La Planta Maravillosa
PARA QUE SIRVE EL ALOE VERA? COMO SE LA USA?
En el libro The Doctor's Vitamin and Mineral Encyclopedia, el Dr. Sheldon Saul Hendler nos informa que el Extracto y el Gel de Aloe Vera demuestran tener propiedades bactericidas y fungicidas; es decir, que matan bacterias y hongos y levaduras, demostrando ser muy eficaces en contra de un amplio surtido de toda clase de microbios. Menciona, como ejemplo, que la carrisina, que se extrae del Aloe, ofrece propiedades anti-virales tan eficaces que en el laboratorio se logró inhibir el desarrollo del herpes, del sarampión, y del virus del SIDA. Y siguen con estos estudios en contra del SIDA.
"Hay varias maneras de las cuales pueda el Aloe prestar servicios terapéuticos," dice el Dr. Hendler, "pues contiene salicilatos que además de ser desinflamantes son analgésicos," para calmar, descongestionar y aliviar el dolor. Explica que una de las enzimas del Aloe, inhibe el efecto de una sustancia llamada bradiquinina, culpable del dolor en los tejidos inflamados.
Menciona haberse enterado de pacientes de SIDA que regularmente beben el jugo de Aloe, y sugiere que sería indicado llevar a cabo algún estudio profesional sobre este tema. Evidentemente no sabría del estudio que llevan a cabo desde hace algunos años un grupo de médicos investigadores en Dallas, ciudad del estado de Texas, EE.UU. Este grupo publicó sorprendentes resultados en el tratamiento del cáncer y del SIDA, con jugo de Aloe Vera. Mencionan entre otros, el caso de un paciente ya desahuciado por sus médicos de cabecera, quien padecía del SIDA con la complicación de 17 tumores cancerosos en el hígado. Le habían dado la triste perspectiva, al darlo de baja, de apenas unos días de vida, cuando acudió al grupo mencionado. Estos médicos lo pusieron de inmediato bajo régimen alimenticio basado en buena nutrición reforzado con fuertes dosis de jugo de Aloe Vera. En cuestión de semanas se alivió de los síntomas del SIDA, recobró fuerzas, y poco tiempo después ya no se veía con el microscopio vestigio alguno del SIDA. Y, para gran sorpresa de los médicos, los tumores del hígado fueron reduciéndose en tamaño hasta desaparecer totalmente. En un vídeo, que publicaron unos tres años más tarde, se ve al joven ex-paciente fuerte y animado, disfrutando con aparente entusiasmo el gozo de haber recobrado su salud. Y no es éste el único caso que se menciona. Hubo muchos que se curaron del SIDA para seguir sus vidas normales; mientras que no faltaron los tristes casos de pacientes a quienes habían curado con el jugo del Aloe Vera pero que desafortunadamente se volvieron a auto-infectar con agujas hipodérmicas contaminadas, por falta de precauciones higiénicas sexuales, o mediante otras imprudencias fuera del control de la ciencia médica.
Otro grupo de enfermos que ha recibido gran alivio y mejoría tomando jugo de Aloe es el de los diabéticos. No hay dos casos iguales, pero si bien algunos se han recuperado a tal grado que ya no necesitan inyecciones de insulina; otros no tienen tan buena suerte, y necesitan continuar recibiendo insulina, aunque en cantidades reducidas. Unicamente quienes padecen este mal, o sus amigos y familiares más allegados, pueden apreciar qué significa el poder eliminar o reducir la dependencia de las repetidas inyecciones diarias de insulina. Parecería mentira que se pueden aliviar tomando uno o dos vasos de jugo de Aloe diarios.
Sin embargo ha habido muchas otras curaciones "milagrosas" cuyas anécdotas dan tema de, en ocasiones, agitadas discusiones entre aquellos que proponen únicamente tratamientos médicos tradicionales, y quienes aceptan alivio de cualquier fuente. Hemos sabido de individuos con cáncer ya sin esperanza, como el de un camionero en la zona de Denver, en el estado de Colorado, EE.UU. a quien los médicos le dijeron que pusiera sus asuntos en orden, porque no viviría más de cuatro a seis semanas. Un amigo le sugirió que tomara jugo de Aloe Vera, en cantidades de un litro por día. "Qué puedo perder?" Y fue así como empezó con medio litro diariamente durante la primera semana, siguiendo con un litro y más todos los días.
Pasaron las semanas y el paciente iba aumentando de peso, pues de un peso normal de 92 kg. había llegado a pesar apenas 53 kg. Podía comer, y retener los alimentos. Se le fueron calmando los dolores de vientre, y con el pasar de los meses no se murió, si no que por el contrario fue mejorando de salud y recuperando sus fuerzas y musculatura. Un año y medio después de empezar a tomar Aloe Vera se había restablecido, y estaba de nuevo en su trabajo manejando su camión de carga. Diez años más tarde seguía con buena salud, e infaliblemente bebiendo sus dos vasos de Aloe todos los días. Si bien la anécdota de un caso, o de cien casos, no constituyen evidencia médica científica, si hay evidencia de la seguridad de este jugo, que no hace daño alguno, y como dijera el camionero de Colorado, "...qué puedo perder?"
Página anterior
Diseño: Delbert Chupp
Health Products
Aloe Vera Products