Inicio   JAH RAS TAFARI   InI Orígen Etíope  Nyahbinghi   Mujer Rastafari
Isamblea Teocrática
    Hijas de la Teocracia     El Orígen del Hombre    I-Storia de H.I.M.   Discursos de H.I.M.    
Kebra Nagast
     Eventos Pasados     I-Storia     Livity     Marcus Garvey     Mision a Africa 
Literatura Rastafari
   Emperatriz Menen    Los Hijos del Sol
Gran Evento para Cuba (in English)  Fotografias Cuba / England  Comunidad Online LEON CONQUISTADOR

Links    Evento en Puerto Rico/2003    El Libro de Enoch    La Orden Nyahbinghi      La Orden Boboshanti    Tabernaculo en Chile

Vocabulario Rastafari   Noticias de la familia Rastafari   Herencia/Insurrectos   Expo: Discovering Rastafari   Visita Real a Chile 2006

    El Leon de Juda en Mexico

 

Los Hijos Del Sol

(Fragmentos del libro escrito por George Wells Parker. The Children of the Sun fue publicado por primera vez en 1918 por el Hamitic League of the World con la intención de brindar a la luz oscuros y significantes trabajos por y acerca de los descendientes Africanos.)
AFRICA
En la mañana del mundo, cuando los dedos del Amor movieron las cortinas del Tiempo, nuestra lúgubre madre, Etiopía, tuvo su escenario. Fue ella quien cortejó la civilización y dio luz a las naciones. Egipto fue su primer nacido y a Ur de los Chaldees ella mandó a sus hijos e hijas, quienes esparcieron imperios en Asia como los insensibles vientos del otoño esparcieron las semillas de las flores. Al lado del Mediterráneo ella construyó Phoenicia (Fenicia), y en sus barcos con velas moradas ella mandó a sus hijos al azul Aegean, para allí encontrar Grecia, la maravilla de los hombres y la reina de la historia. Troy fue de ella (Etiopía), y desde esa ciudad en fuego voló la morena Aeneas, quien preparó el fermento para Roma, la ciudad eterna. Su espíritu llamó a Arabia y de los místicos desiertos surgieron los soldados negros del Islam, quienes soldaron al mundo en un nuevo imperio y cantaron sus canciones de amor y victoria en los valles de Andalucía. Desde las islas de todos los océanos, desde donde la Cruz del Sur se inclinó para besar las inquietas olas donde el Ártico mantiene en traílla su mundo congelado, sus manos han tocado. La religión, el arte, la literatura, la ciencia y civilización son suyas, y la eternidad vive en la calidez de su radiante manifestación. Yo he decidido llamar a los innumerables millones de sus descendientes, los Hijos del Sol.
..En la actualidad no hay un simple libro en la lengua inglesa que hable de los maravillosos trabajos de los Arqueólogos en África, Asia y Europa, siendo estos trabajos los que han vindicado la raza Africana como la fundadora real de la civilización humana. En el año 1873, Herr Reinisch, un egiptólogo de Viena, sorprendió a los estudiantes europeos diciendo que no sólo los egipcios eran de origen Africano, sino que "todas las razas humanas del mundo antiguo, de Europa y África, fueron descendientes de una simple familia, la cual se asentaron originalmente en las orillas del África Ecuatorial." En aquel tiempo la ciencia de las razas humanas estaba en su infancia y sus estudiantes no estaban preparados para aquella aserción arrebatada. Todo tipo de especulación y teorías ridículas eran frecuentes, y se esperaba que esta doctrina de Reinisch pasaría con los caprichos del día. Así todo, después de treinta y cinco años, la Universidad de Pennsylvania reporta una expedición arqueológica remarcadamente próspera, se dice, que completamente derrocó los establecidos patrones, no sólo de la historia sino de la etnología también. La universidad nos asegura que el arte Negro es primariamente original y que esa civilización probablemente nació en las regiones de los grandes lagos del continente Africano.
África es el enigma de todos los continentes. Continúa siendo la tierra del misterio y muchas sorpresas esperan todavía aquel aventurero que viaja sus largos pasos perdidos en búsqueda de conocimiento…
La excavación que estaba bajo la dirección de la Universidad de Pennsylvania está situada en las regiones del Bajo Nubia y en la vecindad del antiguo asentamiento del Gran Imperio de Etiopía. La tradición es que Etiopía es la madre de las naciones y que ella amamantó y empinó no sólo Egipto, sino muchas de las naciones de Asia e incluso ella dio a Grecia sus dioses, leyes y civilización. A pesar de que Ridpath (según sus editores era un historiador popular pero no certero) clasifica a los Etíopes como blancos, se puede ver que su nombre (Etiopía) es un nombre griego que significa "aquellos de rostro oscuro", y la frase "to wash the Ethiopian white (blanquear al etíope)" que fue una expresión proverbial que los antepasados usaban para referirse a un propósito inútil. El verso hebraico ¿"Pueden los etíopes cambiar su piel o el leopardo sus lunares?" Es otra verificación de la realidad de que los etíopes de hace siete mil años atrás fueron lo mismo que los etíopes actuales. Grecia parecía tener respeto por Etiopía que casi se convirtió en una reverencia. Para ellos, Etiopía fue el hogar de gente divina, y de Etiopía vino su gran dios Zeus… Se ha escrito que "cuando los griegos conocían muy escasamente a Italia y Sicilia por sus nombres, la civilización y mitología del etíope suministraba a sus poetas un tema de descripción elevada." Dioduros nos dice que ellos (los etíopes) fueron los inventores de las ceremonias, sacrificios, asambleas solemnes y todos los honores dados a los dioses. Herodotus los considera como una raza maravillosa y los Hebreos les rindieron elevado tributo en sus escrituras sagradas. Existió una relación muy cercana entre los egipcios y los etíopes. En ningún estudio se ha comprobado que ellos hablaran la misma lengua, pero se puede observar que sus jeroglíficos son los mismos. En religión su relación fue incluso más pronunciada. Los dos tienen el mismo sistema de adoración y culto, las mismas órdenes sacerdotales, las mismas ceremonias y procesiones. Las imágenes de los dioses en algunos tiempos fueron transportadas por el Nilo desde sus templos egipcios hacia los otros en Etiopía y después del festival se transportaban de regreso a Egipto. Muchas veces en la historia de Egipto el país ha oscilado entre diferentes dinastías etíopes.
