El editorial

El Palantir.

Microcosmos en forma, Macrocosmos en paz.

Remitiéndonos a la antigua filosofía de los griegos queremos iniciar este editorial con la idea de lo que representa para nosotras la verdadera “Salud” del planeta.

Cuando pensamos en un microcosmos y en un macrocosmos nos viene a la cabeza una idea de globalidad, como cuando observamos el universo, por eso mismo a veces y especialmente ahora hemos querido pensar lo importante que sería vivir nuestra vida de forma que podamos abrirnos globalmente. Global no debe leerse en esta ocasión como familiar semántico de  Globalización, sino más bien como el concepto que trata de implicarnos a todos, con nuestras diferencias y nuestras similitudes.

El hombre actual no difiere en nada del hombre antiguo, en tanto que seguimos teniendo el mismo cuerpo el mismo corazón y la misma mente, sin embargo nuestra forma de comprender el mundo ha cambiado sustancialmente, tal y como antes los hombres tenían una capacidad muy limitada para conocer el mundo y un gran porcentaje ansiaba explorarlo, imaginarlo, hoy en día hay muchas posibilidades de conocerlo y aún así el hombre comete el mismo viejo error de siempre, querer que el mundo y sus diferentes pueblos se comporten como él. De esto se deduce que de un corazón cerrado surge la visión y el comportamiento de un mundo cerrado, sin posibilidad de comportamientos divergentes. Este corazón cerrado no podrá aceptar a los demás tal y como son, porque tiene su propia imagen delante de  ellos, este corazón cerrado paraliza cualquier movimiento hacia adelante, cualquier movimiento hacia un avance positivo al juzgar de forma negativa todo lo que no esté escrito en su código de valores. A este corazón le falta amor y le falta valor para perder el miedo, para poder admirar y no juzgar.

A veces tenemos un corazón cerrado porque carecemos de una visión que nos ayude a comprender la perspectiva de nuestros horizontes, de las posibilidades que tenemos en esta vida para ser felices, para realizarnos profesionalmente, para salir de los problemas o para no crearnoslos, no es lo mismo que no estar abierto a las diferencias o a los demás, es otro tipo de dolencia del corazón, que es estar cerrado uno mismo: ser ciego no para los demás no para el mundo pero si para el alma, para hacerse un hueco, para tener tu propia voz. Nosotras que acabamos de terminar la Universidad sabemos muy bien lo que es cerrar una etapa, ahora tenemos que aprender lo que es abrir otra y para eso necesitamos dos cosas principalmente. Un corazón abierto a las nuevas oportunidades, un corazón capaz de crear estas oportunidades y la mente ávida de conocimientos y   de recursos. Y necesitamos soltar lastre, para poner estas naves en su rumbo adecuado, necesitamos emular a Alejandro cuando clavó su lanza sobre Asia y saltó del barco tras ella, necesitamos esa determinación para encontrar nuestro objetivo, su valor y salud, para poder saltar tras ella y no quedarnos en el barco.

Cuando deseamos salud de amor y paz para el nuevo año, en este caso, tal y como hicimos en el editorial pasado,  son palabras llenas de significado, porque para vivir una vida completa necesitamos Salud, Amor y Paz porque en un microcosmos con salud, y en forma mental y física, aportará al macrocosmos salud y bienestar. Porque el amor es el gran motor frente al odio, porque nos ayuda conocernos a nosotros mismos a aceptarnos y aceptar a los demás de buena gana, sin expectativas, sin control y sin esperar que los demás hagan lo que nosotros queramos.Y porque la paz es el equilibrio perfecto, es comprender que la vida está por encima de nosotros.

Propósito para este año: tener buena salud física y mental para poder seguir nuestros sueños e ilusiones, Ser bonitas por dentro y por fuera, encontrar un trabajo en el que realizarnos, encontrar más amor y que nuestro corazón lo acepte, soltar lastre, que alguien más conozca a Alejandro y Hefestion, hacer más música buena y que la gente la conozca, vernos más con nuestros amigos y amigas. Viajar al fin a Grecia, ser felices.

Pensad como sería un mundo sin guerra, es el mundo que nosotras queremos, sencillamente es posible.

Orgullosas de aquellos que encuentran la luz aún en la más profunda oscuridad:

Este foto es una dedicatoria a Brian Joubert que tanta ilusión nos trajo¡Ánimo campeón! ¡Recupera tu salud totalmente muy pronto!

esta foto es una celebración del gran concierto al que fuimos en Barcelona ¡Fue estupendo! ¡Os veremos en mejores circunstancias! (y esto no es por los músicos)

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