Abrí los ojos y en mi alma,
solitaria y encerrada en el abismo,
te busqué

Abri los ojos y en la obscuridad profunda,
sin sentir esa negrura,
te encontré.

Tu voz me liberó de la apatía
tu luz me iluminó en la soledad
tu amor despertó viejas heridas
y aún así, quise salir a tu encuentro
y adentrarme en ti.

Y esa voz, temblorosa y aturdida
dice: "Ven y sigamos el mismo camino"
Para continuar el poema

 

Principal ] Arriba ] Sentir_lo_que_siento ] Mi Credo - MGH ] Pescador de hombres ] Llama de amor viva ] Pregúntale a los niños ] [ La escalera ]