Juan Capítulo 17

La letra décimo séptima del alfabeto hebreo es la Peh, que significa boca.

Todo el capítulo es la oración que hace Yeshua antes de Su muerte.

Esta oración puede dividirse en 7 peticiones diferentes.

Petición 1: Que Yeshua pueda ser glorificado como el Hijo que ha glorificado al Padre.

Juan 17:1 ESTAS cosas habló Jesús, ...

En los versículos 1 al 5 Yeshua oró por Sí mismo.

Juan 17:1 ... y levantados los ojos al cielo, dijo: Padre, la hora es llegada; glorifica á tu Hijo, para que también tu Hijo te glorifique á ti;

Salmos 2:12 Besad al Hijo, porque no se enoje, y perezcáis en el camino, Cuando se encendiere un poco su furor. Bienaventurados todos los que en él confían.

Juan 17:2-4 Como le has dado la potestad de toda carne, para que dé vida eterna á todos los que le diste. Esta empero es la vida eterna: que te conozcan el solo Dios verdadero, y á Jesucristo, al cual has enviado. Yo te he glorificado en la tierra: he acabado la obra que me diste que hiciese.

El había acabado la obra que tenía que hacer como Yeshua ben Adam (la humanidad descrita en Lucas) y debido a que fue cortado tendrá que regresar un día como Yeshua ben David en Su gloria.

Petición 2: Por la restauración de la gloria eterna.

Juan 17:5 Ahora pues, Padre, glorifícame tú cerca de ti mismo con aquella gloria que tuve cerca de ti antes que el mundo fuese.

Su gloria ha permanecido oculta. El prefirió sufrir como Moshe prefirió sufrir en lugar de recibir las bendiciones de lo alto.

En los versículos 6 a 19 oró por Sus talmidim.

Juan 17:6 He manifestado tu nombre á los hombres que del mundo me diste: tuyos eran, y me los diste, y guardaron tu palabra.

El Padre nos guía al Hijo y a que guardemos las palabras que El habló.

Juan 17:7-8 Ahora han conocido que todas las cosas que me diste, son de ti; Porque las palabras que me diste, les he dado; y ellos las recibieron, y han conocido verdaderamente que salí de ti, y han creído que tú me enviaste.

Deuteronomio 18:18-19 Profeta les suscitaré de en medio de sus hermanos, como tú; y pondré mis palabras en su boca, y él les hablará todo lo que yo le mandare. Mas será, que cualquiera que no oyere mis palabras que él hablare en mi nombre, yo le residenciaré.

Juan 17:9-10 Yo ruego por ellos: no ruego por el mundo, sino por los que me diste; porque tuyos son: Y todas mis cosas son tus cosas, y tus cosas son mis cosas: y he sido glorificado en ellas.

El Padre le concedió al Hijo la autoridad sobre nosotros. Lo que le pertenece al Hijo le pertenece al Padre y Yeshua recibe toda la gloria por todo lo que El hace por medio de nosotros.

Petición 3: Por la seguridad de los creyentes en el mundo (v. 11) y del maligno (v. 15).

Juan 17:11 Y ya no estoy en el mundo; mas éstos están en el mundo, y yo á ti vengo. Padre santo, á los que me has dado, guárdalos por tu nombre, para que sean una cosa, como también nosotros.

Uno es una unidad compuesta.

El habla como si estuviese fuera del mundo antes de que hubiese sucedido y también los profetas hablaron acerca de lo que Di-s haría antes de que sucediese y lo recibieron del Padre.

Juan 17:12 Cuando estaba con ellos en el mundo, yo los guardaba en tu nombre; á los que me diste, yo los guardé, y ninguno de ellos se perdió, sino el hijo de perdición; para que la Escritura se cumpliese.

El Hijo de la Perdición es una referencia a Y'hudah Ben-Shim'on de K'riot (Judas Iscariote).

Y'hudah fue poseído por el mismo Satanás y este tomará posesión del Antimesías en el futuro, durante el periodo de la tribulación (también conocido como el Tiempo de la Aflicción de Jacob).

2 Tesalonicenses 2:3 No os engañe nadie en ninguna manera; porque no vendrá sin que venga antes la apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición,

Juan 17:13 Mas ahora vengo á ti; y hablo esto en el mundo, para que tengan mi gozo cumplido en sí mismos.

El Mesías llena nuestro vacío con gozo, paz, amor y paciencia.

Juan 17:14 Yo les he dado tu palabra; y el mundo los aborreció, porque no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo.

El no es del mundo sino de lo alto y al igual que El no disfrutaremos del beneplácito de los que nos rodean por no ser como el mundo.

Juan 17:15 No ruego que los quites del mundo, sino que los guardes del mal.

No tenemos que apartarnos u ocultarnos. Debiéramos tener una vida transformada y ser una luz que los demás puedan ver.

El nos ha pedido que transmitamos las Basar (buenas noticias) al mundo.