7:15 WEB DIARIO

SABADO 7 de Junio. Playa de Lariño. Carnota. Galería 3.

Segundo sábado en la playa de Lariño, Carnota. Trabajamos otra vez en las rocas de la parte superior de la playa, en el mismo punto del sábado anterior. Estaba en el mismo estado como podéis comprobar en la Galería 3. Se echaba de menos la presencia de más voluntarios y esto es bastante preocupante porque desde las elecciones cada día vienen menos. Teniendo en cuenta que sigue habiendo mucho trabajo que hacer habría que pedir mas ayuda y que vengan más voluntarios. Galería 3.

Volver Arriba

JUEVES 5 de Junio. Playa de Basoñas. Porto do Son. Galería 5.

Un día mas en Porto do Son. De nuevo en la playa de Basoñas. En grupos de tres continuamos con la labor que habíamos comenzado el jueves anterior. Uno manejando la pala y dos cribando arena con los tamices. No trabajamos con muchos ánimos por culpa de la noticia que tuvimos a comienzos de esa semana de que la semana siguiente ya no habría salidas de los voluntarios de Vigo. Es decir, que este era nuestro ultimo jueves al menos por el momento. La verdad es que nos lo veíamos venir, tras las elecciones, el 1 de Junio y la llegada del verano y con el la temporada de turismo. Así que nos tomamos nuestro ultimo jueves juntos con un poco mas de relax que lo normal. El trabajo era el mismo, cribar la arena de las dunas para retirar los granitos de fuel y restos en general esparcidos por todas partes, algunos mas complicados de retirar por estar pegados a las plantas, a las raíces, etc. Al final, haciendo un recorrido por la orilla, encontramos una zona de rocas blanquísimas como la fachada de un edificio. Era la zona de trabajo de Tragsa. Ahora no estaban allí, pero se notaba el paso de las maquinas hidrolimpiadoras por la zona. Aquellas rocas parecían totalmente estériles. En algunos puntos había piedras cubiertas de petróleo. Habían sido puestas del revés. Podéis verlas en la galería de fotos correspondiente. La verdad es que nosotros los voluntarios podríamos hacer un buen trabajo en esas rocas porque se veía que debajo había chapapote que las maquinas no retiraron, y con palancas podríamos mover las piedras y sacarlo, pero Tragsa no quiere que trabajemos allí, prefieren enviarnos a las dunas a cribar arena, para que nos desesperemos. Galería 5.

Volver Arriba

SABADO 31 de Mayo. Playa de Lariño. Carnota. Galería 2.

Al Sur de Carnota hay un lugar llamado Lariño, con un faro y en frente una pequeña playa con el mismo nombre. Allí un coordinador voluntario alemán nos recibió y le agradecemos muchísimo lo bien que nos cuido. La playa comienza según se llega con una franja de piedras de todos los tamaños que se extiende a lo largo de la playa. Esas piedras estaban ligeramente manchadas de fuel-oil del Prestige por encima, pero al levantarlas, o al desplazarlas unas de las otras encontramos muchos pegotes de fuel espeso y puro, que con el calor de Mayo aun se derrite mas. Estaba también rodeado y mezclado con arena. Hubo que trabajar mucho, con mascarilla porque olía muy fuerte, gafas por si salpicaba a los ojos, y espátulas para retirarlo. Muchas piedras que por encima parecían "esplendorosamente" limpias tenían mucho chapapote pegado debajo, en su base. Estuvimos 4 personas metidas en un hueco de poco mas de un metro cuadrado y no nos pudimos mover en toda la jornada de tanto trabajo como había. Hubo que usar también palancas o barras de hierro para levantar algunas piedras o rocas mas grandes. Es una prueba de que casi siete meses después del hundimiento del Prestige y tan solo un día antes del proclamado 1 de Junio, la Costa Gallega aun no esta limpia al cien por cien. El fuel que había en Lariño era apestoso, fresco, puro y muy toxico. No me quiero olvidar de la maravillosa gente de Lira y Carnota que nos siguen recibiendo tan bien y cocinando gratis para todos los voluntarios. Galería 2.

Volver Arriba

JUEVES 29 de Mayo. Playa de Basoñas. Porto do Son.

