B'resheet (Génesis) Capítulo 40

B'resheet 40:1-4 Y ACONTECIO después de estas cosas, que el copero del rey de Egipto y el panadero delinquieron contra su señor el rey de Egipto. Y enojóse Faraón contra sus dos eunucos, contra el principal de los coperos, y contra el principal de los panaderos: Y púsolos en prisión en la casa del capitán de los de la guardia, en la casa de la cárcel donde José estaba preso. Y el capitán de los de la guardia dió cargo de ellos á José, y él les servía: y estuvieron días en la prisión.

Después de estas cosas, después de que metiesen a Yosef en la cárcel, estos dos oficiales también fueron encarcelados.

Yosef encargado de ellos. Hasta en la cárcel Di-s estuvo con Yosef, que había impresionado a sus superiores incluso estando en la cárcel y le habían concedido un cierto nivel de responsabilidad.

B'resheet 40:5-8 Y ambos á dos, el copero y el panadero del rey de Egipto, que estaban arrestados en la prisión, vieron un sueño, cada uno su sueño en una misma noche, cada uno conforme á la declaración de su sueño. Y vino á ellos José por la mañana, y mirólos, y he aquí que estaban tristes. Y él preguntó á aquellos eunucos de Faraón, que estaban con él en la prisión de la casa de su señor, diciendo: ¿Por qué parecen hoy mal vuestros semblantes? Y ellos le dijeron: Hemos tenido un sueño, y no hay quien lo declare. Entonces les dijo José: ¿No son de Dios las declaraciones? Contádmelo ahora.

Tuvo un sueño: La interpretación de los sueños era algo de suma importancia en Egipto en aquel tiempo. Los egipcios creían que los sueños podían informarles acerca el futuro y Yosef correctamente le concede el crédito a Di-s.

En la Biblia hay dos personas a las que usó Di-s para interpretar sueños: Daniel y Yosef. Ambos se anduvieron con cuidado para no adjudicarse el crédito a sí mismos, sino darle el crédito a Di-s por el significado de los sueños y ambos interpretaron sueños para reyes paganos.

A nosotros se nos advierte que no prestemos atención a los soñadores paganos.

Deuteronomio 13:1-5 CUANDO se levantare en medio de ti profeta, ó soñador de sueños, y te diere señal ó prodigio, Y acaeciere la señal ó prodigio que él te dijo, diciendo: Vamos en pos de dioses ajenos, que no conociste, y sirvámosles; No darás oído á las palabras de tal profeta, ni al tal soñador de sueños: porque Jehová vuestro Dios os prueba, para saber si amáis á Jehová vuestro Dios con todo vuestro corazón, y con toda vuestra alma. En pos de Jehová vuestro Dios andaréis, y á él temeréis, y guardaréis sus mandamientos, y escucharéis su voz, y á él serviréis, y á él os allegaréis. Y el tal profeta ó soñador de sueños, ha de ser muerto; por cuanto trató de rebelión contra Jehová vuestro Dios, que te sacó de tierra de Egipto, y te rescató de casa de siervos, y de echarte del camino por el que Jehová tu Dios te mandó que anduvieses: y así quitarás el mal de en medio de ti.

B'resheet 40:9-13 Entonces el principal de los coperos contó su sueño á José, y díjole: Yo soñaba que veía una vid delante de mí, Y en la vid tres sarmientos; y ella como que brotaba, y arrojaba su flor, viniendo á madurar sus racimos de uvas: Y que la copa de Faraón estaba en mi mano, y tomaba yo las uvas, y las exprimía en la copa de Faraón, y daba yo la copa en mano de Faraón. Y díjole José: Esta es su declaración: Los tres sarmientos son tres días: Al cabo de tres días Faraón te hará levantar cabeza, y te restituirá á tu puesto: y darás la copa á Faraón en su mano, como solías cuando eras su copero.

Era preciso que el faraón pudiese confiar totalmente en el jefe de los coperos porque estaba en una situación en la que le podía meter algo en el vino del Faraón para matarle de haber estado aliado con los enemigos del faraón.

B'resheet 40:14-15 Acuérdate, pues, de mí para contigo cuando tuvieres ese bien, y ruégote que uses conmigo de misericordia, y hagas mención de mí á Faraón, y me saques de esta casa: Porque hurtado he sido de la tierra de los Hebreos; y tampoco he hecho aquí porqué me hubiesen de poner en la cárcel.

La tierra de los hebreos. En aquella época el resto del mundo no se refería a la Tierra Prometida como Israel y esto es algo que todavía hoy continua sucediendo. La familia de Yosef no habían tomado aún posesión de la tierra, no eran más que extraños en ella. Yosef refiriéndose a ella como la tierra de los hebreos muestra que había entendido la promesa de Di-s.

La letra que corresponde a este capítulo es Tzaddi-justicia y humildad.

Aquí vemos a Yosef afirmar que no ha hecho nada para merecer su castigo. Yosef interpreta el sueño con la ayuda de Di-s. "¿Acaso no pertenecen las interpretaciones a Di-s?

Yosef le da su palabra de que será restablecido a su puesto y categoría anterior y le pide que se acuerde de él cuando sea restablecido.

Yosef y los otros dos hombres son además simbólicos de Yeshua y los dos ladrones en el palo de la ejecución a Su lado, cosa que habría de suceder bastante tiempo después, en el futuro de esa época. En este caso el buen ladrón afirma la justicia de Yeshua.

Lucas 23:40-43 Y respondiendo el otro, reprendióle, diciendo: ¿Ni aun tú temes á Dios, estando en la misma condenación? Y nosotros, á la verdad, justamente padecemos; porque recibimos lo que merecieron nuestros hechos: mas éste ningún mal hizo. Y dijo á Jesús: Acuérdate de mí cuando vinieres á tu reino. Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo, que hoy estarás conmigo en el paraíso.

Aquí no solo vemos al buen ladrón afirmar que Yeshua no ha hecho ningún mal, sino que se humilla a sí mismo y afirma que él sí ha obrado mal. A continuación el ladrón le pide a Yeshua que se acuerde de él cuando llegue a su reino. Esto contrasta con el caso de Yosef, que pide al jefe de los coperos que se acuerde de él cuando le restablezcan a su puesto anterior, en lo que podríamos considerar un paraíso en la tierra en aquella época. Yeshua se levantaría después de haberse humillado a sí mismo en el palo de la ejecución y después, en tres días, volvería a recuperar su gloria anterior, pero además El gobernará en la tierra cuando empiece el tercer milenio después de su muerte correspondiendo un año con los mil años del Señ-r.

2 Pedro 3:8 Mas, oh amados, no ignoréis esta una cosa: que un día delante del Señor es como mil años y mil años como un día.