FUNDAMENTOS DE LAS CIENCIAS SOCIALES

 

                                                             Autor: Pompilio Zigrino

 

Introducción: buscando establecer los fundamentos de las Ciencias Sociales, debemos tratar, en primer lugar, la metodología aceptada (el de la ciencia, en este caso); luego las causas de nuestras acciones (comportamiento) y finalmente la forma en que podemos conocer nuestro medio (conocimiento). De ahí que los temas a tratar serán:  

 

a)    Ciencia

b)    Comportamiento

c)     Conocimiento

 

 

CIENCIA

 

Antes de la aparición de la teoría de la evolución, el conocimiento existente en biología tenía poco sentido, ya que consistía en una gran cantidad de datos sin significado aparente. Luego de disponerse de una teoría descriptiva, comienza a tener pleno significado cada uno de los datos antes inconexos.

 

En forma similar, es necesario disponer, en Ciencias Sociales, de un esquema teórico que permita darle sentido a la mayor parte del conocimiento disperso en las distintas ramas del conocimiento social.

 

Si bien existen teorías parciales, con su propio campo de aplicación específico, es necesaria la existencia de teorías de mayor generalidad, incluso la existencia de una teoría general, como caso ideal.

 

Existen dos requisitos básicos necesarios, aunque no suficientes, para lograr estos objetivos:

 

a)      Deben utilizarse aspectos observables de la realidad.

b)      Deberá organizarse el conocimiento en forma axiomática

 

El empleo de variables observables y comparables (o susceptibles de medición) es un requisito básico que deberá cumplir toda descripción científica. De esa manera podrá ser verificada en todo contraste respecto de la realidad, y el conocimiento podrá tener una validez objetiva.

 

En cuanto a la necesidad de la axiomatización, no sólo surge ante la exigencia de un ordenamiento lógico de los conceptos, sino que, al ser un conocimiento resumido en unos pocos principios básicos, tal síntesis permitirá, en la mente del lector, darle sentido a todo el conocimiento existente. 

 

La presente síntesis ha de adoptar un nivel de observación que se ha de identificar con preponderancia en una de las ciencias del hombre. En este caso será una postura cercana a la Psicología Social ya que, aparentemente, es la que se sitúa en un término medio entre el individuo y la sociedad, permitiendo descender hasta los niveles de la psicología y la neurociencia y ascender hasta los niveles de la sociología, la economía y la política.

 

 

COMPORTAMIENTO

 

Teniendo en cuenta el fenómeno básico de la interacción social, a través del cual se produce la influencia entre individuos y la acción posterior, debemos considerar algunos de sus aspectos básicos:

 

Apariencias objetivas: a partir de estudios realizados por Paul Ekman, y otros psicólogos, es posible afirmar que gran parte del lenguaje gestual, a través del cual comunicamos nuestras emociones, tiene un origen biológico antes que cultural.

Pensemos que la interacción social y la comunicación entre seres humanos serían totalmente inefectivas si nuestros gestos reflejaran algo distinto a lo que sentimos en realidad.

 

Inducción de la personalidad: con esta denominación podemos designar al cambio existente en la actitud de una persona cuando recibe la influencia de otros seres humanos. Al disponer de memoria, parte de la influencia momentánea, debida a la interacción social, pasará a ser una influencia a largo plazo.

 

Actitud: uno de los conceptos más importantes de la Psicología Social es el de actitud. Podemos decir que la actitud personal promueve una respuesta a partir de cierto estímulo recibido, materializando la acción individual. Podemos sintetizar la idea a partir de la siguiente expresión matemática:

 

                          Respuesta (Acción) = Actitud x Estímulo

 

De esta manera definimos con cierta precisión al concepto de actitud, si bien se han dado numerosas definiciones al respecto.

 

Actitud característica: todo individuo tiende a responder de igual manera en iguales circunstancias, al menos durante una etapa de su vida. De ahí que cada individuo posee una actitud propia, distinta a la de todos los demás seres humanos, por lo que podemos hablar de la existencia de una “actitud característica”.

 

Si no existiera tal actitud personal, y cada individuo respondiera de distinta forma en circunstancias similares, no podríamos prever ningún comportamiento ni conocer a ninguna persona, sino que habría de predominar un comportamiento caótico e impredecible.

 

Como vimos, la definición básica de la actitud implica un vínculo entre respuesta y estímulo. Además, podemos definirla en cuanto a las causas que la producen:

 

                        Actitud = Herencia + Influencia

 

Ello implica que nacemos con ciertas características personales heredadas (factores biológicos) y, además, la interacción social produce influencias permanentes en nuestra actitud personal, algo que se comprueba en neurociencias a través de la plasticidad cerebral. Ello implica que gran parte de la información recibida por el individuo produce cambios en el conexionado entre sus neuronas y así se materializa la influencia recibida desde el medio social.