Este día vinieron muchos menos voluntarios, presumiblemente debido al desencanto por los resultados de las elecciones municipales a nivel estatal del domingo 25 de Mayo. Se trabajo en las dunas, en grupos de tres, uno echando arena con la pala en los tamices y los otros dos cribando esa arena. Cada grupo lleno entre un capazo y medio y dos al final de la jornada, sobre las tres y media de la tarde. Lo que se recogía eran granitos, lentejas y galletas pequeñas de fuel. No cavamos demasiado, solo hasta encontrar arena húmeda, a unos 20 o 30 centímetros de la superficie.

Volver Arriba

SABADO 24 de Mayo. Calas de Serreseco. Carnota.

Este día los voluntarios se dividieron en dos grupos. Uno de ellos fue a una cala en Serreseco, Carnota, a trabajar con piedras pequeñas teñidas de petróleo. El trabajo consistió en raspar el petróleo de las piedras con espátulas lo máximo posible y luego echar las piedras mas abajo, hacia la orilla para que el propio agua del mar las terminase de limpiar. El mal tiempo se cebo de los voluntarios con lluvia e incluso granizo.

Volver Arriba

JUEVES 22 de Mayo. Playa de "O Rostro". Finisterre. Galería 4.

Nuestro regreso a Finisterre este día confirmó una vez mas que sigue llegando mucho fuel a la Costa da Morte y sobretodo que la bahía de la playa de "O Rostro" tiene cantidad de fuel estancado en sus fondos y que cada día sube y baja con la marea y llega a la orilla cuando la marea baja. Son galletas de todos los tamaños, algunas mas grandes que una mano adulta. Mas de seis meses después se sigue repitiendo la misma situación cada día. Al acceder a la playa por las dunas ya se notaba el olor acido del chapapote en el aire, por todas partes. Además sigue habiendo un gran bulto en el centro de la playa donde yace esa gran capa de fuel denso y pesado que se poso ahí al principio y suelta restos en forma de gallletas y masa desgajada que nadan libremente cerca de la orilla. Ese día trabajamos recogiendo galletas desde que llegamos. Nos quedamos por donde estaban los de Tragsa, por el centro de la playa pero mas al Norte que al Sur. No pudimos cavar por falta de herramienta, no nos dieron palas, pero nos hubiera gustado cavar y encontrar otra vez aquella placa que encontramos en sábado 3 de mayo y que tuvimos que abandonar porque la marea ya estaba subiendo. Sabemos que sigue allí porque de vez en cuando salen en televisión los militares cavando allí. Por cierto, por fin vimos una maquina cribadora tamizando la arena y retirando esas pequeñas partículas de petróleo que tanto nos fastidian cuando nos hacen ir a un lugar para retirarlas, como ha pasado en esa playa varias veces. Galería 4.

Volver Arriba

SABADO 17 de Mayo. Playa de Razo. Caión.

Este dia los voluntarios trabajaron en la Playa de Roza cavando en la arena y encontraron una capa de petroleo fina bastante seca.

Volver Arriba

JUEVES 15 de Mayo. Playa de "As Furnas". Porto do Son. Galería 5.

