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EL ÚLTIMO LADRIDO

 
             
       

A pesar de estar cerrada hace tres meses, la perrera del cerro Merced continúa acogiendo a los perros y gatos que ahí llegan ( ya sea porque los dejan o por el propio instinto). Los vecinos alegan al municipio por los malos olores y pésimas condiciones de vida.



De los recursos que priorizó el Consejo Regional de Valparaíso (CORE) hace más de dos años, provenientes de las platas BID para enfrentar esta situación, aún no se gasta ni un solo peso, tanto en el retiro como en la esterilización o en el control de otras plagas urbanas.

La secretaría regional ministerial de Bienes Nacionales desde el momento que recibió la inquietud de la Sociedad Protectora de Valparaíso y del CORE, comenzó la búsqueda de terrenos públicos para recibir los perros vagos que la Protectora mantiene en sus recintos y que deberán desalojar en los próximos meses por una resolución del ministerio de Salud.

Protectora de animales de Valparaíso, se encuentra cerrada hace casi tres meses, debido a no encontrar solución al hacinamiento de animales, tanto como perros y gatos y al no poseer la ayuda necesaria en cuanto a alimentos, medicamentos y herramientas necesarias como para poder atender a los animales enfermos.

Además de las otras problemáticas que han tenido durante años por su mala ubicación y pequeño espacio para tener a tantos animales, ya que el gobierno aun tramita un terreno digno para estos animales sin hogar, además de darles uno a aquellos que viven en las calles de esta ciudad porteña.

               
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