La regulación (u ordenación) forestal debe entenderse como un proceso de planificación a nivel predial o regional en el cual el bosque, que es considerado en su totalidad, alcanza una condición de rendimiento sostenido en cantidad y calidad, no referida exclusivamente a producción de madera.

El paso de un bosque no regulado a esta situación ideal es conocido como período de conversión y puede ser optimizado a través del uso de modelos matemáticos que indiquen el patrón o esquema de cosechas más adecuado según los objetivos planteados.

En los problemas de manejo forestal se utiliza a menudo uno de los siguientes objetivos primarios: (1) maximizar el volumen físico de cosecha maderera, o (2) maximizar el valor presente neto del bosque. El primero se usa cuando el bosque es el principal abastecedor de trozas para una planta de procesamiento, mientras que la maximización del VPN es más general y trata al bosque como una empresa o centro productor de beneficio individual.

Se reconocen 3 orígenes generales para las restricciones de manejo forestal: (1) restricciones de recursos disponibles, (2) restricciones por metas del tomador de decisiones y (3) restricciones de política y regulación (debidas a influencias externas impuestas al tomador de decisiones). Por otra parte, las restricciones pueden hacer referencia a: superficie cosechada, superficie regenerada, volumen cosechado y flujo de caja generado.

Contenidos:
• Portada
• Modelos matemáticos empleados
• Computarización de los modelos
• Matices y extensiones
  de los modelos
• Literatura recomendada