A pesar de que este día íbamos con cierta desconfianza porque hacía mucho tiempo que no nos llamaban de Ribeira y nos temíamos que nos hiciesen ir allí para nada como en Laxe, todo salio muy bien e incluso mejor de lo habitual. Es mas, hasta los trabajadores de Tragsa que nos recibieron en la playa fueron amabilísimos con todos nosotros, sobretodo el que llamábamos el "orensano". En fin, al llegar a la playa nos quedamos en un pasillo que hay detrás de las dunas pero que por su lado norte o derecho lleva a la playa. Es un corredor de arena, como el cauce de un río, por donde había llegado la marea (negra) y había dejado enterradas varias capas de chapapote. Trabajamos en varios grupos. Los primeros avanzamos por delante cavando y removiendo la arena hasta encontrar la capa de petróleo que se encontraba mas o menos a medio metro de profundidad. Su grosor variaba de 1 a 2 centímetros. Probamos varias formas para extraerla. La mas eficaz resulto ser la siguiente: cavar primero el medio metro de arena con palas o a mano con cuidado de no romper la capa de fuel. Al alcanzarla la pala rasca la capa que esta medio seca y mezclada con arena. Sonaba como si se rascase un pavimento de hormigón. Entonces se deja de cavar y se barre la arena superior a mano hasta que la capa quede limpia y al descubierto, como se haría en un yacimiento arqueológico. Decidimos no retirar la capa todavía, primero repetimos lo anterior en una superficie mayor para no deshacer o desgajar la capa. Además queríamos conocer su extensión. Llegamos a cavar unos tres metros de ancho por dos de largo. Aquello parecía una carretera. No pudimos contenernos y empezamos a bromear sobre ello: "que debería venir Fraga a inaugurar esa autopista; que no sabíamos que pasaba una antigua calzada romana por allí; que creíamos que los romanos no asfaltaban sus carreteras". Los voluntarios nos lo tomamos todo con mucho humor, y mas 6 meses después del comienzo del desastre, es la única forma de aguantar. El chico de Tragsa llamo a su jefe para que viniese a ver lo que había allí debajo. También nos trajo un cubo de agua para echarla sobre la placa y limpiarla de arena. Entonces empezamos a retirarla. Con las manos es la mejor manera, tratando de agarrar lo máximo posible y justo por debajo de la lamina, sin coger mas arena de la que esta adherida. Hicimos todo lo posible por no deshacerla. Aun así, quedaban muchos restos entre la arena. De ellos se ocupaban los grupos que venían detrás cribando la arena con tamices. En total juntamos mas de 5 toneladas de chapapote con arena. Los de Tragsa nos dijeron que habíamos sido el grupo mas trabajador y que nos llamarían mas veces, y de hecho lo hicieron. Galería 5.

Volver Arriba

SABADO 10 de Mayo. Dunas y marismas de "Boca do Río". Carnota.

Otro día aburrido recogiendo granitos y pequeñas galletas de petróleo en la arena. Un "trabajo de chinos" que deberían hacer las maquinas que al Gobierno no le da la gana de enviar a Galicia. También había contaminación de petróleo en la tierra y fango de las marismas de Boca do Río. Los militares estaban en una zona de arena filmando algún reportaje publicitario para la campana electoral. Estaban todos apiñados en un punto muy concreto, cavando como posesos y arrojando arena en grandes cantidades a unos tamices que agitaban como descosidos. Estaban todos muy bien etiquetados con sus pegatinas de FAS. Al parecer no querían visitas de voluntarios por allí. Mientras trabajábamos en aquel arenal inmenso sobre el que parecía que había llovido petróleo, un joven modelo o deportista cruzo entre nosotros trotando dócilmente, casi a cámara lenta y mostrando sus músculos de gimnasio y su bañador rojo pasión para el deleite de las voluntarias, que creían estar viendo a una especie de modelo de Gillette o vigilante de la playa estilo David Hasseholf. Eso si, los pies los debía de tener negros y recauchutados como una rueda de Michelín, del petróleo que estaría pisando. Las chicas de manos limpias tuvieron que dejar de sonar mocos y dedicarse a secar babas. Ante una situación tan surrealista nos preguntamos si seria un modelo contratado por el Gobierno para pasearse por el fondo mientras los militares salían en la tele, y así dar una imagen de normalidad.Nosotros seguimos a lo nuestro hasta las 4 de la tarde. Los militares se habían ido mucho antes. Al terminar fuimos a comer a la carpa de Lira, donde las voluntarias del pueblo no ofrecieron paella, ensalada y salpicón, además de café y turrón de postre. Ese día les entregamos una foto firmada por todos en agradecimiento por todo lo que llevan haciendo por los voluntarios cada día desde hace ya 6 meses, sin ayuda ni subvención de la Xunta.

Volver Arriba

JUEVES 8 de Mayo. Playa de "O Rostro". Finisterre. Galería 6.

