Aperitivo de una campaña distinta

sábado, 14 de agosto de 1999

Por Sandra D. Rodríguez Cotto

El Nuevo Día

FUE UN almuerzo matizado por la armonía y el sentido del humor.

La llamada "reunión histórica" de este viernes entre los candidatos a la gobernación, Sila María Calderón y Carlos Ignacio Pesquera, transcurrió desde el principio en un ambiente de camaradería y amistad, donde el diálogo de altura fue la constante.

Si esto es un preámbulo de lo que viene, es como para celebrarlo porque por primera vez en más de dos décadas Puerto Rico verá una campaña electoral de altura, seria y de mucho respeto, según prometieron Pesquera y Calderón.

"Carlos y yo hemos acordado el tipo de campaña que ambos queremos llevar. El tono de respeto y el enfoque en los 'issues' y visiones que queremos mantener. Hemos hablado también de agendas grandes que van más allá del partidismo, como el tema de Vieques y de los presos políticos", dijo Calderón, presidenta y candidata a la gobernación por el Partido Popular Democrático.

El presidente y candidato a la gobernación del Partido Nuevo Progresista, Carlos Pesquera, agradeció a Calderón el haber aceptado su invitación y dijo que la reunión servirá de ejemplo del tipo de campaña que tendrán ambos contendientes.

"Yo, de mi parte, sigo con el compromiso, y estoy seguro que Sila también, de que tendremos una campaña enfocada en los asuntos importantes de nuestro país. Que el elector tenga, finalmente, propuestas de cada candidato, que tenga cuál es su plataforma y cómo la va a defender", dijo Pesquera.

Sobre los ataques personales, típicos en las contiendas electorales, Calderón dijo que se comprometieron a evitarlos porque "esa es la política tradicional, que el pueblo está repudiando".

Pesquera dijo que estaba seguro que el tono de su campaña será de altura, "pero tenemos que reconocer que los dos buscamos la misma posición. Por lo tanto, tenemos que trabajar juntos para mantener el consenso".

Todo el mundo llegó y salió contento del restaurante La Casita Blanca, de la calle Tapia, en el sector Villa Palmeras de Santurce. Desde horas de la mañana, los ayudantes de ambos candidatos -Jorge Orama del PPD y Lourdes Pérez del PNP- trabajaron en conjunto para que la actividad no tuviera contratiempos.

Los candidatos llegaron caminando juntos al restaurante y se confundieron entre los aplausos y gritos del público. Una vez llegaron al local, se sentaron a almorzar.

Entre patitas y piñon

Pesquera comió patitas de cerdo, carne sesina, arroz con habichuelas y varios postres. Calderón comió piñón, arroz blanco, aguacate, tasajo "y me comí un coco completito". La cuenta fue de $27 y la asumió Pesquera.

Hubo varios momentos jocosos en la conferencia de prensa posterior, como cuando ambos dijeron que iban a ganar y después cuando se intercambiaron teléfonos.

"Yo le di mis teléfonos en una tarjetita y Sila me los dio en una servilleta", dijo Pesquera entre risas. Agregó que la idea de intercambiar números es para mantener contacto directo en el transcurso de la campaña.

Parecía que los candidatos se pusieron de acuerdo hasta en la ropa. Calderón vistió un llamativo conjunto de mahón amarillo con canutillos. Pesquera vistió pantalones color kaki y una camisa en tono parecido, con chaqueta azul y una corbata de tonos azul y amarillo.

El líder penepé le obsequió a la alcaldesa de San Juan una copia de su libro favorito, "A path between two seas", del autor David McCullough, que trata sobre la infraestructura.

Brindaron con "Maviasa", la bebida del restaurante, que en cinco ocasiones ha ganado el premio "Tenedor de Oro" que otorga El Nuevo Día a los mejores centros gastronómicos de Puerto Rico.

Al concluir el almuerzo, que duró más de una hora, Pesquera comenzó la rueda de prensa entregando un regalo "en nombre de Sila y mío" al dueño del restaurante, Jesús Pérez, "por los inconvenientes".

Presos, Vieques y otros temas

"Sobre Vieques y los presos políticos, acordamos que nosotros queremos representar ese consenso del pueblo y no lacerar ese consenso entrando en diferencias sobre esos temas", dijo Calderón.

Los temas de la corrupción y el status político de Puerto Rico se discutieron someramente, dijeron ambos.

Además de los temas políticos y del tipo de campaña que ambos buscan, hablaron de sus vidas privadas.

"Hemos hablado de nuestras vidas, de nuestros padres, de cómo crecimos, de cómo conocimos a nuestros cónyuges... Somos casi 'panas'. Nos conocemos mucho mejor ahora", dijo Calderón.

Pesquera dijo que confía en que la campaña se beneficie del ambiente que se estableció este viernes. "El pueblo va a ser el juez si esta actividad rindió frutos o no", dijo.

Una buena impresión

"Carlos Pesquera es un hombre recto, caballeroso, amable, educado, amigable y que hemos tenido un almuerzo muy agradable, que para mí fue un placer estar compartiendo con él", dijo Calderón cuando se le preguntó su impresión sobre su contendiente político.

Pesquera dijo que "Sila es toda una dama. Estuve reunido con ella por un tiempo amplio y la opinión que tenía sobre ella se confirma, tuvimos la oportunidad de conocernos. Me gustó su sinceridad".

Tal y como adelantó a El Nuevo Día el jueves, Pesquera anunció que el presidente del Partido Independentista Puertorriqueño, Rubén Berríos, sugirió una reunión entre los tres candidatos a la gobernación.

"El (Berríos) sugirió que fuéramos a comer mondongo de tres cuartos en Bayamón. Yo con gusto acepté y se lo dije a Sila", dijo el ingeniero Pesquera. Calderón también aceptó "y la tercera invitación es mía para los dos caballeros. Será una reunión en donde yo invitaré y que irá por mi cuenta".