Hay otras cosas que hace Etiopía ser grandiosa no sólo en la antigüedad sino en los tiempos presentes. Esta tierra ha sido una de las pocas que nunca se ha humillado a un conquistador y su gobierno es el más antiguo conocido en la historia de la humanidad, contando a China. En el Kebra Negest, en el registro oficial de la familia real, aparecen los nombres de los reyes en una sucesión interrumpida desde los tiempos de Salomón hasta el presente, y solo en un sueño de fantasía se puede llegar a los primeros tiempos de esta línea de monarcas negros. Si es verdad que los gobiernos son instituidos entre los hombres para la promoción de la felicidad y bienestar, entonces este imperio es una de las pocas naciones del mundo que se ha acercado a la realización de este ideal. Su sistema de gobierno es comunal. En toda su historia, Etiopía nunca ha conocido nobleza hereditaria; y la casta de sacerdotes nunca existió. Entre el gobernante y el pueblo no puede haber nada, y cada cual puede aspirar igualmente a los honores del estado y la mayor dignidad del sacerdocio. Entonces digamos, que verdaderamente, ellos fueron los primeros en concebir los verdaderos principios de la libertad humana universal y fundadores del primer gobierno con la base de la verdad eterna de que todos los gobiernos deben mostrar un poder justo para poder partir del poder del gobernado. Desde el amanecer de su historia hasta ahora la mujer ha sido igual al hombre, y en no tierra hasta el presente las imágenes de la felicidad doméstica han jugado una gran parte como paso en la Etiopía antigua..
…Juba, el rey y escritor Numidia dijo: "Los etíopes afirmaban que Egipto es una de sus colonias; hay un fuerte parecido entre las leyes y costumbres de ambas tierras; los reyes usan el mismo tipo de traje y el uraeus adorna su diadema." Hay mucho para substanciar acerca de esta cercana relación. Consultando las inscripciones encontramos que sin excepción el sur siempre viene primero. Los reyes del sur siempre son mencionados antes que los reyes del norte. En las descripciones mitológicas leemos que Horus primero residió en el sur, y después viajando por el río, conquistó la tierra llegando tan lejos como el mar. Los egipcios nunca miran en la dirección por donde su dios vino.
Para sumar los resultados obtenidos y las conclusiones que se pueden asumir por los estudios de los monumentos egipcios y sus restos, no mejor cita se puede usar que una hecha por el Dr. Rudolph Virchow, el famoso fundador de la rama de la medicina conocida como patología celular. A este eminente científico se le encargo por la Asociación Antropológica Alemana ir a Egipto y estudiar los monumentos, los templos, estatuas y los demás restos de la civilización Egipcia; además de brindar una autoritativa decisión relacionada con las relaciones raciales de los egipcios. Él permaneció en Egipto dos años y en agosto 5, 1889, él presentó sus respuestas a la Asociación. Su cita empezó: "Yo pensé que podía encontrar, utilizando examen comparativo de lo que todavía permanece, los restos, las pinturas, algunos elementos que establecieran algún cambio entre los egipcios del Egipto antiguo y los del presente, pero ha regresado con la convicción de que el antiguo Egipto y sus vecinos no han cambiado esencialmente durante todos estos períodos. Si Menes realmente existió, entonces los egipcios de su tiempo eran Negros, pues los viejos murales de las pinturas enseñan a Negros con todas sus peculiaridades." A casi idéntica conclusión llegó Edouard Naville, el famoso francés arqueólogo, quien chocó al mundo algunos años atrás con el descubrimiento de la tumba de Osiris, ahora una de las más maravillosas ruinas de Egipto. En sus lecturas acerca "El Origen de la Civilización Egipcia", presentadas al Instituto Real de Antropología, él compara todas las grandes teorías acerca del origen de los Egipcios y después de revisar sus propias conclusiones de muchos años de estudio, dijo: "Egipto pertenece a una nación formada por indígenas de origen Africano, entre los cuales se asentaron conquistadores provenientes de Arabia, el mismo punto de partida de los Chaldeans (Caldeos provenientes Caldea.) Esto explica la similitud entre Egipto y Babilonia. El elemento exterior fue no Semítico. Ellos provienen, como los nativos, de un origen Hamitic (descendientes de Ham); por eso ellos se amalgamaron facilmente con los aborígenes, entre los cuales ellos infundieron su espíritu más progresivo y activo. El amanecer de la civilización Egipcia es ciertamente una prueba distintiva de la parte importante que África ha jugado en la historia de la cultura humana."
