Por tu recuerdo
hoy baila la tristeza,
un vals tierno y amargo
como mi corazón...

Quedó colgada
tu risa en el silencio,
como una telaraña
suspendida en el desván...

Y la mesita
mira hacia nuestra cama
donde jugamos
a amarnos siempre más...

Qué extraña fantasía
me llega desde lejos,
como si me llamaras
y el tiempo dijo no...

Surge la melodía
cuando nadie la espera.
Como la primavera
surge en el alma un día...

Liberarás al piano
tu eterna fantasía.
Sabiendo que eres mía,
te llama lo lejano...

Del eco de tu mano
brotarán las estrellas.
¡Qué melodía tan bella
te llevarás al piano!...

Yo siento lo lejano
aunque estás a mi lado.
Estoy enamorado
del cielo de tu piano...

¡Qué extraña melodía
ya siento de tu piano!
Me lleva de la mano,
me llena de poesía...

Allí me invitan a bailar.
Con mis zapatos de Charol.
Le hice un gesto y qué emoción...
Ella era un hada de cristal.

Creció la noche en el lugar.
Bebí mi cuota de licor.
Cayó la lluvia, amaneció.
voló una noche en libertad...

La bailarina de cristal
con su dorado corazón
cesó un instante de bailar,
y creo que se despidió...

Quise comprar en su cristal
una esperanza, en el reloj,
más vino un hombre y lo llevó,
dejando mi alma en soledad...

La noche cae una vez más
y he prometido no beber.
El mundo qué pequeño es,
cabe en su caja de cristal...