Webelos + Rizillos. (15 Junio 2002. Eneba).
A ver, este concierto del que os hablo fue hace un mes más o menos, así que a ver hasta donde llega mi perjudicada memoria (aquí no se engaña a nadie). Me acuerdo que ese día había un montón de conciertos en Madrid y se notó un poco en la asistencia. Aún así había gente. El lugar era la sala Eneba. Está bien, está céntrica y además es un buen exponente del DoItYourself, no hay técnico ni leches, llegar y besar el santo.Me acuerdo que empezaron los Rizillos, de Zaragoza. Que buenos. Aunque musicalmente nos torturaron, en el escenario son uno de los grupos con más carisma que he visto últimamente. Divertidos, con más cara que espalda, con buenas ideas, con bigotes (todos! al parecer especial para la ocasión)... a mí me encantaron.Me acuerdo que luego salieron los Webelos. Presentaban su nuevo disco en Bazofia Records. Con otro batería (como viene siendo habitual en ellos) y con las mismas malas pulgas que siempre. Brutos, bocazas, guarros... con muchas ganas e igual de descacharrantes. Menos Cramps y más Punkis, como vienen estando últimamente, se lo hicieron con estilo. El público encantado con ellos (cosa rara) más de lo habitual, divirtiéndose, aunque como es costumbre por aquí, sin despeinarse el tupé. Gente nueva en el concierto (algo que hace ilusión) junto a la misma gente de siempre (uno muy majo de un fanzine de Azuqueca que bailaba mucho haciendo el baile del pogo y que se ganó el cariño de los presentes). Los Webelos se lo despacharon en plan estrellas, con playback al principio incluido y cánticos subversivos.
Bad News Brown.


THE JEVI METAL FESTIVAL: Pili y sus Lechones, Webelos, Piolines, Speaking English o muere!, Capitán Entresijos, Ginferno y Óscar.

(Este crítica me la encargaron para Ipunkrock. La reproduzco aquí porque sin duda a alguna este fue el festival del año, y quería que lo leyeseis).

