La Amortiguacíon Variable
La suspensión pilotada, consiste en controlar los movimientos de la carrocería y la dureza de la suspensión. La amortiguación variable nos permite disponer en un solo amortiguador de tres tipos distintos de dureza, en función de la información suministrada por un calculador electrónico. La información procede de una serie de captadores situados en el volante de la dirección y dos acelerómetros, junto con la información de frenado y velocidad. Hay tres tipos de dureza, una amortiguación blanda (Confort),una amortiguación clásica (Medium) y una amortiguación dura (Sport). En configuración automática el sistema pasa de un tipo a otro con el fin de obtener en cada momento, por medio de la memoria programada en el calculador, el mejor equilibrio entre confort-comportamiento dinámico en función de las irregularidades de la carretera, la velocidad del vehículo y las solicitudes del conductor. El tiempo de paso de un tipo a otro es de 40 milisegundos. La posición manual nos permite seleccionar la máxima dureza del amortiguador (sport). Al poner el contacto se efectúa un chequeo, el encendido del testigo nos informa que el sistema está en fase degradada y podremos conducir con un tipo "sport", para favorecer la seguridad activa, o "Medium" para favorecer el confort.