Las ideas religiosas de alguna gente muchas veces nos llenan con evidencias más o menos concluyentes de sus relaciones raciales, y muchos escritores hoy, quienes no se acercan a Egipto más que las sillas de la biblioteca, muchas veces tratan de probar que por qué ciertas cosas del sistema religioso Egipcio se asemeja a los sistemas de otras naciones, por eso, los egipcios deberían ser otra raza que la africana. Todavía aquí ellos no se dan cuentan, o pasan por alto la realidad más grande de todas. La vieja idea de que el hombre fue hecho en la semejanza de su Creador se manifiesta en todos los sistemas de culto religioso, y sus dioses son siempre representativos de sus adoradores. Por eso, cuando M. Maspero nos informó en su inestimable trabajo acerca de la religión Egipcia que Osiris, el dios supremo de Egipto, fue "hermoso de rostro, pero con una deslustrada, oscura complexión," entonces es probable concluir que su color por ende es el color de sus adoradores. Sí, entonces, la piel negra fue de alguna manera desdeñable a los antiguos egipcios; si los hombres de ese color fueron conocidos para ellos sólo como sirvientes y esclavos; si ellos fueron entonces Libios de piel blanca o Semitas de piel amarilla, sería entonces difícil creer que los egipcios le darían características negras y piel negra a la personificación de la más alta concepción de la mente humana-ese poder infinito e inescrutable que manda omnipotente sobre todos los hombres y dioses, quien imperio abarca la tierra y los mares, las estrellas y soles eternos, y que se alarga hacia todos los confines del magnífico universo! Habrá muchos que a pesar de todo lo que se ha escrito no tienen la voluntad de aceptar lo que ha pasado anteriormente como concluyente. Los hombres son falibles y las religiones son cuestionables, y sus planteamientos puede ser que no puedan ser probados absolutamente. Pero si hay pruebas mayores que esto, pruebas dejadas en madera y piedras que han desafiado los abatares del tiempo. Desde los paneles de madera del periodo mítico de Menes a las estatuas de piedra de la última dinastía han nacido eternos testimonios de la raza que trabajó para realizarlos. Ya sea en madera, piedra graniza o granite, en el colosal corte en los flancos de las montañas de piedra de arena o en las imágenes de sus dioses y reyes grabadas en las piedras de los anillos con estampillas, la figura del Negro es por siempre visible. Si estos negros hubieran sido esclavos, ¿Por qué sus figuras han sido inmortalizadas en resistentes monumentos por una nación con eternos testimonios de su ilimitado orgullo y su inmensurable gloria?
¿Y debe el hombre alguna vez cansarse de esos monolitos que se sitúan silenciosamente al lado del Nilo? ¿Alguna vez la paciencia levantará de nuevo aquellos pilares tan vastos como los de Karnac, o el amor trinchará tan monstruosas tumbas en la tranquilidad de las rocosas colinas? "Times mock the world" (El tiempo se burla del mundo) dice un proverbio árabe, "pero las pirámides se burlan del tiempo." Con esa persistencia que viene del orgullo, ellos cortaron miles de maravillas del granito del alto Nilo y por su amor al reposo que habita en la calma monumental ellos personificaron su mayor concepción en aquella figura solitaria que se sitúa hoy como el mayor y más extraordinario monumento que cualquier hombre haya cincelado. Esta es La Esfinge (The Sphinx), de quien Ebers dijo: "En el presente día ha adquerido un horrible aspecto Negro rapidamente desde que perdió su nariz." Él debería haber explicado más adelante que la Esfinge siempre tuvo el aspecto Negro, y que ese es el rostro de Horus, hijo de Osiris, el gran dios negro del antiguo Egipto. Pero Ebers es el primero que conozco que haya llamado a ese calmado, tranquilo, sereno rostro "horrible." Debe ser que ese sentido de la visión está mal usado por aquellos que ven en ese perfil Negro una contradicción a todas sus filosofías étnicas, pero dejémoslo así…
Como flores han nacido en una tumba, así han crecido los mitos alrededor de estas tumbas solemnes. Osiris, el gran, buen rey de Egipto, fue asesinado por Typhon, uno de pelo rojo, rostro blanco y ojos azules. Typhon intentó de poseer el trono y a Isis, la viuda del rey asesinado; pero Horus, el hijo de Osiris e Isis, se opuso a él y lo expulsó de Egipto. Y porque la gente estaba temerosa de que el enemigo regresara Horus se transformó en la Esfinge y se mantuvo vigilando por si regresaba Typhon. ¿Y quién puede decir que la vigilancia no se ha mantenido? Por miles de años, Egipto ha habitado felizmente en el Valle del Nilo… Egipto ha vivido y ha jugado un papel en el maravilloso drama humano. Pero yo creo que la memoria que tenemos de él mantiene una lección para muchos, y esta es que aquí han habido y habrá grandes potencialidades en esta raza que ha dado Egipto a la suma de las cosas humanas. Quizás aquel sabio hebreo estuvo realmente inspirado cuando él dijo que en los días venideros los hijos de Etiopía y Egipto alzarán sus manos y devolverán a su raza inmortal la gloria que permanece dormida y olvidada.
ASIA
Todavía existe la misma opinión en aquellos que no han oído acerca de los últimos resultados de la exploración científica que Asia es prominentemente la casa de las razas amarillas. Estas razas están agrupadas bajo el término 'Semita' porque se ha aceptado que ellos son descendientes de Shem, uno de los abigarrados hijos de Noah. Pero hoy estos términos no significan nada. Muchos extraños y perplejos problemas han salido que hay una fe lejana de que alguna vez se podrá saber la verdad. Una cosa que se ha descubierto, y que ha creado mucho asombro, es que aparece ser de que el continente de Asia originalmente fue la casa de muchas razas negras y que estas razas fueron pioneras en el establecimiento de maravillosas civilizaciones que han florecido a través de este vasto continente. En tiempos diferentes invasores han venido del norte y han tratado de conquistar muchas de esas razas, pero en la mayoría de las ocasiones las encontraron muy fuertes y se comprometieron asentándose con ellas. Esta amalgama ha tenido la tendencia de aclarar el color de estas razas asiáticas, pero en ningún instante la completa obliteración de las características Africanas ha sido afectada. En su trabajo fantástico "The History of Mankind" Frederick Ratzel habla de este problema que ha causado mucha preocupación a los estudiantes que desean dar a África cuanto crédito sea posible. Él dice: "Lo que contribuye a que las fisionomías Negras sean menos extrañas y las hace más cercanas a nuestras usuales concepciones, es que en muchas de sus manifestaciones un acercamiento al tipo Semítico emerge inequivocamente, como uno de los llamados usualmente Judíos en carasterísticas. Hay fundamento para la opinión de que en el tipo Semítico del judío, árabe, sirios, etc.; hay una base de tipo mulato. El parecido de los judíos ha sido frecuentemente exagerado, especialmente entre los Kaffirs, sin embargo hay un germen de verdad en esto."