Tercer día en "O Rostro" Sur. Los militares seguían instalados en el Pabellón y su carácter apático ya había pasado al personal del Pabellón. En la Playa no los vimos, creo que estaban en las rocas del lado Norte. Nosotros nos tuvimos que quedar recogiendo granitos de petróleo en la arena seca del lado Sur, esperando a que bajase la marea para volver a la orilla, al punto en el centro de la playa donde el sábado anterior habíamos retirado mas de 6 toneladas de chapapote con arena entre galletas que llegaban con la marea y petróleo que estaba enterrado. Sobre las dos de la tarde la marea ya estaba lo suficientemente baja y dos de nosotros nos acercamos a aquel lugar y encontramos miles de galletas, muchas de ellas bastante desechas, en la orilla. Volvimos corriendo a donde estaba el resto y les avisamos para que vinieran a ayudarnos. Trabajamos en la orilla y fue difícil coger el petróleo porque había mucha resaca y el fuel se queda justo en la orilla, así que hubo que arriesgarse y meterse un poco en el agua para alcanzar el chapapote. Eran galletas como las que habíamos encontrado la semana anterior, llegando a medir mas de una mano. Mucho estaba deshecho. No pudimos cavar porque ya no nos quedaba mucho tiempo y no teníamos suficientes palas ni bolsas grandes. Mientras trabajábamos se nos acerco un periodista de la Cadena SER y nos entrevisto. Por cierto, este día vino con nosotros desde Vigo un periodista que estaba autoproduciendo un documental sobre el voluntariado y las consecuencias del Prestige junto con dos reporteros mas. Trajo una cámara de video digital y nos filmo todo el día y nos entrevisto. El problema es que el documental es para TVE y no hay garantías de que se emita, y sin censuras. Galería 6.

Volver Arriba

SABADO 3 de Mayo. Playa de "O Rostro". Finisterre.

Solo tres días después regresamos a “O Rostro” para continuar lo que no pudimos acabar el miércoles por culpa de la marea. Por cierto, que quien decide enviarnos a Finisterre debería tener en cuenta el calendario de mareas porque casi siempre nos envían en semanas en que la marea sube o baja a mediodía, con lo cual solo podemos trabajar la mitad del tiempo porque el trabajo esta en la orilla o en zonas de rocas inaccesibles. Esta semana la marea estaba baja subiendo sobre la 1 o 2 de la tarde. Cuando llegamos a la playa los militares ya estaban trabajando en el centro de la playa. Llevaban desde las 7 u 8 de la mañana. Eran un grupo grande, el doble o triple que el nuestro, y se les veía muy manchados de petróleo por todo el cuerpo. Se veía mucha actividad, no necesariamente de trabajo. Tenían muchos capazos y palas, la mayoría en reposo, y tres bolsas grandes llenas de chapapote con arena, unas 6 toneladas en total. Según nos acercábamos al centro de la playa, donde ellos estaban, íbamos encontrando bolas de chapapote, tienen aspecto de piedras, como cantos rodados, de un color negro o gris con puntitos blancos (arena), de lejos parecen piedras de granito. Había de todos los tamaños, desde granos hasta bolas del tamaño de una mano. Se iban agrandando a medida que nos acercábamos a la zona donde estaban los militares, el epicentro. Un compañero empezó a cavar y encontró mucho más, así que nos recomendó que dejásemos las bolas y cavásemos. Fuimos a coger unas palas de los militares y al cavar medio metro o menos encontramos una capa de petróleo de unos 30 cm, a veces puro y espeso, a veces gris y arenoso, como hormigón. Aquello se puso feo, no