Cuando el "Hijo del Hombre" se presenta en el mundo, ostenta el poder del perdón. Cristo usa de muchas imágenes para hablarnos del perdón:
· habla del perdón de una
enorme suma de dinero .(Mt 18-27);
· de que se escuchara el pecador (Mt 18-24)
· de llevar a casa a los que se habían extraviado (Mt 15-5)
· de encontrar a lo que se había perdido (Mt 15-9)
· de la liberación de los cautivos y de los que se hallaban
maltratados (Mt 4-18)
· describe la escena del padre que corre al encuentro del hijo prodigo
y le besa y le hace que le vistan de gala y que se le haga un banquete (Mt
15)...
En el calvario hay tres cruces y en ellas
tres "derrotados". dos derrotados por sus crímenes y, en
medio de ellos, Cristo, el derrotado por el odio de sus implacables enemigos
.
De estas tres cruces brotan tres voces: el grito desesperado y blasfemo
de uno que se suma a las burlas y los sarcasmos de los escribas y fariseos,
la voz de un clarividente y arrepentido pecador, que se atreve a reconvenir
a su compañero de sus pecados y a pedir cuando menos un recuerdo
de aquel Justo que muere junto a él; la palabra confortante de Cristo
que contesta al ladrón arrepentido y le hace una promesa de vida
eterna .
María debió recordar en esta dolorosa ocasión aquellas palabras de Simeón: "Puesto está (este niño) para caída y levantamiento de Israel y para blanco de contradicción, y una espada atravesara tu alma, para que se descubran los pensamientos de muchos corazones" (Lc 2,34-35). En estas palabras parece ya apuntar la maternidad espiritual de María por su asociación en los dolores redentores de Jesús.
Este es el momento para recordar a todas las madres de la tierra la divina misión de la maternidad.
Es verdad que la mujer mexicana es de
las mejor dispuestas para ser una buena y santa madre: el recato, la sencillez,
la laboriosidad, la abnegación, el amor verdadero, la religiosidad
hacen de muchas de nuestras mujeres el mejor instrumento de la Providencia
para una patria mejor.
Pero vientos nuevos acosan a muchas de ellas para que renuncien egoisticamente a la gloria de la maternidad. El machismo mexicano acosa a muchas constantemente para arrojarlas enseguida al desamparo. Muchas están expuestas continuamente a los frívolos incentivos del placer. El gran numero de las madres solteras están acusando esta crisis de la maternidad.
Estas palabras de Jesús son las primeras del salmo 21. Esta palabra de Cristo es la única entre las siete, que manifiesta el profundo dolor de Cristo en la cruz y que toca las fibras mas intimas de su corazón. Este grito doloroso brota mientras los circunstantes se burlaban de la impotencia del crucificado: "ha puesto su confianza en Dios, que le salve ahora, si es que de verdad le quiere, ya que dijo: soy hijo de Dios" (Mt 27,43).
Indudablemente Cristo tenia presente el
texto del salmo que dice en su primera parte :
Dios mío, Dios, mírame: ¿Porque me has abandonado?
Soy como un gusano y no como un hombre: escarnecido por los hombres y exiliado
por el pueblo.
Cuantos me ven ríen con desprecio, hablan con sus labios y mueven
sus cabezas.
El espero en el señor; pues que ahora pues lo liberte, que ahora
lo salve, ya que en el se deleita.
Han agujerado mis manos y mis pies. Han numerado todos mis huesos.
Y me han mirado y contemplado. Han repartido mis ropas, y por mi túnica
han tirado los dados.
En este espejo de la soledad nos hemos visto tal vez nosotros muchas veces.
¿Quien no ha sentido el peso de la soledad y del olvido?
¡Solos, cuando los lazos de la sangre
se han roto y vemos la amargura de la ausencia y de los seres queridos!
¡Solos , cuando vagamos por los campos y las calles sin que nadie
adivine el misterioso vacío de nuestra alma!
¡Solos, cuando la hermandad humana, la solidaridad social, la justicia
de los hombres, se retiran de nuestra vida y nos dejan suspendidos en una
cruz inexplicable!
¡Solos, cuando parece que el mismo Dios, ya no nos mira , ni nos oye,
ni se acuerda de que somos sus hijos!
Esta brevísima exclamación de Cristo reproduce esta obra del salmista cuando proféticamente veía la suerte final del Mesías: "Mi garganta esta seca como una teja, la lengua se me pega en el paladar" (Sal 21,16).
San Juan único que nos transmite
esta palabra, tiene buen cuidado de anotar que, para que se cumpliera la
escritura (Sal 69,22; 22,16), Jesús tomo el vinagre que se le ofreció:
"Había allí una vasija llena de vinagre. Sujetaron a
una rama de hiposo una esponja empapada en vinagre y se la acercaron a la
boca".
Pero el sentir común del pensamiento del cristiano, es que en esta palabra Jesús quiso expresar tambien su deseo de salvación del genero humano.
Cristo mismo, en su ministerio publico,
había querido utilizar del simbolismo del agua y de la sed, para
dar a conocer realidades espirituales. Recordemos el preciso dialogo entre
Jesús y la samaritana. Mas tarde Cristo dijo al pueblo al fin de
la fiesta de tabernáculos.
" Si alguno tiene sed , venga a mi y beba. Al que cree en mi, según
dice la escritura ríos de agua viva manaran de sus entrañas."
(Jn 7,37)
Todo esta cumplido: nada quedaba por hacer de lo que había que cumpliese antes de morir Cristo (S. Agustín).
Es la síntesis de toda la vida
de Jesús de su altísima misión. Todas las profecías
sobre el nuevo Reino de Dios se han cumplido en Jesús. La cabeza
de la antigua serpiente ha sido aplastada. Una nueva alianza ha sido sellada
entre Dios y los hombres. La víctima divina ha sido inmolada. Se
ha pagado al padre el rescate de todos los pecadores. La obra de redención
ha que dado prácticamente terminada. El príncipe de este mundo
ha sido vencido. La separación entre judíos y gentiles ha
terminado; ahora todos podrán pretender a la nueva Jerusalén
de la tierra ...
Este "todo esta cumplido" es
como la llamada terminación de la creación. A un primer tiempo,
sigue un segundo momento, el nosotros tenemos mucho que hacer. No solamente
tenemos que completar la pasión de Cristo (como dijera San Pablo),
sino que tenemos que proseguir la obra de Cristo. A esto va tambien la oración
sacerdotal:
"No te pido que los retires del mundo ...no ruego solo por estos, sino
también por aquellos que, por medio de tu palabra crean en mí..."
San Lucas es quien nos ha transmitido
esta ultima palabra de Jesús .Nos describe tambien en unas pocas
líneas el clamor de la naturaleza en aquellos momentos: "Toda
aquella época quedo en tinieblas desde alrededor de las doce del
medio día hasta las tres de la tarde, por haberse eclipsado el sol,
y el velo del templo se rasgo por el medio".
Esta exclamación de Cristo corresponde al salmo 31, hermosa oración
del salmista en la hora de la prueba. Al usar a Cristo estas palabras, da
las misma un contenido mesiánico y un nuevo sentido: muere libremente.
Si llega el proceso natural de la muerte, llega porque el la autoriza.