En el gran valle de Mesopotamia, donde florecieron Caldea, Babilonia y Asiria, las evidencias del dominio de los Africanos se muestran ahora tan persistentemente que la mayoría de los estudiantes famosos simplemente atribuyen la gloria de estos imperios poderosos a la sangre Africana y lo dejan así. Verdad, que los antiguos escritores conocieron que aquellos fueron imperios negros y dicho así, pero el hombre moderno siempre ha tenido el hábito de creer que los antiguos nunca supieron que estaban hablando. Quizás Rawlinson, el muy conocido viajero y explorador inglés, ha admitido la influencia Africana de una manera más plana que cualquier otro escritor moderno. Él dijo: "La monarquía de Chaldea atrae mucha curiosidad por su antigüedad, sus grandes nombres y sus extensos dominios. Menos antigua que la Egipcia, ha reclamado la ventajosa prioridad con respecto a cada imperio o reino que ha crecido sobre el suelo de Asia. Los arios, turanios, e incluso las tribus semíticas, aparecen estar en condiciones nomádicas cuando los pobladores Cushitas (razas negras) de la Baja California se emprendieron en la agricultura, erigiendo templos, construyendo ciudades y estableciendo un gobierno fuerte y establecido. La levadura que se extendió a través de los asiáticos fue primeramente depositada en las orillas del Golfo de Persia en la boca del "the Great river", y de aquí la civilización, ciencias, arte, letras, se extendieron de norte a este y al oeste. Asiria, Media, Babilonia Semítica, Persia, que asumieron de los de Caldea los caracteres de sus escrituras, también asumieron de la misma nación las nociones generales de gobierno y administración, de arquitectura, su arte decorativo, ciencia y literatura. Caldea entonces permanece como el gran creador e inventor de la civilización asiática, sin ningún rival que razonablemente pueda discutir su reclamación." ¿Puede algún tributo a la madre negra de la civilización Asiática ser mejor?
Entre los científicos hay un grupo que trata de determinar la relación entre las razas a través del lenguaje y hay otros que lo hacen a través de la religión. Aquellos quienes han estudiado las lenguas como meta están desesperadamente perdidos en un laberinto de contradicciones y prácticamente han abandonado la esperanza de alguna vez decidir algo basado en el lenguaje. Aquellos que han usado la religión como prueba han alcanzado algo un poco mejor, pero ellos hoy están llegando a la conclusión de que las razas negras fueron realmente los fundadores de todas las religiones. En realidad, la gran similitud de la religión del oeste de Asia ha sido uno de los factores principales que ha brindado el reconocimiento del papel maravilloso que han jugado los Africanos en el ascenso de la civilización Asiática. Un escritor ha resumido los resultados de este estudio con las siguientes palabras: "De los muchos cantos de las misas de Nippur, que son conocidos como cantos prestados de los Semitas, ninguno ha sido cambiado por la escuela Semítica de hombres, relacionados con las palabras. Y no sólo los Sumerian (raza negra) crearon estos cantos y cambiaron la forma de las misas, sino también ellos ORIGINARON CADA GRAN DOCTRINA TEOLOGICA que los Semitas mismos confiesan. Relacionado con las misas públicas la religión de Babilonia no puede ser considerada Semítica en ningún sentido. No tengo ninguna duda de que en las excavaciones en los centros como Nippur, Ashur, Arbela y Ninevah, aparezcan muchos mas textos de este tipo, pero estos, como los que nosotros ya conocemos, han sido compuestos en sagrado Sumerian. En medida esto es desafortunado, porque gradualmente va removiendo a Asiria lejos de la disciplina de los estudios Semíticos. Sólo nos deja reconocer que la religión de Babilonia en toda sus formas esenciales de literatura y doctrinas son decisivamente anti-semíticas, y debemos de evitar más mal entendidos entre nosotros."
… Hoy Asia esta llena de ruinas de vastos templos y muros que es la maravilla de cada viajero que los contempla… El escritor Ferguson autor de "The History of Architecture" les brinda tributo a África cuando dijo: "Ningún Semita o Ario en ningún momento construyó una tumba que durara un siglo o que valiera la pena que durara tanto tiempo."..
Si alguna vez has estudiado la historia de Persia recordarás que los historiadores la clasifican como la primera gran civilización blanca en la historia del mundo. Tan maravilloso que fue el imperio de Persia, y tan magnífica fue su civilización, que no se puede reprochar a los historiadores por tratar de reclamarla para la raza blanca excluyendo a todos los demás. Pero el reclamo ha caído antes del estudio moderno de los persas. La civilización primitiva de Persia ha sido llamada Elamita, y los de Elamita, déjame decir, fue una rama de la gran federación Africana de razas. J. Morgan en su trabajo sobre Persia nos dice: "Al lado de la civilización sumeria en Babilonia tenemos en el valle de Farum, en Persia, evidencias de una civilización anterior que nosotros llamamos Elamita, que sólo ha sido explorada. De que los de Elamita y los Sumarians estaban emparentados, y que antigua la civilización Elamita fue, nosotros no sabemos completamente; pero ciertamente la letra cursiva cuneiforme, usualmente usada por estudiantes y escritores de las civilizaciones antiguas, fue la forma de escribir primitivamente y exclusivamente usada por la gran confederación de los Africanos que habitaron Asia.
Hemos descubierto en la mitología Griega que los Persas fueron los fundadores de la raza persa. Ahora, Perses fue el hijo de Perseus, el famoso héroe que salió de la raza Argive, ciertos africanos que se asentaron en Grecia, y Andrómeda, una princesa de Etiopía, a quien Perseus rescató de la muerte impuesta sobre ella porque su madre se jactaba de la belleza que su hija sobrepasaba la de los Neriads. Une esto con el hecho significante de que en "The Shah Nameh", la epopeya persa, encontramos de que el primer gobernador de Persia, Kaimers, fue un etíope, y que él y su pueblo se ataviaban con pieles de tigres, porque la piel de tigre era el símbolo de realeza entre los etíopes, y empezarás a ver que importantes los mitos y tradiciones son en el establecimiento de las relaciones de las razas y las naciones. En esta misma epopeya leemos que Zohak, uno de los héroes persas, no fue otro que Nimrod, el gran cazador y constructor africano, mencionado en la Biblia. Leemos también de que muchos príncipes persas se casaron con mujeres de Etiopía y el Yemen, y no está fuera de lugar aquí mencionar que después en su historia, cuando Persia fue asediada por sus enemigos, el rey mandó una embajada a Etiopía, cargando su preciosa epopeya y las coronas de joyas persas, pidiéndole a los etíopes si ellos podían mantener esto a salvo hasta que Persia fuera libre de sus enemigos. Etiopía lo mantuvo por ochenta años y los regresó a salvo cuando Persia los pidió así. Cuando el rey persa lo recibió de los etíopes dijo en un discurso de agradecimiento que Persia nunca temió por su seguridad por "el parentesco que existe entre nuestros pueblos."
