16.08.00
Perú 1 - Venezuela 0
JUGANDO A NADA
Sin duda alguna los equipos son el espejo fiel del mensaje
que transmite el técnico. Cuando el técnico
cae en la incoherencia y cambia su verso habitual en el que predica la necesidad de
obtener resultados jugando bien, para luego cayendo en la desesperación decir que lo que
interesa es solamente un resultado de cualquier forma aunque sea con un gol injusto
y de penal en el ultimo minuto entonces podremos entender el por que de la
mezquindad futbolística exhibida por la selección peruana de fútbol en una nocha para
el olvido frente a su similar de Venezuela.Parece increíble aue nuestra referencia esté relacionada a un
técnico que como Francisco Maturana lideró un proceso indiscutible en el fútbol
colombiano, que si bien no se consolidó en grandes resultados, trazó un derrotero hacia
el futuro para el fútbol del vecino país.
Con la sola inclusión de José Soto
por lesion de Miguel Rebosio, la selección peruana alineó el mismo equipo de
presentaciones anteriores en calidad de local. En
honor a la verdad, en ningún momento se pudo observar a un equipo que demostrara fútbol
de autor, es decir, una disciplina táctica previamente concebida. Lo que nos quedó fue la sensación de un equipo
desordenado, sin brújula, que lo único que intentó fue buscar en forma desesperada, y
en medio de sus tremendas limitaciones, un gol salvador que pudiera sumar y salvar la contingencia.
Venezuela, conciente de sus
posibilidades, se aferró los noventa minutos al libreto planteado por José Omar
Pastoriza, un hombre que de estas cosas sabe mucho: un
planteo táctico muy conservador pero sin renunciar a buscar el partido en la zona de
fuego del equipo contrario. Y estuvo muy
cerca por intermedio de Gianni Savaresse y Fernando Cáceres de lograr el cometido al que
apuntaba: el empate histórico como
visitante.
Perú dejó de lado el buen trato de
balón y buscó infructuosamente la llegada por intermedio de los cambios de frente
aéreos, que fueron siempre bien controlados por el arquero Angelucci, un hombre de
1.81mts. de estatura e inexpugnable por arriba. Pizarro
y Zúñiga demostraron una carencia tremenda de ideas ofensivas y una inseguridad e
imprecision sorprendentes en jugadores que militan en el fútbol europeo. Apenas a los 40 minutos del PT, Pajuelo abandonaba
el terreno lesionado, cediendo su lugar a un intrascendente Marengo, convocado a última
hora.
A los 24 del ST, cuando apenas habían
transcurrido dos minutos del ingreso de Paolo Maldonado por Nolberto Solano (una verdadera
nulidad como enganche en la posición de ocho cuando su posición natural es
la de lateral derecho), el diminuto jugador de Universitario pone finalmente el balón
contra
foto: www.libero.com.pe
el suelo y Perú empieza a recuperar algo de su toque habitual, y es allí cuando luego de
una pared con Roberto Palacios, el disparo de éste ultimo es bloqueado parcialmente por
Angelucci para finalmente volver Palacios a disparar con un remate a media altura que
significó el gol que a la postre definió el partido.
Cabe mencionar que ésta fue la única jugada gravitante del partido y la
única también en la que el mediocampista que actúa en el fútbol mexicano apareció.
Venezuela buscó intensamente la
posibilidad del empate y un tiro de Tortolero, de cabeza, pegó en el travesaño cuando
Ibáñez nada tenía que hacer.
El turno ahora es para Argentina que
nos visitará en los primeros días de Setiembre, y aun cuando los dos últimos resultados
no son de los mejores seguimos pensando que dentro de la mediocridad de éstas
eliminatorias es el único equipo que sabe a que juega y que es lo que quiere. Además, tiene el respaldo de un banco de recambio
de lujo, algo sumamente importante por tratarse de unas eliminatorias muy largas y
agotadoras.
Al equipo argentino hay que ponerle el
balón contra el piso y tocar en profundidad buscando los espacios (lo cual no sera nada
fácil considerando el medio campo y el bloque defensivo argentinos). Ir a buscar pelotazos por arriba sería un
suicidio porque nuestros delanteros no ganarían una pelota frente a una defensa alta y
fuerte como la argentina. El equipo
albiceleste cometió un error en Sao Paulo (encarar el partido como local) que no va a
volver a cometer en Lima.
Ojo también que en Lima volverá
Gabriel Omar Batistuta, luego de un descanso reparador, y dispuesto a volver por sus
fueros. Si a ésto sumamos el aporte de
Ortega y Crespo, concluímos que la defensa peruana tendrá que enfrentar un verdadero
dolor de cabeza. Maturana tiene la palabra,
aunque de un tiempo a esta parte sería mejor que optara por el silencio ya que viene
desafinando tremendamente.
Hasta la próxima. |