 

Clasificación de las actitudes: desde un punto de vista emocional, o afectivo, existen cuatro actitudes básicas que cubren todo el espectro de las respuestas posibles. Así, imaginemos la interacción de dos individuos, A y B. Si a uno de ellos le sucede algo bueno, el otro compartirá esa alegría, o se entristecerá, o será indiferente. Si le sucede algo malo, el otro compartirá la tristeza, o se alegrará, o será indiferente.

 

De ahí que podemos definir las cuatro actitudes básicas que, agregadas en distintos porcentajes, conforman la actitud afectiva de todo ser humano:

 

Amor: actitud por la cual se comparten las alegrías y las tristezas de nuestros semejantes

 

Odio: actitud por la cual se siente tristeza propia por la alegría ajena (envidia), y alegría propia por la tristeza ajena (posible burla).

 

Egoísmo: actitud por la cual el individuo es indiferente a lo que le sucede a los demás porque sólo se interesa por sí mismo.

 

Negligencia: actitud por la cual el individuo es indiferente a lo que le sucede a los demás y también es indiferente por lo que le sucede a él mismo.

 

Principios emergentes: a partir de la existencia de las cuatro actitudes básicas, es posible suponer la existencia de principios naturales que actúan como “fuerzas” que presionan a los individuos a adoptar tales actitudes.

 

En el caso del amor, podemos asociarle el Principio de Felicidad, como una fuerza que nos impulsa al logro de las satisfacciones morales.

 

En el caso del odio, podemos asociarle el Principio de Competencia, como una presión que nos impulsa a superar a los demás y a evitar ser superado por los demás.

 

En el caso del egoísmo, podemos asociarle el Principio de Placer, como una presión que nos impulsa al logro de la comodidad y el placer para nuestro cuerpo.

 

En el caso de la negligencia, podemos asociarle el Principio del Sentido de la Vida, como una presión para adoptar un sentido que motive nuestra acción individual, que está disminuida en el caso del negligente.

 

Es oportuno mencionar que estos principios han sido destacados por la religión cristiana, como camino a la felicidad; por Alfred Adler y su Principio de Inferioridad; por Sigmund Freud y el Principio de Placer y por Viktor Frankl y el sentido de la vida.

 

Ética natural: siendo la ética la ciencia que describe las causas del Bien y del Mal, podemos identificar tales causas en las actitudes básicas del hombre:

 

Bien: Amor

Mal: Odio, egoísmo y negligencia

 

Siguiendo el planteo hasta aquí realizado, podemos decir que existe una ética de validez objetiva que no cambia con el tiempo ni con los pueblos. Esto es válido considerando estrictamente la existencia de las actitudes básicas del hombre, tal como se ha definido la presente ética natural.

 

 

CONOCIMIENTO

 

Teoría evolutiva del conocimiento: propuesta por Karl Popper y otros autores, se establece una analogía entre el proceso de la evolución por selección natural y el método empleado por la ciencia experimental. Incluso se acepta que el proceso incluye todo tipo de conocimiento. La teoría del conocimiento se refiere, entonces, tanto al individuo como al accionar de los científicos.

 

Así, mientras que las variaciones y posterior selección favorecen a los individuos y a las especies aptas, las distintas propuestas científicas y la posterior verificación experimental favorece a las teorías que mejor se adaptan a la realidad.

 

Lógica natural: este proceso similar al evolutivo, que permite el conocimiento, está sustentado por algunas operaciones lógicas que realiza nuestra mente. Así, el proceso de “prueba y error”, asociado a los sistemas realimentados negativamente, involucran la operación “comparar”, ya que todo error es el resultado de establecer una previa comparación (o resta aritmética).

 

La segunda operación será la de “agrupar”. La posibilidad de establecer agrupamientos de información de tipo deductivo, como lo es la axiomatización del conocimiento, tiene su analogía en el agrupamiento realizado en nuestro propio cerebro y que sigue los lineamientos que establece el aprendizaje por asambleas neuronales propuesto por Donald Hebb.

 

Lenguaje: además de las comunicaciones no verbales, el hombre tiene la posibilidad de codificar los aspectos básicos de la realidad para poder establecer símbolos (fonéticos o gráficos) que le permitirán transmitir información a los demás individuos.

 

Es posible establecer una descripción básica de lo que observamos a través de tres conceptos básicos:

 

a)      Entidades: son los distintos objetos, animados o inanimados, que existen.

b)      Atributos: son las características asociadas a las entidades.

c)      Actividades: son las acciones realizadas por las entidades.

 

Asociando los sustantivos a las entidades (¿quién?), los adjetivos a los atributos (¿cómo es?), y los verbos a las actividades (¿qué cambios produce?), tenemos las bases del lenguaje natural o elemental.

 

Se ha propuesto un esquema básico que puede ayudar a establecer una síntesis de los fundamentos de las Ciencias Sociales. Se sugiere al lector poner a prueba los conceptos emitidos, como así también a establecer un sistema descriptivo similar si considera que no concuerdan con la realidad, o que es posible establecer una síntesis mejor que la realizada.

 

(Véase Funda2)