EL MERCURIO de la Salud
Número 23 - Agosto de 1998


MEDIOAMBIENTE
Gasoductos en Salta y Jujuy


El Senado de la Nación, el 15 de julio de este año, aprobó con orden del día nº 543 el Proyecto de Comunicación del Senador Antonio F. Cafiero, solicitando informes sobre la construcción de los gasoductos Norandino y Atacama.

En el proyecto “las Comisiones de Combustibles y de Ecología y Desarrollo Humano ven con agrado que el Poder Ejecutivo Nacional por intermedio de los organismos pertinentes, (...) se sirva de informar sobre los siguientes aspectos relacionados con los ductos Norandino y Atacama que transportarán gas natural de los campos gasíficos de la cuenca noroeste de la Provincia de Salta hasta Tocopilla y el puerto de Mejillones, respectivamente, en el norte de Chile:

· Si se han llevado a cabo los estudios hidrológicos, morfológicos, geológicos, sismológicos y meteorológicos del área en cuestión con el fin de prever y minimizar los posibles daños de los ductos (descalces, roturas, deslizamiento, etcétera).
· Si se han realizado los mapas temáticos de riesgo, señalizando las zonas más vulnerables en las trazas proyectadas.
· Si se conocen características y componentes de la eco-región y si se han evaluado las posibles repercusiones de las actividades de construcción de los gasoductos en la flora y fauna existentes.
· Si está prevista la incorporación de consideraciones ambientales en la selección de tecnologías, emplazamiento, escala y diseño de las obras a fin de respetar las peculiaridades distintivas de la eco-región.
· Si se ha elaborado un plan de aprovechamiento integral y sustentable que contemple las transformaciones en la actividad socioeconómica local y la vinculación del emprendimiento con los habitantes de la región.
· Si se han proyectado las actividades de trazado de carreteras, excavaciones, movimientos de tierra, terraplenes, etc., de manera tal que se minimicen las alteraciones que se puedan causar al ambiente natural e histórico-cultural.”

La construcción de los gasoductos Atacama y Norandino se presenta, a primera vista, como un factor dinámico e impulsor del desarrollo regional del país. Sin embargo, la posibilidad de que el proceso de desarrollo cause daños ambientales graves, lo que a su vez menoscabará la calidad de vida de las generaciones presentes y futuras, obliga a aumentar las previsiones destinadas a coordinar y planificar las actividades u obras proyectadas.

Los ductos, obras de ingeniería destinadas al transporte de distintos fluidos líquidos, gaseosos y eléctricos, pueden causar efectos no deseados sobre las personas y el ambiente.

Los mapas de riesgo en los cuales se marcan las áreas más vulnerables en la traza de las obras permiten estar alerta ante cualquier contingencia y minimizarla.

Los fundamentos del pedido de informes mencionan que “las trazas elegidas atraviesan un ecosistema o provincia fitogeográfica llamada Yunga o selva tucumano-oranense: selva higrófila subtropical de montaña con una superficie estimada de 4,5 millones de hectáreas y que ocupa las laderas orientales de la montaña que desde Tucumán hasta el límite con Bolivia, forman el borde del gran sector montañoso del noroeste.

Esta eco-región, con homogeneidad en lo biológico y lo climático, es una franja irregular que oscila entre 30 y 80 km. de ancho y alcanza los 650 km. de largo ubicada en las quebradas y faldeos de las sierras subandinas de las provincias de Salta, Jujuy y Tucumán.

En algunos tramos del trazado proyectado se encuentran asentamientos de comunidades indígenas, sus casas, sembrados y campos de pastoreo y que tienen escasas opciones para su reacomodamiento. Asimismo, el emplazamiento de sitios o restos arqueológicos y paleontológicos en las líneas de los trazados, que conforman el patrimonio histórico-cultural de la región, trae consigo la afectación del sentimiento de identidad social de las comunidades y un deterioro ambiental abrumador del ecosistema. (...) La exportación de gas natural transformará por completo la región norte de Chile. La generación de energía eléctrica a partir del gas argentino, permitirá el desarrollo minero y la construcción de una planta desalinizadora de agua de mar para suministro de agua potable y de uso industrial a la región, entre otros emprendimientos. Las repercusiones significativas en los habitantes de la región pueden brindar considerables beneficios en la medida en que se vincule el aprovechamiento energético con las necesidades, intereses y aspiraciones de las comunidades locales.