Berossus nos habla de una dinastía mediana gobernando en los remotos tiempos que fueron africanos, incluso en estos tiempos tribus de Negros de cabello-lanudo existen en Laristan y Mekran e incluso Helmund. El no-acierto de que los persas fueron de raza blanca es puramente una invención de los historiadores, porque no hay y nunca ha habido una pizca de evidencia para soportar esta teoría. Hay una tradición de que los arios invadieron a Persia, pero si ellos lo hicieron se disolvieron tanto que no dejaron ningún rastro. En la lectura de "The Early Inhabitants of Western Asia" Felix V. Luschan dice: "El tipo antiguo parece ser preservado en el Parsi, los descendientes de los persas quienes emigraron a la India después de la batalla de Nahauband, mucho más puro en forma que entre los verdaderos persas. Ellos son oscuros; nunca he visto un persa de ojos azules y cabello claro."
El hombre blanco siempre se ha preocupado de donde ha venido y cual fue su casa original. Acerca de cuarenta años atrás el profesor Max Muller decidió encontrar respuesta. Él era estudiante de lenguas y descubrió que tres raíces de palabras en inglés eran similares a tres raíces de palabras en Sánscrito. Con esta evidencia tan débil él propuso por lo que es conocido como la teoría aria. Él declaró que la raza blanca venía de la India y como "cuando los primeros ancestros de los indios, los persas, los griegos, los romanos, los eslavos, los celtas y los germanos, viviendo todos en la misma inclusión, no bajo el mismo techo." La teoría se regó como fuego y cuando Müller encontró tres palabras, otros estudiantes vinieron reclamando que ellos habían encontrado de diez a cien palabras. Por aquel tiempo parecía que el origen del hombre blanco ya se había asentado. Todo parecía adorable por un tiempo, pero después algunos de los estudiantes franceses y alemanes empezaron a cansarse del ruido que hacia aquella teoría nueva. Esto porque no se podía entender como una tribu tan pequeña como la aria en las montañas del Asia central pudo mandar grandes colonias que marcharon cuatro mil millas hacia las orillas de Europa. Después de un poco de trabajo arqueológico actual ellos descubrieron rastros de los primitivos europeos que no fueron arios y que no hablaron la lengua aria y que otros no-arios la hablaron. Un científico se disgustó con el ridículo reclamó que lo llamó una invención sin base; esto hizo que los teóricos empezarán de nuevo por la caza del lugar original de la raza blanca. Hasta los tiempos presentes ellos continúan la caza. En India, donde ellos pensaban que se encontraba la respuesta, ellos encontraron millones de gente negra en las colinas, viviendo la vida de sus ancestros y sin noción de la guerra que se ha luchado por ellos.
Cuando vamos a la etnología del hindú encontramos muchos hechos, leyendas y circunstancias, que prueban que ellos eran originalmente africanos. Cuando los arios, vinieran de donde vinieran, invadieron India, ellos agruparon a todos sus habitantes en el término "Daysu", quienes ellos describieron como una raza azul-negra. Un escritor, hablando de los Daysu, declaró que todo desde "su color y narices gordas con trajes barbáricos, manifiestan su parentesco con las razas africanas." Acerca de los trajes barbáricos se puede esperar siempre de un escritor blanco intentando dejar impresión de que ellos fueron no más que salvajes, pero de los mismos himnos Védicos y las épicas sánscritas entendemos que ellos no lo fueron absolutamente. Desde el Ramayana y el Mahabarrata, las epopeyas indias, leemos que esos Daysus fueron civilizados y ricos y que ellos poseyeron magníficas ciudades. En un instante leemos que "siete castillos y noventa fortalezas" protegían una porción de su nación. Después en la literatura sánscrita los invasores hicieron alianza con los príncipes aborígenes, después que se percataron de que no podían conquistarlos, y cuando la historia al fin amaneció sobre la escena, podemos encontrar uno de los más poderosos imperios de la India gobernados por dinastías de descendientes africanos. En la epopeya que narra el avance de los invasores al sur de la India, el jefe describe su raza como temerosamente veloz, no-dócil en la batalla y en color como las nubes de azul oscuro. Estas presencias azul-oscura aparecen en las pinturas antiguas que ilustran la epopeya. El hecho de que Krishna, el nombre que usan para su dios del sol, significa "ennegrecedor" debe tener algún significado. Ver a un hindú y llamarle hombre blanco es imposible. Cuando él se aventuró dentro del noroeste algunos años atrás su llamado primo de piel clara por ningún sistema de análisis mental lo podría aceptar como tal, y Kipling, en la jerga del soldado británico, lo llamo "nigger". En "The Annals of Rural Bengal", Mr Hunter describiendo los Santali o las tribus de las colinas de la India, dice que cientos de imperceptibles gradaciones se pueden encontrar "desde las tribus negras de las montañas hasta el alto de color aceituna Brahmin, con su ceja intelectual, ojos clamados y alta pero estrecha frente." Darwin agrega que en las cortes de justicia es necesario preguntar a los testigos si ellos eran Santalis o Hindis, por el parecido que tienen. Entonces parece ser después de todo que el Hindú debe venir dentro de la clasificación de Africanos. Huxley, en su estudio de la Etnología Británica, plantea la verdad cuando dice que, "la estirpe negra que predomina en el sur y oeste de Francia, en España, como también de las orillas Lugurianas, y en el oeste y sur de Italia; en Grecia, Asia, Syria y Africa del Norte; en Arabia, Persia, Affghanistán y Hindostan, que se van modificando gradualmente, a través de diferentes estados del color oscuro, negro; en el tipo del egipcio moderno, o el hombre salvaje de las colinas de Dekan. NO HAY NINGUN REGISTRO DE LA EXISTENCIA DE DIFERENTE POBLACION EN TODAS ESTAS NACIONES.