Cuando me dijeron que hiciese una crítica de este festival no me pareció correcto criticar un concierto en el que yo tocaba. Pero acepté, pensando en endosárselo a algún espectador imparcial. No obstante ninguno de los espectadores que asistieron al evento sabe leer ni escribir y si alguno sabe, no creo que recuerde nada de lo que allí sucedió. Y es que fue muy fuerte, realmente impresionante, el festival más salvaje de cuantos he presenciado. El público se entregó a una orgía colectiva de revolcones por el suelo, litros de cerveza sobre el rostro, peleas, escupitajos y violencia sin sentido; eso sí, sin perder el buen humor y la "camaradería".
Abrieron la noche Pili y sus Lechones, que, aunque se han separado, se unieron para tocar en este festival especialmente diseñado para ellos. Con pelucas de fantasía, caretas de vaca y estrenando un organista que improvisaba sobre sus temas porcinos; los Lechones ofrecieron un espectáculo de cochambre, ruido y violencia que se recordará siempre en la sala. Dieron un repaso a sus éxitos más fulminantes: El carnicero, Chica RNR, Mierda, Everybody hates me (Loli and the chones)..., incordiaron a la peña y Pili recibió una buena sesión de patadas por parte de los asistentes. Como siempre en su línea sónica que conjuga a la Imperfección el sonido de la primera etapa de Rip Off Records con el toque artie de Phantom Pregnancies. Lo mejor vino cuando un tal Óscar (desconocido hasta la fecha por nosotros, y desde entonces nuestro ídolo) se subió a improvisar sobre el tema "Oink oink" de los Lechones, transformándolo en un "Oi! Oi! Tonite" que nos dejó a todos con la piel de gallina. Sobresaliente alto para esta banda única en el género.
Después salimos los Webelos. En formación de dúo debido a la extraña enfermedad de última hora de Bernie. Poison a la batería y yo a la guitarra lucimos nuestro vestuario más heavy con cinturones y muñequeras de pinchos, pantalones ajustados y camisetas de Iron Maiden y Barón Rojo. La ocasión (Jevi Metal festival) lo merecía. Tocamos e insultamos a partes iguales y conseguimos que los dos únicos heavys de verdad que vinieron al show, se fuesen echando leches, en cuanto intentamos hacer una versión de Ñu con una flauta de todo a 100 y la acabamos rompiendo. Se fueron muy ofendidos, peor para ellos. El público, hostil como siempre, tuvo su ración de Punk del de verdad; para algo somos el único grupo Punk que queda en este país. La modestía no es lo mío, pero eso ya lo sabíais. Temas propios de los nuevos y de los viejos y versiones de Tragics, Siniestro Total y Sex Pistols (que originales) fueron recibidos a gapazo limpio.
Luego salieron los Piolines vestidos de pollitos amarillo chillón y con esos gorros con pico tan cañeros. Ofrecieron canciones muy nuevas y muy molonas; el nuevo disco promete. Me quedo con "Concejal del PP" y "Aberrando". Lo cierto es que al compartir cartel con bandas tan horripilantes, los Piolines se convirtieron en el grupo más "profesional" de la noche. Con esto te puedes hacer una idea de lo que allí se coció. Rápidos e irritantes obtuvieron una buena respuesta del público, que totalmente borracho se entregaba a la provocación y al desparrame. El momento álgido llegó cuando el Capitán se subió a cantar con ellos "El heavy no es violencia"; un tema superolvidado por los Piolines de su primer 7". Purito descojone y parodia del heavy metal. Muy bueno.
Los cuartos de la noche fueron Speaking English, y para mí los triunfadores absolutos. Con ellos todo el público acabó de soltarse la melena y de entregarse al "Jevi metal". Para el que no les conozca diré que este simpático dúo se dedica a grabar las bases en un casete y luego cantan encima. Pelos largos y camisetas de los Suaves y Reincidentes y una actitud de "We´re heavy metal. We're pelo largo" que convenció a todos. Temas propios como "Pretty Almeida" se mezclaron con las versiones más descacharrantes de los clásicos de Kaka de Luxe, Ilegales o EUROPE!!!!!!! Y es que cuando sonó "The final Countdown" el estadio se vino abajo y todos coreamos el enfermizo estribillo del grupo más maricón del heavy metal sueco. (Ya sabes, como Hellacopters, pero más auténticos). Acojonante. Se me pone la carne de gallina de recordarlo.
Por fin le llegó el turno al Capitán Entresijos, el rey del bajo fuzz. De rigurosa etiqueta, con pajarita y gorro de piscina, se presentó con semi batería y teclados. Sin guitarra, al más puro estilo Screamers; pero eso sí, el sonido mucho más en la línea de Ilegales y Espasmódicos. Interpretó temas de su último CD "Dando Tormento" y tuvo de invitada especial a Merche (Piolines) desfasando al máximo sobre un tema de ¿Mick Jagger? Y es que el Capitán venía directamente de una fiesta (supongo que homosexual) que organizaba Morritos Jagger; de ahí que viniese de etiqueta. Como no podía ser de otra forma, y a petición popular, volvió a salir Óscar a cantar un tema con el Capitán. Se inventó una letra improvisada que podríamos titular "No hay diversión", mientras el público le jaleaba y él se concentraba en cantar y no perder su bolso riñonera que colgaba de un hombro. Al final le sacamos a hombros, ¡qué fiera!
Y no estaba previsto, pero ya que estaban allí todos los componente de Ginferno, les obligamos a salir. Nos deleitaron con tres temas de su RNR desafinado de contraritmos y asonancias en la línea de unos Deadbeats peleándose con Pussy Galore. También interpretó un tema Óscar, aunque le resultó difícil improvisar sobre esos ritmos fluctuantes y enfermizos. La nota triste de la jornada la puso Fran Zapping que le quitó el cable del micro a Óscar cuando intentaba cantar algo así como "No se me ocurre que cantar...".
Ahí acabó el festival más mongoloide, anárquico, cutre, casposo e hijo de puta de la historia. En el 2003 prometen una nueva edición; no os lo perdáis. Tenía que ser en Leganés.
M.I.