Es imperativo que se aproveche la oportunidad actual para provocar una aceleración del desarrollo humano y económico que sea sostenida y equitativa y que permita armonizar las tres dimensiones: la sostenibilidad económica, la social y la ambiental.”

Gasoducto Atacama

Datos del gasoducto Atacama

En el nº 197 de la revista Tecnoil de este año con el título Gasoducto Atacama - Otro emprendimiento que potencia la integración Argentina-Chile, se dan por sentadas interesantes alternativas que posibilitarán para las provincias argentinas de Salta y Jujuy el crecimiento de la economía regional como: “el desarrollo de la actividad minera en la Puna, la complementación productiva entre el Altiplano, los valles y su diversificación, una mejor calidad de vida de sus habitantes por el acceso al gas natural y un creciente flujo del comercio hacia el Pacífico”.

El Gobernador de Jujuy, Carlos Ferraro, afirma que la obra generará 1.800 puestos de trabajos reales, más los obreros temporales que se necesitarán para instalar las dos plantas de bombeo en los municipios de San Pedro y Purmamarca.

Gasoducto Norandino

Datos del gasoducto Norandino

Techint ya no es socio del consorcio como al comienzo, vendió su parte a Tractebel, pero se quedará con una parte importante de la operación. Será la constructora del gasoducto Norandino, y sus vinculadas Siat, Transportadora de Gas del Norte y Tecpetrol proveerán, respectivamente, las cañerías, la futura operación del ducto y parte del gas que se exportará.

El gasoducto será emplazado con caños de 20 pulgadas, para transportar 6,5 millones de metros cúbicos diarios de gas natural. En la parte chilena estará bifurcado con tuberías de 12 y 16 pulgadas.

Actores y focos del conflicto

La organización Greenpeace pidió que la obra Gasoducto Norandino se desvíe 100 o 150 km. para no afectar siete áreas protegidas que abarcan el corredor biológico de la selva de Yungas. La zona selvática es una franja de más de 70 km. de ancho por 150 km. de largo, desde el Parque Nacional Baritú (Salta) hasta el Parque Nacional de Calilegua (Jujuy). “Es el último 10% de la selva de Yungas que queda en la Argentina”, señaló Emilio Ezcurra, Coordinador de la campaña de biodiversidad de la organización. Greenpeace dice que la obra acelerará la extinción de especies como el yaguareté.

Con el título: “Dos Gasoductos ¿Para qué?", Greenpeace acerca consideraciones sobre el precio del gas. Entre otras dice que “los resultados señalan que, contrariamente a lo esperado, los precios que deberán soportar los usuarios radicados en el país, por igual producto y fuente de origen, son superiores a los de exportación, configurando una situación de discriminación de precios. Ello implica una pérdida de ventajas competitivas en producción, disminución del bienestar de los consumidores del país y un uso social poco inteligente de los recursos naturales”.

La Fundación Vida Silvestre Argentina impulsa la creación de un área protegida que asegure la permanencia de la selva y, a la vez, la difusión de modelos de uso sustentable de la naturaleza para los pobladores de la región. Como sólo el gasoducto Norandino atravesará la zona, la fundación opina que “quienes deben afrontar los costos son Techint y sus socios ”.

Según un documento de la fundación, la traza de Gas Atacama atraviesa ciudades y poblados de aproximadamente 300.000 habitantes.

Los pobladores de Humahuaca esperan recibir una conexión del gasoducto para acceder a la red de gas y no depender más de la leña para calefaccionar sus hogares y escuelas. El acceso al gas frenará la deforestación y el avance de la desertificación; también mejorará la salud y calidad de vida de los pobladores.

La Comunidad de San Andrés se opone al gasoducto. Sostiene que “el tramo de referencia cuenta con la presencia de 40 familias indígenas Kollas, distribuidas en la Comunidad de San Andrés en los asentamientos: dirección E-W: Río Colorado, Tipalito, Río Seco, Molular, Palo Achado, Acheral, Pinal, Tablada, Trigal, Durasnal, Queñual, Esquina de Queñual, Alizar, Tranca Apachal y otros siguiendo hasta Abra de Zenta, límite interprovincial con Jujuy.”

