ADENTRO

 

Comidas
Todo un hecho cultural, reiterado con periodicidad alarmante

Recitales
Música y demás para los pocos que cabemos

Campeonatos
Se reflotan los certámenes a cara'e perro

Novedades
Hay que mirar aquí para ver lo nuevo

 

Concursos
Nuestros concursos de cantores aficionados congregan multitudes desconcertadas

Plato del día

viernes 22 de noviembre de 2002

Lasañas cuatro elementos

Hace pocas décadas, en la Roma pre unionista, un joven diletante olvidó el vocablo italiano equivalente a "rellenas" y se la pasó comiendo unos fideos grandotes, chatos y rectangulares, con aceite de oliva y nada más.
A modo de compensación tardía, las lasañas que serviremos mañana viernes 22 a las 21.30, tendrán tantos rellenos que difícilmente conserven la vertical.
Llevándole la contra a una estúpida época de vacas flaquísimas, a despecho de tantas miserias múltiples, estamos atareados pergeñando este finísimo plato de la cocina gargantuásica -pre pantagruélica- conocido como lasañas de los cuatro elementos, en cuya composición intervienen factores de la tierra, del agua y del aire. El fuego, claro está, cocina, pero no se come (los tragafuegos, en rigor, solamente lo escupen groseramente).
Comprobará el audaz dispuesto a invertir seis pesos en su formación cultural y física, que el plato se compone de varios pisos complementarios, separados por las lasañas en sí, a modo de losas comestibles, que serán de variadas composiciones y colores.
Habrá estratos vegetales, marinos, lácteos, volátiles, sustanciosos, virtuales y reales; unos aportarán sabor y aroma, otros consistencia y equilibrio; se hallarán algunos sin sentido aparente, son los que hacen al todo con sutileza sólo detectable por sensibilidades mayúsculas.
Sencillas salsas alternadas aportarán a una gestalt compleja y única de saludable asimilación y grato recuerdo, que no convendrá desmembrar en sus partes compositivas en aras del buen gusto, dicho sea en todo sentido. Si algún comedido suspicaz quisiera presupuestar el gasto analizando insumos y tiempos de preparación, encontrará que tamaño manjar resulta un regalo, aún comiendo una sola porción, pese a que las repeticiones no suman aquí los viernes, como es consuetudinario.
Pues bien, suspicaces, revisad a gusto -haced vuestra porquería revisatoria- y comprobad que si coméis dos, son dos regalos.
Y así de seguido.

Resumiendo: lasañas a lo bestia, para finas individualidades.
Una propuesta mafiosa, de esas que no se pueden rechazar

Quien haya bien interpretado esta oportunidad singular apta para la cartera de la dama y el bolsillo del caballero, podrá reservar plaza telefónicamente (4431-4626, dejando un número para confirmación) o por esta novísima vía emílica
Osperamos, inefables contertulios
Siempre es tarde para arrepentirse

Anda por aquí
[Principal] [Tango] [Truco] [Comidas] [Novedades] [Canciones] [Correo]

Mensajes a tyt@groisman.ba.ar

21/11/02 23:59, último cambio