...Si alguna vez haz leído la Biblia has leído acerca de los Hititas. En las escrituras no se encuentra que ellos fueran de vasta importancia, en realidad, no hay ninguna nación de mayor importancia para los Judíos que Israel. Pero los Hititas fueron una gran raza y los científicos se están convenciendo cada vez más de que no nueva historia de la civilización puede soportar estar completa sin el estudio de esta gente. El Dr. Leopold Messerschmidt, el arqueólogo, quien ha hecho el mayor trabajo en las ruinas de los Hititas, nos dice que ellos fueron "no Arios o Semitas, sino relacionados a la gran federación de pueblos que se esparcieron por todo el mundo antiguo." En una cual larga cita de Recent Researches in Bible Lands, por Herman V. Helprecht, te daría una idea de la importancia creciente de los Hititas como un poder del mundo antiguo. "La cuestión, ¿Quiénes fueron los Hititas? es uno de los intereses del estudiante de la Biblia, pero igualmente, o quizás más, para el estudiante de la historia y la civilización, desde que ahora nosotros sabemos que ellos fueron uno de los factores importantes en la producción de la civilización de la que somos parte. Yo digo que en esta civilización ellos tienen una parte con nosotros; pues es una realidad, con toda la poderosa originalidad de la raza Griega, de la cual todas las civilizaciones que el mundo ha visto desde aquel entonces provienen, ésta civilización tiene sus raices en las civilizaciones imperfectas -Egipcia, Babilónica, Fenicia, Hitita- que la precedieron. Del río Nilo salen muchos cauces que se encargan de fertilizar a todo Egipto, y esta distribución del agua es el valor práctico del Nilo en cuanto a agricultura concierne; pero no es una curiosidad tonta lo que nos hace preguntarnos que lagos distantes y sus ramas contribuyeron a producir este Nilo. Entonces los estudiantes de la civilización no estarán satisfechos al estudiar Grecia solamente, y seguir el curso del desarrollo nacional desde Solon a Pericles y Parthenon, y luego seguir el hilo dividido acerca de sus influencias sobre todo el mundo; pero él se preguntará qué pasó antes de la historia grabada, que combinación de fuerzas fueron la que le dieron impulso a el pueblo Helénico, cuales fueron los jugos crudos de los cuales los griegos sacaban sus vinos. Por tanto si nosotros heredamos nuestra civilización de Grecia, cuando preguntamos cuál fue la historia, y cual el arte, de los Egipcios, los de Babilonia, o los Hititas, estamos preguntando acerca de nuestros propios descendientes genealógicos, y tratando de encontrar nuestra ancianidad intelectual, no sólo en los griegos, sino en aquellos menos donados quienes su imperfecta civilización fue la condición necesaria en el desarrollo y logros de la griega. En nuestra búsqueda de nuestras conclusiones acerca de la raza, lengua, historia, y arte de los Hititas, tenemos que ir a cinco fuentes -la Escritura Hebrea, los monumentos Egipcios, los monumentos de Assyria, los monumentos de Vannic y los monumentos de los mismos Hititas. Sus ancestros, Heth, fue el hijo de Canaan quien fue el primer hijo de Ham. Esto los hace pertenecientes al tronco genealógico de los Cushites.
No haría bien abandonar a los fenicios. Es una fortuna para la civilización que la gente elegida falló en la liberación de la costa de Siria de la raza de los Cananitas quienes la ocuparon, porque esta raza se convirtió en los más intrépidos colonialistas y marineros del mundo antiguo. Ellos fueron los primeros quienes guiaron sus barcos frágiles a la merced de los mares desconocidos, y, bajo el nombre griego de los fenicios, exploraron el mundo conocido. En las palabras de Bosworth Smith, "Fueron ellos, quienes, en el período antecedente a toda la historia registrada, introdujeron los caracteres escritos, la fundación a todo alto desarrollo intelectual, dentro de aquella nación que fue destinada a cargar la cultura intelectual a el punto más alto donde la humanidad todavía no ha llegado. Fueron ellos quienes aprendieron a girar sus barcos guiados por la segura ayuda de la Estrella Polar, mientras que los Griegos todavía dependían del Gran Oso; fueron ellos quienes rodearon el Cape of Storms, y se ganaron el derecho de llamarlo Cape of Good Hope 2000 años antes que Vasca de Gama. Sus barcos retornaron a sus antiguas orillas brindando con ellos la madera de sándalo de Malabar, especias de Arabia, lino fino de Egipto, plumas de avestruz del Sahara. Ciprus les dio su cobre, Elba les dio su hierro, la costa del Mar Negro su manufacturado acero. Plata ellos brindaron de España, oro del Níger, lata de las Islas Scilly y ámbar del Báltico." ¿Y quiénes son ellos? Los historiadores deben haber aceptado la leyenda que su tierra fue asentada por los Canaanitas, descendientes de Ham, y después abandonar eso; pero ellos no se satisficieron haciendo eso. En su esfuerzo desesperante de tomar cualquier tira de gloria de la raza Africana, ellos proclamaron que ellos eran Semitas. Los resultados de la arqueología convirtieron sus lastimeros esfuerzos en algo como una broma. Muchos sarcófagos se han recobrado y todos revelan las mismas facciones africanas. Una descripción oficial del sarcófago de Esmunazar II, Rey de Sidon, y uno de los mayores gobernadores fenicios, se lee "Las facciones eran egipcias, con los ojos en forma de almendras y largos, la nariz aplastada y los labios remarcadamente gruesos y de alguna manera como el molde Negro. Todos los rostros están sonriendo, agradables y expresivos por encima de cualquier cosa que haya visto en los monumentos desenterrados, de Egipto o Ninevah." Se les deja a ustedes, cuidadosos lectores, si el Ario o el Semita alguna vez han lucido así.