En un documento firmado por el Secretario de esta comunidad (Tinkunaku), Ceferino I. Zárate, con fecha 23 de abril de 1998, se destaca que “no son únicamente 40 familias sino 350 que viven distribuidas en toda la extensión del catastro 71 de la provincia de Salta correspondiente a la Finca San Andrés, las que recibirán el impacto directa o indirectamente. (...) La interpretación que hace el indígena del mundo natural es una unidad indestructible entre naturaleza y hombre.

Las comunidades que habitan la región descripta son de origen Omahuaca, grupo étnico anterior a la influencia de los Incas, cuyo legado de los últimos radica en técnicas de cultivo, cerámica, la lengua y la religión, entre otros. Las actuales comunidades pertenecen a un grupo mayoritario denominado genéricamente los Kollas, que habitan un territorio amplio del Noroeste Argentino.

Los Kollas han mantenido viva toda una tradición cultural que le permite su continuidad en el tiempo, y lo que es más importante, su identidad como pueblo, hecho que se encuentra respaldado por la legislación vigente reconocida por el Estado argentino a través de mecanismos de aplicación y los organismos que registran personería jurídica de las comunidades.”

Autorización del ENARGAS

El Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS) autorizó la construcción por concesión de los proyectos denominados Gas Atacama y Gasoducto Norandino.

Ante diferentes reclamos, la autoridad competente contrató a la consultora internacional Cooprogetti CH2Mhill para que evaluara los resultados de Impacto Ambiental presentado por el consorcio inversor.

Enargas expresó en un comunicado oficial que “como consecuencia de todas las evaluaciones realizadas se ha llegado a la conclusión que la traza es factible desde el punto de vista técnico-ambiental, una vez aplicadas adecuadas medidas correctivas y preventivas, así como la complementación del estudio de impacto ambiental presentado por Norandino y la elaboración de un Plan de Protección y Manejo Ambiental específico”.

Ambos proyectos deberán prever una medición de tipo fiscal en la frontera, a los efectos del centro operativo, aduanero e impositivo. Dado que las obras se sitúan en zonas de particular interés arqueológico y cultural, los concesionarios deberán establecer procedimientos de rescate para los casos de eventuales hallazgos durante la construcción de las obras.

El Enargas decidió que “se hará necesario interrumpir el avance de las obras cuando existan hallazgos arqueológicos no previstos hasta tanto se replanifique el trazado del gasoducto en los sectores más comprometidos”.

La autorización contempla que en los sitios de trabajo un auditor experto en Arqueología, Antropología y Paleontología deberá participar de manera permanente durante la obra.

Los concesionarios deberán contratar un seguro que proteja a las provincias de Salta y Jujuy contra daños a sus patrimonios arqueológico y cultural, mientras que dure la ejecución del proyecto.

Plan de manejo ambiental

En las obras deberá implementarse un Plan de Protección y Manejo Ambiental para prevenir la depredación de especies vegetales y animales autóctonas, y la contaminación de cursos de agua. También se deberá evitar el uso de explosivos y adecuar las trazas para evitar interferir con cementerios, lugares de oración y la construcción de nuevos caminos.

Con la finalidad de restaurar los ambientes en la zona de los proyectos, se establece la reposición de suelos, siembra y fertilización de pendientes, y el restaurado de la vegetación mediante la recolección de semillas y su reproducción en viveros para ser reimplantados.

La fuerte tendencia de las economías a la globalización, a través de bloques regionales, torna imperativa la integración de América Latina con el objetivo de ganar espacio en los mercados.

La energía es uno de los principales vectores que contribuyen a la integración y el establecimiento de estrategias desarrollistas que puedan perdurar. Monetarizar un recurso natural no renovable como el gas, es poner precio al futuro, un suicidio para cualquier país. Basar el desarrollo de la región a expensas de que la naturaleza se pierda es una ciega actitud que elimina recursos. Es de esperar que el sitio por donde pase el gasoducto se determine de común acuerdo con los pobladores. El corredor Baritú-Calilegua es el último, no hay dos.

El hecho de que obras de esta envergadura atraviesen por ej. la capital de una provincia como Jujuy, con los riesgos que esto conlleva es preocupante, no sólo para los Kollas, sino para todos los argentinos.

Ningún gasoducto puede garantizar cero margen de error. Las leyes ambientales deberán tener el peso, la prioridad y el nivel de desarrollo que los ecosistemas ameritan.

María Cecilia Lanuque