Sitio de José Martí. Marti estudiante

CONFERENCIA SOBRE JOSÉ JULIÁN MARTÍ PÉREZ EN SU ETAPA DE ESTUDIANTE, IMPARTIDA POR EL AUTOR EN TENIDA BLANCA CELEBRADA EN LA RESPETABLE LOGIA "LUZ DE ARIGUANABO", SAN ANTONIO DE LOS BAÑOS, LA HABANA, CUBA.

Venerable Maestro
Hermanos y hermanas
Distinguidos invitados

El venerable maestro me ha encomendado hacer uso de la palabra en ocasión del homenaje que rendimos hoy a nuestro José Martí.

Hacer referencia a la vida y obra de nuestro apóstol no resulta fácil por lo intensa y profunda que fue la de este venerable hermano, masón y capitular. Más aún cuando el que les habla no es historiador y mucho menos conferencista, sino maestro de profesión, y es por ello que me referiré brevemente a nuestro Héroe Nacional en relación con algunos hechos que en la adolescencia, influyeron en la formación de su personalidad.

José Martí Pérez nació en La Habana, el 28 de enero de 1853, siendo sus padres Don Mariano Martí y Navarro, valenciano y doña Leonor Pérez Cabrera, canaria.

A los 4 años de nacido, en 1857, es llevado por sus padres a la ciudad de Valencia donde permanece hasta mediados de 1869; es probablemente en esta ciudad donde aprende sus primeras letras.

En 1859, contando con seis años de edad, regresa a La Habana y comienza a asistir a una escuelita de barrio y 1860, con siete años de edad comienza a estudiar en el Colegio San Anacleto, donde conoce a su gran amigo Fermín Valdés Domínguez.

Ingresó en la Escuela de Instrucción Primaria Superior Municipal de Varones en marzo de 1805, con 12 años de edad. En el mismo edificio de la escuela se encontraba la vivienda de su director, el gran maestro Rafael María de Mendive, quien ejerciese una gran influencia en la formación de Martí.

El primer año de bachillerato. Curso 1866-67.

En agosto de 1866 contando Martí con 13 años, el maestro Mendive solicita al director del Instituto de segunda Enseñanza de La Habana que señalara el día en que el alumno José Martí realizaría el examen de admisión. El maestro Mendive, luego de obtenido el consentimiento de don Mariano, se había comprometido a costearle los estudios hasta el grado de bachiller.

Martí aprobó el examen de ingreso en septiembre y matriculó en octubre, las asignaturas del primer año de bachillerato: Gramática castellana y Gramática latina, Doctrina cristiana e Historia Sagrada, Principios y ejercicios de Aritmética.

Intenta traducir del inglés la obra Hamlet, de William Shakespeare, pero la abandona en determinado pasaje y toma “A Mistery” de Lord Byron.

Por ésta época ya siente una gran afición por el teatro. Presta algunos servicios a un peluquero relacionado con los actores y se le permite disfrutar de presentaciones, aunque situado tras bambalinas.

En junio de 1867 tenía Martí 14 años y se presentó a los exámenes del curso 1866-67 alcanzando la calificación de sobresaliente en Aritmética, aprobó la asignatura Doctrina Cristiana e Historia Sagrada, recibió la máxima calificación en Gramática castellana y también la máxima puntuación en Gramática latina y no solo esto sino que ganó los exámenes de premio o concursos, como diríamos hoy, en Aritmética, Gramática latina y Gramática castellana.

El segundo año de bachillerato. Curso 1867-68

En septiembre de 1868 matriculó las asignaturas del segundo año de bachillerato en el colegio San Pablo, fundado y dirigido por el Maestro Rafael María de Mendive. Esta escuela radicó en la misma dirección que la Primaria Superior Municipal y quedó incorporada al Instituto de Segunda enseñanza de La Habana, donde había cursado el primer año. Desde el inicio del curso ayudó a Mendive en las tareas administrativas de la escuela.

En segundo año cursó las asignaturas de Geometría, Geografía descriptiva, Gramática castellana y Gramática latina. En los exámenes alcanzó la calificación de sobresaliente en Geometría y el máximo de puntos en las asignaturas restantes.

Es de destacar que en abril de 1868 hace su poema “A Micaela”, que dedica a la esposa de Mendive con motivo del fallecimiento de su pequeño hijo Miguel Ángel, poema que fue publicado en el periódico “El Álbum”.

