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Riazor y Orzán.
Aunque tienen
nombres distintos son el
mismo arenal separado por un dique. Tiene más de
un kilómetro y a lo largo de amba
s transcurre el paseo marítimo, y el
aparcamiento subterraneo. Hay claras diferencias entre ambas: Riazor es la
de toda la vida a la que sigue yendo la gente que vive en la ciudad y que
busca tranquilidad. El Orzán es más como "Los vigilantes de la
playa", muchos turistas y quinceañeros (en pleno verano y con la marea
alta no se cabe). Las dos tienen bandera azul europea, y cuentan con
socorristas y duchas. El mar suele estar agitado con grandes olas.
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Matadero. Es una pequeña cala al
lado de las otras dos, con menos gente. Un poco más tranquila.
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La playa del
inglés. Es una
pequeña cala al pie de la Torre de Hércules, muy familiar y con poca gente
(y ojalá que siga así). Duchas, y el aparcamiento de la Torre al lado.
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San Amaro.
También en la zona de la Torre. Es una playa muy recogida, con el "Club
del Mar" al lado. El agua es tranquila, pero suele estar muy fría.
Duchas y socorristas.
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Oza.
En el otro extremo de la ciudad. Playa de arena fina, con un agua muy
tranquila. El acceso no es muy bueno. Carril bici, socorristas y duchas.
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Santa Cristina.
Al pasar el puente del pasaje, con
muchas comodidades por la variedad de
restaurantes, cafés y pubs que hay. Hay dos zonas en la playa: la de la
ría y la del mar. La zona de la ría es mejor cuando hace viento, y es
ideal para los niños, aunque hay que tener cuidado con las corrientes. La
playa es limpia y con una bonita vista. Grandes dunas de arena muy fina. Hay
socorristas, duchas, y en verano se puede ir en lancha desde el puerto de La
Coruña.
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Bastiagueiro.
Es un gran arenal no muy lejos del anterior, ya que incluso se puede ir
andando. Es el paraiso de los surfistas por sus grandes olas. Suele hacer
mucho viento, pero siempre hay mucha gente jugando al futbol, ya que la
playa es muy grande. Tiene un gran aparcamiento enfrente. Cuenta con la
bandera azul de la unión europea, duchas, socorristas y camping en uno de
los extremos.
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Santa Cruz.
Tiene una pequeña playa que no vale mucho. Lo más bonito es que se ve el
Castillo que hay en una isla y al que se puede llegar andando con la marea
baja.
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Mera.
Mera tiene cuatro playas practicamente seguidas una de la otra. La primera
es Santa Ana, muy pequeña y usada por los pescadores. La segunda es
Mera,
que se junta con la tercera Penatouro
gracias a la ingeniería y a las
toneladas de arena que le hecharon. En la de Mera suele hacer más viento y
es de piedras grandes, lo que dificulta un poco el andar (digamos que no lo
hace muy estiloso). La de Penatouro es muy familiar, y es una mezcla de
arena y piedras. La de Espiñeiro, la última es la más bonita y la de peor
acceso, pero cuenta con un chiringuito estupendo a pie de playa, tiene una
isla a la que se puede ir andando con la marea baja. Es la playa de los
pijos, mucho yate, muchas motos de agua y mucha/o niña/o mono. En
cualquiera de estas playas el agua es como un cristal, pero corta de lo
fría que está.
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Canaval.
Es una pequeña cala por el camino opuesto al de los faros. Los accesos son
malísimos (tiene una escalera ideal para matarse) pero es una preciosidad,
aunque con la marea alta deben de caber 10 personas. El agua es la más
limpia de todas, pero está congelada.