INTRODUCCIÓN

            El sector de telecomunicaciones ha estado sumergido en una etapa de cambios regulatorios que ha transitado desde la tradicional estructura monopólica en los servicios básicos hacia una mayor apertura en la totalidad del sector. Este proceso de transformación, por el que han tenido que pasar tanto las empresas como las instituciones gubernamentales, ha afectado el desenvolvimiento del sector.

            Así mismo, la evolución tecnológica ha transformado la concepción misma de "servicio público" tenida tradicionalmente hacia las telecomunicaciones, particularmente en telefonía de voz y la radiodifusión, adoptando en su lugar una concepción que la considera una "actividad privada de interés general". Esto implica el franco reconocimiento de la actuación fundamental de los agentes privados en el desarrollo del sector y la renuncia de la reserva de la actividad a favor del Estado.