La mayor colonia de Fenicia fue Cartago. "Ningún oriundo orador que sus escritos nos hayan llegado a estos días, ha cantado acerca del origen de Cartago, o de sus románticos viajes; ningún orador oriundo ha descrito, en períodos resplandecientes que todavía podemos leer, el esplendor de sus construcciones y la opulencia de sus príncipes originarios, no analista originario ha preservado la historia de su larga rivalidad con los griegos y los de Etruria, y ningún filósofo africano ha moralizado acerca de la estabilidad de sus instituciones o la causa de su caída." (Bosworth Smith.) Y preguntando, ¿algunos de nosotros sabemos acerca de Cartago? El amor de Dido es clásico para siempre; el nombre Hanno esta asegurado como uno de los primeros y más importantes navegadores del mundo; y Hannibal, no podemos pensar en Cartago sino pensamos acerca de él. ¡Busca en todas las páginas de la historia humana y escoge un conquistador que se merezca el lugar al lado este general negro! Un hombre quien puede crear ejércitos de los mercenarios, hacerlos caminar miles de millas hacia el pie de los Alpes, sin tener pausa en el enfrentamiento con los peligros repulsivos. No obstante al frío amargo, los vientos congelados y las irresistibles barredoras avalanchas, su único grito fue, "¡Más allá de los Alpes está Italia!" Ya hubiese sido lujuria por ganancia, el amor del aventurero o la devoción a aquel magnético africano, la multitud de mercenarios de África, de Libia, de España y de Galia sufrieron muchas bajas pero se recuperaron y aumentaron en miles cuando escucharon la gran voz que repicó en los precipicios silenciosos, "Más allá de los Alpes está Italia!" El premio que viene con resultados inalterados vino al fin para aquellos soldados de Hannibal y finalmente ellos se pararon en el borde y miraron hacia abajo, dentro del valle del Po. Por quince años ellos y sus líderes vagabundearon libremente, destruyendo ejércitos tras ejércitos que fueron mandados en contra de ellos, y que si ellos fueron derrotados al final- ¿No realizaron ellos una proeza inigualable por cualquier ejército del mundo? Él fue realmente cría de león.
En el tiempo que en Estados Unidos se presentó la estatua de Frederick el Grande, el bien conocido periodista, Ambrocio Bierce, escribió con su acostumbrado sarcasmo y su verdad picante, "Los otros serán Alejandro el Grande, César y Napoleón. Hannibal, mejor soldado que cualquiera de ellos, se excluye -probablemente porque es descendiente Africano, a pesar que él debería ocupar el pedestal de Jim Crow después." El único temor que tengo es de que cuando la verdad de la historia sea conocida, los Estados Unidos llenen a toda la historia antigua con Jim Crow, porque seria sólo el registro de una proeza y gloria africana.
Es una paradoja que la gente más mezclada en el mundo reclame para ellos una raza pura y se abstienen de mezclarse con otras razas lo que fue universalmente practicado por sus ancestros. Me refiero a la raza Judía. De ellos Cheyne, el famoso erudito de la Biblia, dijo: "Fue tan poco una nación de sangre pura como ningún otro en la tierra, porque ésta admitió a personas descendientes de Arameos y Egipcios, como también personas de elementos canaaniticos, hebreos y arábigos." Para empezar, la raza hebrea y su lenguaje no son paternalmente de origen semítico. La casa original de esta gente parece estar en las regiones alrededor de Arabia, regiones que siempre han sido las fortalezas de las razas Africanas. Los hebreos reclaman que Abraham fue su ancestro universal y que vino de Ur de los Chaldees, y esta leyenda brinda a nuestras mentes dos cosas, primeramente, que Chaldea (Caldea) fue puramente Chus (de la tierra de Cus [Génesis 2:13] ) y segundo, que Abraham también se reclama como ancestro de muchas tribus Africanas. La leyenda que Israel estuvo bajo poder de Egipto por quinientos años, se puede suponer que una considerable mezcla tuvo lugar, pero seguramente si no pasó en aquel tiempo, pasó entonces después que los Israelitas fueron a su tierra prometida, Canaan. Aquí estaba otra nación casi puramente Africana y entre ellos los hebreos hicieron su hogar. En más de una ocasión su dios jefe, Jahvé, los reprendió por asociarse muy íntimamente con la broza negra que tenían de vecinos. Salomón, que la historia siempre ha dicho que fue negro fue tan lejos de abandonar los dioses de Israel y asumir los de Canaan, e incluso construirles templos. Moisés y muchos otros caracteres principales han tenido esposas negras y lo que los mejores hombres hicieron no es más que el índice de lo que otros han hecho. En el siglo tercero, cerca al final del año 225, Dio Cassius, un senador romano, refiriéndose a las guerras de Palestina, dice que al lado de los Judíos originales de Judea, "ahí hay otros hombres, quienes, a pesar de diferente raza, han adoptado las leyes del pueblo." Mas adelante él hace mención de la realidad, de que gran proporción de los antiguos judíos eran los descendientes de paganos convertidos, lo que hace ver que sus tendencias a mezclarse fueron continuadas hasta un período posterior en su historia. La tribu de negros judíos que se encuentran en Palestina, Persia, Australia, Malabar, Afganistán, Abisinia, Arabia, y África del Norte, todas son preguntas molestas y, lo que complica el asunto mucho más, es que estos judíos negros insistieron que ellos eran judíos originales y que los otros eran de una raza bastarda.