era ninguna broma lo que había allí debajo, al cavar hacia los lados vimos que aquello no era un punto aislado, era una autentica carretera de petróleo proveniente de alguna de las mareas negras del Prestige, tal vez de la tercera o de una mas reciente, quien sabe. Pero a estas alturas, 6 meses después del hundimiento, era increíble encontrarse aun esta cantidad descomunal de chapapote. A todo esto hay que decir que trabajamos de espalda a la marea, que estaba subiendo, así que la urgencia era mayor y había que apresurarse lo máximo posible, retirando arena a un lado, luego el petróleo que estaba debajo, luego otra vez la arena, y así sucesivamente. Llegamos a abrir una zanja de unos 10 metros de largo y no nos movimos mucho mas porque el trabajo era muy duro y solo éramos entre 30 y 40 voluntarios. Era como para pasar una excavadora y levantarlo todo. Había oído que precisamente en esa playa varias veces había pasado una excavadora por la mañana temprano y con voluntarios se habían retirado cerca de 10 toneladas, pero nunca había participado en algo así después de 2 meses viniendo de voluntario. Lo que te esperas es que haya cada día menos y no mas, que es lo que en realidad nos esta pasando, exceptuando claro las primeras mareas negras en noviembre y diciembre. Estuvimos 2 horas y media trabajando con muchas dificultades porque no teníamos capachos suficientes para todo el petróleo que había. Las bolsas grandes tampoco sobraban, solo teníamos 6. La excavadora venia constantemente a llevarse las bolsas de los militares pero pasaba ampliamente de nosotros. También estaba un cámara de la TVG haciendo barridos a ras de suelo y filmando a los militares, a nosotros ni se acerco. Supongo que estaba filmando para los archivos de TVG, porque esta claro que no lo van a emitir. Cuando la marea subió, los militares empezaron a irse y nosotros seguimos un poco más. Al final como siempre apareció un empleado de Tragsa, impecable, me recordaba a Michael Knight, pero sin el coche fantástico. Nos dijo que no siguiéramos porque la marea estaba subiendo, ya no tenían más bolsas y el operario de la excavadora ya no iba a recoger nada mas porque iba a terminar su jornada laboral [¡#$*?]. En total debimos retirar unas 6 toneladas de chapapote con arena, y aunque trabajamos sólo esas 2 horas y media, fue como si hubiésemos trabajado todo el día, y es que la pala tiraba mucho. Acabamos todos empapados de sudor, pero con sensación de impotencia por todo el petróleo que quedo enterrado debajo y no pudimos sacar. Pero eso si, el desanimo que veníamos arrastrando todos esos días atrás se nos quito con el subidón de adrenalina que nos proporciono el trabajar tan duro, rindiendo tanto, y retirando tanto fuel. Por cierto, retiramos en 2 horas la misma cantidad de petróleo (6 toneladas) que los militares, que eran muchos mas que nosotros, en 6 horas. Ya para terminar no me quiero dejar atrás lo que nos encontramos en el Pabellón al llegar por la mañana: los tres militares que habían quedado al "cuidado" de las instalaciones. Dos de ellos estaban en una mesa al entrar, comiendo pipas. Al fondo en una oficina improvisada estaba el tercero, el que parecía más ocupado, delante del ordenador, sólo que en realidad estaba jugando al solitario. Pero no acaba ahí, lo mejor de todo es que estaba escuchando canciones de la legión. Sólo le faltaba la corneta y la cabra. Uno de nuestros compañeros escucho a uno diciendo "aqui vienen estos a molestar".