D.O.A. (11 julio 2002.Gruta 77).
En esta ocasión los D.O.A. tuvieron poco público, pero demostraron que están en plena forma como hace 22 años cuando sacaron el primer disco. Bueno, lo demostró Shithead, el único que queda de la formación original, y sus dos acompañantes (por cierto muy punkies de aspecto y excelentes músicos). Política y sonido de época, con el bajo muy alto, como debe ser. Shithead demostró lo que es cantar Punk con su propia voz y con la de Jello Biafra. Voz que tomó prestada en algún tema, imitándola muy bien. Una pena que el público no se entregase más, porque ellos se lo merecen. Lo peor fue el panfletismo político y alguna que otra incursión en el repugnante mundo jamaicano. Además, sobraron todas las canciones de la última media hora del bis. El concierto duró 40 minutos y el único bis casi una hora y media. Motivo por el que al final se acabó haciendo pesado. Pero me quedo con los primeros 40 minutos y las primeras del bis; y me quedo muy satisfecho.
M.I.

DICKIES. (12 julio 2002. Gruta 77)
Fascinante, acojonante, purito Punk... Y encima, bajista de lujo: el mismísimo Olga de Toy Dolls. Tenían las pintas, tenían el repertorio plagado de clásicos de sus tres primeros y acojonantes discos, tenían al público totalmente entregado y el pogo y los gapos no se hcieron esperar. Los Dickies nos ofrecuieron un concierto brillante y muy divertido en el que todod el mundo se lo pasó genial. Público entusiasta, gran pogo, salvajismo, mascotas divertidas y el mejor Punk Rock melódico de la historia, con permiso de los Ramones y los Buzzcocks. Además, como premio, en los bises se marcaron un "Nellie the elephant" de Toy Dolls, que hizo que el Gruta se viniera abajo. Me gustó mucho más que hace un par de años. Uno de los mejores conciertos del año, o quizás el mejor. Cuento los días que quedan para que vuelvan a visitarnos.
M.I.


 

 

DEAD KENKEDYS + COMMANDO 9MM + SILICONE TRANSPIRATE. (13 julio 2002. Arena).
Comenzaron los Silicone Transpirate, que, francamente, no me gustaron mucho. No se qué entiende la gente por HC Old School, pero yo creo que aquello no lo fue en absoluto.
Luego salieron el Pollo y Manolo Uvi con sus Commando 9mm. Probablemente uno de los grupos que más se merecía telonear a los Kennedys. Estuvieron ,bien en su línea. Pero lo que más me jodió fue que se cargaran "La policía" de La Uvi, en una versión más propia de Medina Azahara que de un grupo punk; y que luego destrozaran el "Frontera francesa" de Larsen, tocándola como si la hubiesen tocado unos Slayer excesivamente borrachos. Esos virtuosismos del heavy, no casan con el Punk, y menos en clásicos ya grabados en nuestros cerebros con el sonido original.
Y por fin aparecieron nuestros ídolos de la adolescencia. Más viejos y con unas pintas un poco decepcionantes. Pero eran ellos, o lo que quedaba de ellos.... Los californianos demostraron lo que todos esperábamos, que Jello Biafra es insustituible. Solamente correctos, nada más. El concierto lo salvó el cariño y la energía del público. De todos modos la voz del nuevo cantante estuvo a la altura, ya que la imitaba bastante bien; y de hecho fue el que más ganas le echó al asunto. El repertorio fue casi el clásico que tocaban allá por 1982, con incorporaciones de canciones posteriores. Visitamos California, Camboya, Las Vegas y Marin, gritamos lo de "mata al pobre" y "que jodan a los Punks nazis" y acabamos todos demasiado "borrachos para follar". El sonido regular. Podría haber sido un concierto muchísimo mejor, pero es lo que hubo. Eso sí, a pesar de haber mucha gente no estuvo lleno al 100% como me imaginaba; y es que el precio abusivo no invitaba precisamente a asistir. Pero, al menos podremos decir que por fin les vimos!!!
M.I.