"E Ishmael, el hijo de Abraham con su asistenta Hagar, fue hacia la tierra lejana del Yemen y allí tomó para él una esposa, y de él descendió la raza pura de Arabia." Esto es el ancestral reclamo por los de la Arabia del sur acerca de su raza y de que sea verdad o sólo una leyenda, ellos se han contentado por esta historia a través de muchos siglos hasta este día. Del norte vino otra gente llamándose Arabes. Ellos fueron más claros de complexión que aquellos del sur y ellos se proclamaron los verdaderos Arabes. Los yemenitas, de quienes Ishmael escogió su esposa, fueron de raza negra semejantes a los etíopes, y los árabes del sur fueron también de complexión negra, y entre el norte y el sur de Arabia se desató un odio que han llevado a los lugares más recónditos del mundo. Incluso, después de la conquista de España precauciones tuvieron que tomarse en contra de una guerra civil procurando que los árabes del sur se asentaran en diferentes distritos que los del norte. Temprano en su historia nacional dos grandes dinastías fueron representativas de la Casa de Rabia y la Casa de Mudar. Los dos fueron de Umayyads o del norte de Arabia, y de Abbasids o sur de Arabia. Los Abbasids fueron negros árabes y su símbolo durante su existencia nacional fue una bandera negra.
Temprano en la historia de Arabia la silla de la dinastía de Umayyad estuvo en Damasco y por un período bastante largo ellos reinaron todo el norte de Arabia sin ser molestados, mientras que Abbasids gobernaba el sur. Pero de pronto los negros se revelaron, derrotaron la dinastía de Umayyad, el gran imperio persa de los Sasanias, y derrotaron también las legiones romanas del Imperio bajo. Una explosión de entusiasmo, pero no fue nada más que un instante, y estos guerreros de piel negra fueron adelante a conquistar el mundo. El resultado de esta convulsión fue la destrucción total del imperio del norte y el establecimiento del califato de Abbasid. Este vasto imperio extendido desde el Indus hasta el Atlántico y desde el Caspian a las cataratas del Nilo. La capital fue reconocida desde Damasco hasta Bagdad, como centro de todas las grandezas de la historia de Arabia. Por cinco siglos los califas de Bagdad reinaron y su gobierno marcó el principio de un Musulmán como oposición a un imperio árabe.
Una autoridad inglesa hablando acerca de este período, dijo: "Parece como si todo el mundo desde el califa hasta los más humildes ciudadanos de pronto se transformaron en estudiantes, o por lo menos patrocinadores de la literatura. En búsqueda de conocimiento hombres viajaron por tres continentes y regresaron a casa, como las abejas cargadas de miel, para impartir los preciados tesoros que ellos han acumulado a la multitud de ansiosos discípulos y compilaron con una industria increíble aquellos trabajos de un rango enciclopédico y erudito de los cuales la ciencia moderna, en el mayor sentido de la palabra, ha derivado la mayoría de sus creencias generales." Fue bajo el gobierno de estos lúgubres soberanos que 'Las Mil y una noches árabes' fueron compilados y revisadas, el Rubaiyat se compuso, Hafiz floreció, y el Romance de Antar fue creado.
Déjame hablar un momento acerca del Romance de Antar. En vano fue mi búsqueda tratando de encontrar una cita en cualquier libro de América, a pesar que fuera el mejor poema lírico de Arabia. Esto puede ser porque el héroe se describe a sí mismo como "negro y moreno como un elefante?" Extraño todavía, Antar no siendo nacido en Arabia, sino un Negro esclavo, fue escogido entre los árabes como la completa expresión de sus propios ideales como héroe. Incluso en las ciudades del Oriente hoy los correcalles en sus tragos nunca se cansan de seguir las hazañas de este hijo negro del desierto, que en persona unió las grandes virtudes de su pueblo, magnanimidad y braveza, con el don del discurso poético. Este es el romance árabe de caballerosidad y a esto se debe a la extensión del romance y caballerosidad por toda la Europa medieval.
Nota, también, la realidad de que Mohammed (Mahoma) fue de estos árabes negros. Cuando él se comunicaba con los árabes se llamaba a sí mismo como "Árabe de árabes, de la sangre más pura de tu tierra, de la familia de Hashim y de la tribu de Qurysh." Fue la familia de Hashim quien fundó la Casa de los Abbasids, de este modo nosotros venimos cara a cara con la realidad de que la tercera de las más grandes religiones del mundo fue fundada por un hombre que en cuyas venas fluía sangre negra. Esta es una de las razones por que el Mahomaísmo es tan fuerte y siempre se mantendrá fuerte entre las razas de África. La religión predica absoluta igualdad y uno de los preceptos del Koran lee, "Si un Negro es llamado a gobernar sobre ti, escúchale y obedécele, aunque su cabeza sea como las uvas secas." Desde lo que se ha escrito de los judíos y los hindúes se verá sin esfuerzo de que el Africano es ahora y fue en el amanecer de la historia, el fundador de la religión.
La extensión del Mahomaísmo incluyó África del norte completamente y, en tiempo, penetró España. Este encontró a España desértica y salvaje y la transformó en un jardín de belleza. Nunca antes y nunca después ella ha visto tal gloria como fue cuando los Moros llegaron a Toledo, Sevilla y Granada, las ciudades más hermosas de Europa. Córdova se convirtió en la metrópolis educacional de la civilización, Sevilla se convirtió en el centro literario del mundo, y Granada fue el triunfo de la maravilla de la arquitectura. España nunca fue nada hasta que estos Africanos, Negros si quieres, le hicieron una tierra de flores, vino, música, arte, belleza, y amor. Su historia es todo esto -el registro de su gloria y su decadencia. Ella se convirtió en una tierra exquisita en el sol caliente del Islam y se fue a no sé donde cuando los norteños la conquistaron. Lee Intellectual Development of Europe ( El desarrollo intelectual de Europa) de Draper y podrás coger alguna idea de la vasta influencia que éste pueblo moreno ejercieron sobre la civilización europea. A ellos se debe el Renacimiento.
Y esto termina el estudio de Asia. Hace cincuenta años uno no hubiese podido soñar que la ciencia defendería la realidad de que Asia fue la casa de las razas negras como lo fue África, siendo realmente esto... Cuando nos maravillamos en la profundidad del amor y la majestuosidad de la pena que construyó el Taj Mahal o examinamos las perfumadas literaturas de la India, Persia y Arabia, no nos olvidemos de que el secreto, como el secreto de todas las cosas maravillosas y estéticamente útiles, descansan en África, la madre de la civilización y de las naciones.

 
Inicio

arriba