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| ARMAS
DEL CUERPO |
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Tradicionalmente,
se considera posible transformar cualquier parte del cuerpo en un arma
para defenderse o atacar. Algunos estilos, en efecto, conocidos por sus
duros y repetidos ejercIcios, se destinan a reforzar también los
puntos generalmente considerados vulnerables como forma de poseer un cuerpo
casi acorazado. A continuación consideraremos las manos como parte
del cuerpo que puede tener un papel importante como arma ofensiva, si
bien debe tenerse siempre en cuenta que el Kárate es un arte marcial
que tiene un carácter eminentemente defensivo y que, por lo tanto,
nunca debe utilizarse para agredir a nadie |
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LAS MANOS: Son
el elemento esencial de la lucha: tanto si se trata de golpear como
de agarrar, en todos los estilos es siempre la mano el primer elemento
del cuerpo que se utiliza. Es por ello que buena parte de los ejercicios
están orientados a la coordinación entre las manos y el
resto de partes del cuerpo. El kárate no se aparta de este principio
y utiliza las manos en una gran variedad de formas, siguiendo entre
mano abierta y mano cerrada. Es
preciso usar cierta cautela, porque, la mano no está hecha para
golpear sino más bien todo los contrario: si nos fijamos atentamente
en su constitución ósea y muscular, veremos que se trata
de un órgano relativamente delicado, lleno de articulaciones
y terminaciones nerviosas. Es la mano la que sufre el contacto y sobre
la cual recae toda la presión y el esfuerzo que deben invertirse
en el movimiento, todo el brazo e incluso todas las demás partes
del cuerpo que participan en la acción; por esta razón
también las otras zonas -como la muñeca, el codo y el
hombro- deben ejercitarse al mismo tiempo que la parte directamente
implicada. |
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Gichin
Funakoshi