Jancee Warnick + Rock-a-Hulas. (7 septiembre 2002. Gruta 77).
Pues de esta forma estrenábamos la temporada 2002-2003 en el Gruta. Por fin vimos a los Rock-a-Hulas con teclados, ya que en Cedeira no pudo tocar el organista. Lo cierto es que me gustó mucho más, aunque el teclado se oía bajito. Y a pesar de que el órgano se presta más al sonido Garage, me sonaron menos garageros, mas R'N'R; es decir mucho mejor. Fiesta, diversión, unas gotas de surf instrumental por aquí, unas bromitas por allá y: voilá! No sé, quizás eligieron un repertorio más rocker y menos "fuzzero" para la ocasión, o quizás no eran tan garageros como pensé en Cedeira. De todas maneras Paco es todo un personaje al que hay que ver en un escenario. Me gustó bastante.
Después salieron los guiris, dos hermanos rusos y un yankee remolón: una combinación explosiva. Y su música también lo era. Aunque en su mayor parte se podría etiquetar como Western y R'N'R 50's clásico, en la mayoría de sus canciones hacían incursiones en el folklore ruso. (No es broma). Y lo cierto es que no les quedaba nada mal, demostraron ser un músicos excelentes. E intentaron demostrarnos también que Elvis (del que se marcaron varios temas), no sólo era el Rey, si no también el Zar del R'N'R. Como unos cosacos cabalgando por el desierto de Nevada camino a Las Vegas. Divertidos y curiosos. Aunque con una puesta en escena en plan disfraces y banderitas podría haber sido mucho más divertido (y también una gran horterada; ya lo sé). O al menos con una imagen de grupo de más cuidada.
Y eso sí, no sé si me hago viejo, o cada vez soy menos "adulto" y más infantil. Pero me aburre que los grupos toquen más de 40 minutos. Reflexionaré sobre ello.
MI.


Red Alert + Malas Cartas. (22 septiembre 2002. Ritmo y Compás).
Eran muchas las esperanzas que habíamos puesto en el regreso de los Red Alert, pero está visto que todos los regresos no pueden ser como el que hicieron los Menace ( que fue acojonante). Empezaron a tocar los catalanes Malas Cartas. Por las referencias que tenía del grupo me esperaba otra cosa. Me defraudaron un poquito, aunque hay que reconocer que en directo son muy contundentes. Lo que menos me gustó fue sus incursiones en el HC más acelerado y recalcitrante, y su versión de Andanada 7 (casi nada). Además las letras son demasiado políticas para mí. Lo que más me gustó fueron las canciones que se marcaron de Punk y/o de Oi! de toda la vida. Y en especial las versiones de Interterror y Eskorbuto (a pesar de estar muy aceleradas para mi gusto).
Después pisaron el escenario los ingleses. Ya cincuentones, calvos y barrigones. Aún así tocaron de puta madre y tan sólo el cantante (curiosamente el único flaco y con casi todo el pelo) parecía cansarse en algún momento, en el que se sentaba a descansar. Algunos temas intermedios fueron un poco coñazo, pero en general las primeras canciones y las últimas estuvieron muy bien. Se puede decir que siguen en forma tanto "Oi!", como ayer. Lamentablemente, unos himnos tan coreables y un público tan frío no son la combinación más idónea para disfrutar de este tipo de eventos. La peña (en un 98% Skin heads), no se animó hasta los bises, que sin duda fue lo mejor del concierto; con un apoteósico final en el que interpretaron "If the kids are united" de los Sham 69 con todo el público encima del escenario cantando y bailando. Si la entrega hubiese sido así desde el principio, el concierto hubiese podido ser cojunudo, pero nos quedamos a medias en un "ni fu, ni fa". Y sin resolver la pregunta que nos hacíamos todos: ¿leyendas del punk inglés que se reúnen para complacer a sus fans, o un grupo de tercera división que se junta para sacar unas pelillas? En otra ocasión lo comprobaremos. La nota de color la pusieron unos chavales que quemaron una bandera inglesa, que no era otra cosa que el pañuelo que le robaron de la cabeza al guitarrista. Que cosas...
M.I.