Al iniciarse el curso 1868-69 Martí tenía 15 años e iniciaba el tercer año del bachillerato. Este año tuvo gran significado para su vida, ya que los acontecimientos en el país tienen sobre este curso una notable incidencia.

Fue precisamente el 10 de octubre de 1868 que Carlos Manuel de Céspedes, el Padre de la Patria, iniciara la Guerra de los Diez Años. Este trascendental hecho hace que Martí componga su soneto titulado ¡10 de octubre!

“No es un sueño, es verdad: grito de guerra
Lanza el cubano pueblo, enfurecido
El pueblo que tres siglos ha sufrido
Cuanto de negro la opresión encierra
Del ancho Cauto a la Escambraica sierra,
Ruge el cañón y al bélico estampido
El bárbaro opresor, estremecido,
Gime, solloza y tímido se aterra
De su fuerza y heroica valentía
Tumbas los campos son, y su grandeza
Degrada y mancha horrible cobardía
Gracias a Dios que ¡al fin con entereza!
Rompe Cuba el dogal que la oprimía
Y altiva y libre yergue su cabeza

Es en este ambiente revolucionario que su poema dramático “Abdala” aparece en el periódico “La Patria Libre”, del que se publicó un solo número.

El 28 de enero de 1869, el mismo día que Martí cumplía 16 años, es detenido Rafael María de Mendive, su maestro y director del Colegio San Pablo, donde cursaba el bachillerato. El maestro Mendive fue acusado de sospechas de vinculación con los sucesos del teatro Villanueva, donde se había dado vivas a la independencia y se había producido un tiroteo por varias escuadras de voluntarios.

Mendive fue conducido a la cárcel a donde su alumno acudió a visitarlo frecuentemente.

Fue entones que el Colegio San Carlos fue clausurado por las autoridades coloniales y que Martí comienza a trabajar en una oficina como “dependiente de diligencias”, por lo cual recibe una modesta retribución que entrega a su padre.

El maestro Mendive fue condenado a la pena de cuatro años de confinamiento fuera de la isla. Luego logra escapar de España hacia Francia, para dirigirse a Nueva York.

Otro grave incidente se produce. Una escuadra de voluntarios pasa frente a la casa de Fermín Valdés Domínguez, amigo de Martí y provoca un incidente alegando que se han burlado de ellos los jóvenes que se hallaban en la vivienda. En horas de la noche los uniformados irrumpen en el lugar y detienen a los hermanos Fermín y Eusebio, a quienes condicen al vivac, a donde llevan mas tarde a otros tres jóvenes que reencontraban esa tarde de visita en la casa. Todos fueron acusados de haber cometido faltas contra una fuerza armada de voluntarios del Batallón Ligeros, y sospecharse que son adictos a la insurrección.

El 4 de marzo de 1870 ya cuenta con 17 años, es juzgado por un consejo de guerra y condenado a seis años de prisión. Le cortaron el cabello, lo vistieron de presidiario y lo encadenaron por la cintura, le fijaron al tobillo de la pierna derecha un grillete.

Fue destinado a trabajar en las canteras de San Lázaro a donde era conducido diariamente y obligado a trabajar duramente bajo el sol y durante 12 horas.

En el mes de agosto, es decir 5 meses después se encontraba enfermo y con los ojos afectados por la cal; gracias a las gestiones realizadas por sus padres lo destinan a la cigarrería del penal y luego lo trasladan a La Cabaña.

En el mes de septiembre el Capitán General conmuta su pena por la de ser relegado a Isla de Pinos y posteriormente, escuchada la súplica de su madre, se le autoriza a marchar a España, donde podría continuar sus estudios, y hacia la cual parte el 12 de enero de 1871.

Sírvanos a todos el ejemplo de Martí. Ha quedado para la historia una fotografía donde aparece de pie, con el grillete, con una dedicatoria suya dirigida a su madre y que por su fuerza emotiva he seleccionado para concluir este resumen:

“Mírame madre y por tu amor no llores:
si esclavo de mi edad y mis doctrinas
Tu mártir corazón llené de espinas
Piensa que nacen entre espinas flores”

Casa natal en la calle de Paula, hoy Leonor Pérez