FELICIDAD

Te llama la razón, das a la vida
Un norte o una estrella
Que alumbra la esperanza donde anida,
Pero que mata o mella,
La paz que goza el alma a ti, rendida.

Te busca el corazón y eres en suma
La sombra de la nada,
Fugaz estela, pelotón de bruma,
Una línea quebrada,
Un espejismo, un ánfora, de espuma,

Un rayo roto en el cristal del río,
Espejo tentador
Donde se mira siempre el desvarío
En un sueño de amor
Y se encuentra las manos del vacío.

Todos gimen por ti, eres venero
De sed que al vicio invita;
Por ti se afana tanto el usurero;
El lascivo por ti se precipita
Y el ladrón busca el rostro del dinero.

Te encumbran como enseña soberana,
Ideal fascinante
Y sólo eres delirio, ficción vana,
Quimera obsesionante
Sin ayer y sin hoy y sin, mañana.

Todos te buscan en tenaz porfía,
Todos quieren lo mismo:
Un goce, un sueño, un ansia, una alegría
Y, a todos, el abismo
De tu nada, el alma les vacía.

Sólo quien cubre el cuerpo del hermano
Sin pensar en su suerte,
Siente al final, la seda de tu mano,
Transpasada la muerte,
Como corona del obrar humano.