pulsar para agrandar fotoCon su nuevo sistema de construcción, logra producir gaitas afines entre sí, gaitas que reúnen las condiciones para sonar conjuntamente. Esta "afinidad" es la que permite el surgimiento de las primeras bandas de gaitas de Asturias, fenómeno que se inicia a principios de los años 80. Una de ellas, liderada por Xuacu Amieva y con instrumentos de Alberto F. Velasco, consigue en 1982 el primer premio del concurso de charangas de Oviedo.

Gracias a su alta calidad musical, estas nuevas gaitas son idóneas para ser utilizadas como instrumentos solistas de alto nivel.

En manos de los grandes maestros gaiteros de finales de los 80 y toda la década de los 90, han conseguido el reconocimiento popular al instrumento, llegando incluso a compartir escenarios con instrumentos sinfónicos, algo que hubiera sido impensable sólo 10 años antes.

Gaiteros de la talla de Javier y José Manuel Tejedor,
Alberto Varillas, Jorge Areces, José Angel Hevia o Flavio Benito, por mencionar algunos de ellos, han subido a escena con gaitas fabricadas por el artesano, cosechando grandes éxitos.