El Arte Floral Japonés ikebana

Desde hace mas de 1400 años, en el oriente, el arreglo floral IKEBANA era practicado por monjes budistas.
Después, ya considerado como arte floral, paso a ser parte de la cultura laica en el Japón.

A mediados del siglo VI ( 574 - 662 ), el Budismo fue introducido en el Japón. Una de las costumbres budistas chinas era la de ofrecer flores al Buda ( Kuge ) en los templos, esto fue fácilmente aceptado por los japoneses ya que de por sí  su usanza era la de ofrecer flores en sus actos religiosos.

La tradición  y  simbolismo de poner arreglos florales en los altares en el Japón  fue la base del arte floral IKEBANA.
Después, se formó la escuela Ikenobo, que actualmente continúa funcionando.

Con el tiempo, a través de los siglos, el concepto IKEBANA a variado desde el haber estado enfocado a ser una tradición meramente ceremonial - religiosa, luego fue dominada por la nobleza y ahora por lo que es hoy un concepto mayoritariamente laico con fines decorativos.

Actualmente, en la mayoría de las escuelas japonesas, la tradición y el simbolismo afortunadamente persisten. La filosofía y conceptos religiosos originales del IKEBANA aún no son olvidados en muchas de ellas.

IKEBANA literalmente significa traer la vida de las plantas y trata de crear un micro mundo floral sencillo parecido a la naturaleza. Ya que está concebido por el deseo natural de la humanidad el de interpretar, enaltecer y capturar a la naturaleza usando la habilidad y la imaginación del artista.

Muchas de las filosofías y religiones orientales coinciden en el sentido de que el hombre y la naturaleza son uno compartiendo el Universo con plantas y animales, y esto no crea conflicto alguno.

El arreglo IKEBANA  para el japonés es una manera de vida, ya que conlleva una tradición espiritual y religiosa. Para ellos, IKEBANA, armoniza las leyes de la naturaleza con la humanidad, filosofía compartida con el Feng Shui.

El uso tradicional de flores frescas naturales, ramas, hojas, agua y otros objetos en algunos de los estilos del IKEBANA, son para simbolizar al Hombre, el Cielo, la Tierra que a la vez representan a humanidad.

En el verano de 1990, en la Ciudad de México, D´LOTO, escuela mexicana de arte floral Ikebana®, abre su taller de arreglos florales línea IKEBANA que fue fundado con la finalidad de mostrar este hermoso arte floral.

A partir de esa fecha, muchos  alumnos tanto niños, mujeres como hombres, ahora realizan, gozan y difunden este famoso trabajo floral que se caracteriza por su armonía,  simplicidad y elegancia.

En el verano de 1999, buscando una ciudad más tranquila, se traslada a la ciudad de Puebla.

El profesorado viene practicando constantemente desde 1984 el arreglo floral japonés línea IKEBANA de la escuela Kado Sanguetsu del Maestro Mokishi Okada.

El ser humano, desde siempre, ha estado maravillado por la presencia y belleza de las flores. Las usa como decoración en su hogar y se deleita así con su presencia.

IKEBANA no es únicamente el arreglo floral, es un arte donde se contempla también la observación y manejo de la fuerza que tiene la flor, una energía que el artista contempla y aprecia pero que no transforma ni destruye; respeta.

Se puede observar en una sencilla flor los fundamentos de la creación, en todos sus aspectos.
Representar también el deseo innato del ser humano de estar siempre en contacto con la naturaleza, todo esto siempre plasmado a través de los arreglos florales IKEBANA.

Al hacer el arreglo floral, o al mirarlo, casi podríamos escuchar a la naturaleza misma, al universo creando todo.

IKEBANA entonces va envolviendo cada vez mas al espectador y al artista en un verdadero éxtasis de elegancia y belleza como si ambos fuesen la flor misma moldeados por el Creador.