Marky Ramone & the Speedkings + No Picky. (23 septiembre 2002. Gruta 77).
No piqué otra vez con Marky, simplemente me acerqué a ver a los No Picky. Lo cierto es que prefiero quedarme con su etapa en los Ramones (¿quién no?), y olvidar estas anécdotas chapuceras.
Del primer grupo que tocó no me acuerdo ni del nombre. Podría buscarlo, pero no merece la pena. Ya que, como he dicho en más de una ocasión, en el Superpunk comentamos conciertos de Punk, no de otros estilos que poco o nada tienen que ver con el tema.
En segundo lugar, desde Málaga, los nuevos reyes del Punk Rock melódico estatal: los No Picky. Demostraron ser un grupo sin fisuras en directo y unos perfectos seguidores de la escuela Ramones, Screeching Weasel, Queers... Me impactaron sobre todo sus pinitos en el surf instrumental, muy muy potentes y atronadores. Y fue muy grato escuchar la versión que se marcan en español del "Caliente" de los Supersuckers. Lo pasamos bien, nos sabíamos las canciones y nos volvimos a enamorar de chicas punk en los cementerios. Lástima que el público estaba más atento a ver si salía o no Marky, que al concierto de los malagueños.
Y después salieron los Speedkings con Marky a la batería. Podría obviar el tema, pero me apetece cachondearme un rato. Para empezar los reyes del Speed eran un grupo de chiste. Uno con camisa de bolos, el otro con camiseta de Elvis y el tercero con unas placas de identificación del ejercito (por su edad bien podrían ser de Vietnam, jejeje). Después sus canciones: demasiadas influencias, y es que no renunciaban ni al Punk Rock, ni al Punk Pop, ni al Heavy Punk, ni al RNR, ni a su puta madre. Pero todo tocado con esas distorsiones metaleras y esa voz mierdera. Su influencia más visible eran Supersuckers (en todas sus etapas), pero eso les convertía en unos superpaletos de tercera división. No es que tocaran mal, que tocaban muy bien y muy contundentemente, es que simplemente era una aglomeración de clichés, estilos y demás, y parecía una caricatura y no un grupo serio. Y para rematar, las versiones de Ramones; las que justificaban el pastón que costaba la entrada. Algunos grupos nos hacen dudar, pero tras escuchar a estos, no hay duda: tanto Joey, como Dee Dee, como Johnny son inimitables (con permiso delos Riverdales). Asesinaron gustosos algunos de mis temas favoritos de toda la vida y se quedaron tan a gusto. Alguien debería pagarle una operación de garganta al cantante (y extirpársela). Para cuando tocaron "I wanna be sedated" yo desee estar muerto, antes que sedado.
Para acabar una reflexión: si tantas ganas tiene Marky de tocar en un grupo, ¿por qué no toca la batería con los Queers o alguien así?
M.I.

The Queers. (5 octubre 2002). El Sol.
Si no llevo mal la cuenta es la quinta vez que pisan Madrid, la quinta vez que tocan en El Sol, la quinta vez que voy a verles y la quinta vez que me divierto como un enano. Exactamente lo mismo que las otras veces: Punk Rock melódico a toda pastilla, adornado con algún medio tiempo un poco más mariquita y con sus canciones más salvajes de Punk subnormal made in 1984. Estas últimas son mis favoritas, y cuando tocan "This place sucks" o "Kicked out of the Webelos" se me pone la piel de gallina. ¿Para cuando una gira de los Drunken Cholos? Lo estoy deseando. (Para el que no lo sepa los Druken Cholos son los primeros Queers, los del 84 haciendo aquel mismo estilo). Claro que también me emocioné con su repertorio Lookout, con temas como "Yummy Yummy Punk Rock girls" o "Ursula finally has tits". Y es que aunque sea material de los 90 ya se han convertido en clásicos del Punk.
Como invitado de lujo este año tuvimos a la guitarra a Dani Vapid (Screeching Weasel, Riverdales...). Las versiones, casi las de siempre: Angry Samoans, Who, Undertones, Ramones, S. Weasel... y Rolling Stones???? Sin lugar a dudas lo peor del concierto. Un "Jumping Jack Flash" que rompía con todo su repertorio de Punk y melodía, bastante rancio y patético. Francamente no sé a que vino eso. Por lo demás: lo de siempre. Público entusiasta, agitación juvenil (quizás este año un poco menos), camaradería y muy buen rollo. Seguiré acudiendo puntual a la cita.
Y es con otros grupos de estos que viene cada año o cada dos años a España, acabo aburriéndome de verles tantas veces y decido no pagar XX euros por ver otra vez el mismo espectáculo de gente como Goovie Ghoulies o Dictators (que me encantan, pero que acaban casándome). Sin embargo no sé que tienen los Queers que no me aburro. Ya veremos lo que pienso el año que viene.
M.I.

Más conciertos. 

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