mayor
peligro, así fue me enzarce con el en una dura batalla que casi me cuesta la
vida, siempre con un clérigo a mi espalda que no paraba de lanzarme conjuros
curativos y de protección, hasta que al fin el maldito goblin doblo las
rodillas para caer muerto ante el clérigo y yo, que aunque exhaustos, retomamos
la lucha contra uno de los magos goblin, nada pudimos hacer por nuestros compañeros
el druida y los magos, que cayeron muertos ante los despiadados y sanguinarios
guerreros goblin, pero logramos derrotar al resto de la avanzadilla goblin,
obligando así a retirarse huyendo al resto de la comandancia. Recogimos los cadáveres,
mientras los guerreros perseguían y mataban a los goblin huidos, los acercamos
a la posada a la espera de que sus resucitados dueños vinieran a buscarlos.
Mientras tanto los clérigos y yo curábamos a los heridos, y los guerreros
registraban los cuerpos en busca de dinero o armas. Al fin llegaron, todos,
incluso la elfa, la cual nos contó la historia por la que había sido
perseguida por los Goblins, resulto ser que había un gran campamento goblin a
unos 3 o 4 Km de donde nosotros estabamos y que ella y unos novatos elfos se
dirigían hacia Kaladin en busca de aventuras, cuando fueron sorprendidos por un
grupo de 4 goblins que no dudaron ni tan solo un segundo en atacar al grupo. Los
novatos elfos fueron cayendo en combate, pero cuando la situación parecía casi
controlada, una nueva horda de goblins ahora más poderosa que antes acabo con
todos los elfos excepto con la
guapa elfa, que logro llegar hasta nosotros. Todos
comenzamos a encorajinarnos al oír esta horrenda y injusta matanza, así que
todos, absolutamente todos, decidimos preparar un ataque al susodicho
campamento, con la única pretensión de vengar a nuestros compañeros, así
pues comenzamos a idear una estratagema: Haríamos una primera línea de
guerreros que no avanzarían hasta que no los tuviéramos lo suficientemente
cerca como para que nuestros magos y clérigos pudieran correr peligro, la
siguiente línea sería la de clérigos en la que yo me encontraría y por último
la de los magos, que son más débiles físicamente hablando. La estrategia era
la siguiente: en primer lugar el druida iría y llamaría la atención para que
lo siguieran, los clérigos y yo cogeríamos el arco y en cuanto tuviéramos la
horda a tiro, comenzaríamos a lanzar conjuros junto a los magos y a disparar
flechas. Seguidamente los guerreros comenzarían a avanzar para lograr dejar un
espacio entre ellos y nosotros de vital importancia especialmente para los
magos; rápidamente los guerreros envolverían al druida para protegerlo y
nosotros desenvainaríamos la espada mientras los magos continuarían lanzando
hechizos. Mi misión junto a la de los clérigos sería la de velar por la salud
de nuestros guerreros y la de intentar eliminar a los magos goblin y a sus
shamanes, en teoría debía salir bien. Comenzamos nuestro ataque, el druida un
poco asustado se acerco al poblado lentamente, de repente lo vimos comenzar a
correr hacia nosotros, el bosque se queda en silencio al oír el ensordecedor
gemido de guerra de los goblins que nos hizo estremecer e incluso puedo asegurar
que me llegaron a temblar las piernas, pues tal y como previnimos una horda de
aproximadamente 15 goblins corrían de una forma poco estratégica y menos aún
organizada hacia el pobre druida que corría ya sin aliento. De entre los 15
goblins podía distinguirse 3 magos y 2 shamanes, comenzamos a lanzar hechizos y
a disparar flechas un inmenso haz de luces de todos los colores golpeaban contra
los verdes y encorvados cuerpos de los goblins, era un espectáculo digno de
ver, comenzaron también a impactar las flechas, logramos herir de bastante
gravedad a varios pero no abatimos a ninguno, yo comencé a lanzar hechizos de
ceguera para así al menos intentar que sus lanzadores de hechizo no pudieran
utilizarlos; logre inutilizar a 3 ( los dos shamanes y 1 mago) durante unos
breves pero esenciales minutos; al fin el druida llego y los guerreros avanzaron
hasta lograr envolver al druida y comenzar una lucha salvaje contra los
guerreros goblins; nosotros desenvainamos las espadas y corrimos hacia los
shamanes y magos parando para ayudar a nuestros guerreros curando sus heridas y
proporcionándoles protección; yo me dirigí directamente al druida y le impuse
las manos para sanarlo, rápidamente se levanto y desenvaino, juntos fuimos a
por los shamanes que ya habían recuperado la vista y que estaban haciendo
estragos con nuestros magos; el primer shaman ya estaba muy debilitado ya que
las flechas y los conjuros lo habían herido lo suficiente como para dejarlo
casi fuera de combate, por lo que con el primer impacto de mi espada cayo al
suelo y comenzó a desangrarse. Mi compañero el druida comenzó a luchar con el
único shaman que quedaba en pié, también parecía estar algo debilitado por
lo que decidí ayudar a los otros clérigos que estaban intentando eliminar a
los magos, ya yacía uno en el suelo por lo que ataque al que parecía estar más
entero; mientras tanto los guerreros casi al limite de sus fuerzas comenzaban a
controlar la situación ya casi habían exterminado a los guerreros goblins y
solo había muerto 1 guerrero enano. Nuestros magos exhaustos y casi sin magia
en sus cuerpos estaban en el suelo mirando e intentando recuperar fuerzas, para
seguir luchando; nosotros acabamos con todos los magos y nos dirigimos a ayudar
al druida que por desgracia permanecía inmóvil en el suelo mientras que el
shaman goblin intentaba huir, pero no lo logro, saque una daga y se la lance
teniendo la fortuna de acertar en el cuello y matar al maldito shaman.
Intentamos curar al druida pero todo parecía imposible, al fin lo logramos y
con el y el resto del grupo comenzamos a recoger los cuerpos y sus pertenencias
para llevarlos a un lugar a salvo de los ladrones y otros goblins, mientras los
guerreros registraban los cadáveres del enemigo y cogían el dinero y
pertenencias de estos para repartirlos con nosotros. Así
fue como un grupo de personajes débiles como nosotros venció a una feroz e
imparable horda asesina siendo posible gracias a tres factores: la estrategia,
la organización y lo más importante el grupo. Aun
en mi mente queda el recuerdo de aquel estremecedor alarido de guerra goblin que
seguramente recordare por siempre, pero cierto es que a mis amigos nunca los
lograré olvidar. *Nota:
"La unión hace la fuerza". ESCRITO
POR: Sharka (Enano Paladín) CLAN: Angelical Demons (Españoles) SERVER: Ayonae
Ro FECHA:
26 Diciembre de 2000. Si tenéis alguna historia o queréis comentar algo sobre las aquí expuestas, tan solo tenéis que escribirnos a uno de los mail que se encuentran en la cabecera.Gracias. |