| 
    
    
    
    
     | 
      | 
    
     
    ::..::
    
    BORDADURIA 
     
    En los tiempos de la colonia española se dedicó este arte a adornar los 
    vestidos de los iconos y estatuas de la Iglesia Católica, se usaban hilos de 
    oro y plata, lentejuelas, mostasillos, canutillos, gusanillos y piedras 
    preciosas. 
    Se aprecian 4 estilos diferentes de bordado: 
     
    •Con hilo filosil de oro y plata  
     
    •Con aplicaciones. A base de estambres de lana o algodón matizado.  
     
    •En los bordados aplicados a disfraces para el Huaylash; los chalecos del 
    varón son confeccionadas en tela bramante de color vicuña. Puesta en el 
    bastidor se aplica los hilos de color sobre el dibujo, igualmente en el 
    "pañal" de la falda femenina.  
     
    •Para los altorelieves se usa como base el cartón sobre la tela, con hilos 
    de colores e hilos brillantes.  
     
    
    ::..::
    
    LA PLATERIA 
    
     
     
    El oro y la plata son los metales más dúctiles tanto así, que se pueden 
    hacer hilos del grosor del pelo de la llama, la sierra peruana es rica en 
    yacimientos de estos preciosos metales. 
    Familias de San Jerónimo de Tunán han conservado el arte a través de 
    generaciones. 
    A comienzos de 1900 un arriero, aprendió de su maestro ayacuchano. 
     
    Con el pasar del tiempo han adquirido un estilo muy particular. 
    Particularmente el arte de la filigrana (diseños tejidos de hilo de plata y 
    oro) son muy admirables, también las chapas (plata laminada y cincelada). 
    Una de las razones que ha convertido a San Jerónimo en cuna de plateros han 
    sido la gran demanda de adornos para las imágenes de los santos patronos 
    religiosos de los pueblos que se encuentran en la zona central del Perú. 
    Los devotos suelen agradecer con adornos de oro y plata los milagros 
    concedidos y los colocan en el ropaje de las imágenes, para exhibirlas 
    durante sus procesiones. 
     
    
    ::..::
    
    LOS MATES BURILADOS 
    
     
     
    Arte de los moradores del pueblo de Cochas. 
    Consiste en gravar en bajo relieve con un buril la superficie del mate seco. 
    Fruto: Calabaza (Laegenaria Vulgaris), proveniente de la costa peruana; 
    Chincha y Chiclayo. 
    El buril: Una punta metálica afilada, y una astilla de quinua o eucaliptus 
    encendida son las únicas herramientas del burilador autóctono. 
    Los temas de los gravados expresan las costumbres, paisajes, cuentos, 
    vivencias domésticas, fiestas, crónicas de sucesos históricos y 
    sufrimientos. 
    Los Tamaños: de 5 cm de diámetro hasta 40 cm de díametro. 
    Usadas para guardar especias secas, la sal, la pimienta, etc. 
    Las culturas de la costa peruana han usado estos artículos desde hace mucho 
    tiempo atrás se ha encontrado mates con contenido de alimentos en las 
    excavaciones de Huaca Prieta en Lambayeque y en Huallamarca (Lima). 
     
     
    
    ::..::
    
    ¿Mates en Cochas? 
     
    Cuentan que un arriero del pueblo de Cochas, se convenció de que el mate era 
    un producto muy bueno para comerciar entre ella, las compraba de un 
    proveedor ayacuchano, quien los adornaba con dibujos en las tapas. 
    Se propuso realizar, el mismo los burilados, es así que al rededor del año 
    1800 aproximadamente, empieza a producir mates burilados en Cochas, con el 
    tiempo el arte se ha difundido.  | 
      | 
    
    
        | 
      |