| Preparando el lugar
Antes de iniciar cualquier terapia de armonización es importante
prestar atención al cuidado y la ambientación del lugar donde se dará la sesión. Si se
desea se puede perfumar el ambiente con sahumerio de aroma agradable u hornillos con
escencias aromáticas. El lugar debe estar ordenado y limpio y es recomendable poner
música suave de fondo para tapar los posibles ruidos que puedan venir del exterior.
La Sesión
Una sesión reflexológica dura aproximadamente una hora. El
paciente se acuesta comodamente en una camilla con los pies descalzos. Se comienza
colocando aceites en las plantas de los pies para que las manos puedan recorrerlos
facilmente durante los masajes. En general en la primera sesión se realiza un primer
reconocimiento a manera de diagnóstico en cada uno de los pies. Es a través de este
diagnóstico, propio de la Reflexología, que se pueden advertir los desequilibrios y
disfunciones de los organos y sistemas del cuerpo. Este diagnóstico es muy importante ya
que ayuda al reflexólogo a saber cual o cuales son los organos que están funcionando mal
y por ende necesitan mayor atención.
Si bien el paciente antes de comenzar suele decir cual es el
problema que lo trae a la sesión el diagnóstico suele confirmar aquéllo dicho por el
consultante. Otras veces suelen aparecer sintomas o disfunciones que ni el paciente sabía
que tenia y que luego de un análisis clínico queda confirmado aquello visto en el
diagnóstico reflexológico.
Una vez hecho el diagnóstico se comienza con la sesión
terapéutica a través de masajes, manipulaciones y presiones de los distintos puntos
reflejos. Durante la sesión se estimulan todos los puntos reflejos prestando mayor
atención a las zonas del cuerpo más afectadas.
Primeros beneficios
Ya desde la primera sesión muchas personas logran un profundo
estado de relajación y bienestar. Muchas personas sienten calor en ciertas zonas del
cuerpo y otras simplemente se quedan dormidas. La Reflexología es excelente para calmar
dolores físicos, restablecer el flujo energético y restablecer el equilibrio perdido.
Se debe advertir al paciente que durante los primeros días
después del tratamiento es posible sentir malestares físicos e incluso se puede
resfriar. Esto es normal ya que luego de la sesión el cuerpo comienza a eliminar las
toxinas y a limpiarse de todo lo que no sirve. Este proceso de limpieza significa que el
cuerpo está respondiendo al tratamiento y hay que dejarlo que encuentre su equilibrio.
¿Cuanto dura un Tratamiento?
No se pueden dar tiempos precisos ya que cada persona es un ser
individual que responde de manera particular al tratamiento por lo que cada persona
necesitará mayor o menor cantidad de sesiones para lograr la recuperación física y
energética.
En líneas generales un tratamiento termina cuando el problema o
desequilibrio que trajo al paciente al consultorio desaparece y el organo o sistema
funciona correctamente. En ese caso el equilibrio ha sido recuperado y si el paciente
desea puede dejar de recibir sesiones reflexológicas. De todos modos es recomendable por
lo menos una vez cada quince días tomar una sesión para mantener el equilibrio logrado y
prevenir posibles desarmonías futuras.
Es importante tener en cuenta que la Reflexología es excelente
como terapia de prevención ayudando al cuerpo a mantener las defensas altas y el
organismo equilibrado. Tomar sesiones reflexológicas periodicamente entre otras cosas
ayuda a eliminar el estrés que se suele sufrir en las grandes ciudades eliminando los
efectos que esta patología produce.
Gabriel Maggio |