Volver Arriba

MIERCOLES 30 de Abril. Playa de "O Rostro". Finisterre. Galería 6.

Cuando llegamos al Pabellón de Finisterre, los militares seguían instalados allí, como la última vez que habíamos estado allí, pero los militares no estaban allí a esa hora. Nos vestimos y fuimos a la Playa de “O Rostro”, lado Sur esta vez. Un empleado de Tragsa nos acompañó y nos explico en voz baja lo que se estaba haciendo en la playa. Hacia la mitad de la playa había bolas de chapapote que llegaban con la marea y también capas gruesas de petróleo enterrado bajo la arena. Un grupo de nosotros se dirigió hacia ese lugar y con la ayuda de palas cavaron y sacaron lo que pudieron a contrarreloj, porque la marea ya estaba subiendo. El resto de voluntarios, que no pudimos escuchar lo que decía el de Tragsa, bajamos a la orilla a recoger algunas bolas de petróleo con arena, que a simple vista parecen cantos rodados de granito negro. Como no había mucho de eso, fuimos hacia las rocas que estaban a la izquierda de la Playa. Era una extensión bastante grande de rocas y estaban cubiertas con algas petroleadas. Se retiraban con facilidad porque el fuel era fresco, y al quitarlas las rocas quedaban casi limpias. El de Tragsa nos vio trabajando allí y se acerco para pedirnos que dejáramos de limpiar eso, que no era petróleo. Desde luego que lo era, de hecho olía bastante a fuel y se veía muy negro. Además había bastante que retirar allí y los capazos se llenaban enseguida, pero el coordinador insistió en que era mejor que hubiéramos ido con el resto, hacia el resto de la playa, donde estaban llenando los capazos sin pausa. Como la marea ya estaba subiendo para ellos, nos insistió para que fuéramos a la zona alta del arenal, a recoger granitos y “lentejas” de fuel. Estaba empeñado en que dejásemos las rocas, decía que eso ya se limpiaría al día siguiente, pero, nosotros volvimos el sábado y las rocas tenían como una costra negra. Es decir, que seguramente las algas petroleadas se habían secado con el sol y se habían pegado a las rocas. Si las hubiéramos retirado el miércoles las rocas habrían quedado limpias. Pasamos el resto del día en la arena seca de la parte alta de la playa, recogiendo las bolitas de fuel, que no eran pocas, aunque una vez retiradas las más grandes solo quedaban granitos muy pequeños. El trabajar así durante tantas horas nos desmoralizó bastante. No entendemos que nos impidan limpiar lo que consideramos prioritario y que nos hagan limpiar algo que debería hacer una maquina. Son tácticas de la Xunta y el Gobierno del PP para que nos agotemos y dejemos de venir como voluntarios. Quieren que nos cansemos por nosotros mismos porque si cortan el voluntariado de pronto perderían votos, y las elecciones municipales están al caer. Mientras trabajábamos se nos acercaron dos periodistas de Telecinco. Nos filmaron, nos entrevistaron y les dijimos todo lo que pensamos. Fueron bastante comprensivos y atentos con nosotros y no nos censuraron. Telecinco sigue siendo el único canal de TV en España que se compromete con el Prestige y con la verdad. Al marcharnos apareció un coche de Tragsa. Es curioso que siempre aparecen al principio y al final. Le pedimos al empleado y podía subirnos unas cajas de comida y material a la carretera y accedió de mala gana, diciendo que no tienen obligación de hacerlo, que si lo hacia era porque él quería. Al regresar al Pabellón a las 5 de la tarde nos dio casi vergüenza entrar allí, parecía que entrábamos en el dormitorio de alguien. Los militares estaban tirados en las colchonetas, con la tele encendida, jugando a las cartas, etc. Otros estaban jugando al fútbol en el campo anexo o haciendo footing en las inmediaciones. Cuando ya estábamos subiendo al bus para marcharnos un sargento hizo que unos cuantos soldados formasen delante de nosotros, como en castigo por algo. Galería 6.

Volver Arriba

JUEVES 24 de Abril. Cabo Touriñán. Muxía.

Nuestro segundo día en Muxía fue distinto al anterior. Habían pasado dos semanas y aunque la Lonja aun estaba al servicio de los voluntarios, los militares ya no estaban allí para servirnos, se habían retirado cuatro días antes y en su lugar solo quedaban el patrón de la cofradía de pescadores de Muxía, dos voluntarias del pueblo en la cocina y otras dos voluntarias de fuera que habían estado con nosotros en Cabo Touriñan dos semanas antes. Precisamente ellas nos contaron lo que les sucedió a ellas y a otras voluntarias unos días antes, cuando se manifestaron en el pueblo con las manos atadas y amordazadas, simbolizando las limitaciones y el silencio al que nos confina el Gobierno a los voluntarios y afectados por el Prestige. Protestaban contra la retirada de los militares, las declaraciones del Gobierno de Aznar asegurando que la Costa Gallega esta completamente recuperada, y la injusta y prematura apertura de la pesca en la zona. Lo que ocurrió fue que los ciudadanos de Muxía, condicionados por el alcalde del PP, se enfrentaron a las manifestantes y consiguieron que se expulsase a una de las voluntarias de la lonja. El patrón de la cofradía se veía muy desanimado por todo esto. Estaba recibiendo llamadas de grupos de voluntarios de otras partes de España y tuvo que decirles que no vinieran porque no podía garantizarles el alojamiento, ya que el pabellón, la lonja y las carpas que solían albergar a los voluntarios estaban a punto de desalojarse. En la zona de las calas y acantilados vimos a trabajadores de Tragsa limpiando las rocas con maquinas de agua a presión. Los militares (FAS) ya no estaban y no vimos grupos de voluntarios. En Cabo Touriñan el panorama era el mismo que dos semanas antes. Yo estuve trabajando en una parte alta de la cala, donde tierra, barro, hierba y raíces estaban mezcladas y enmarañadas con chapapote, siendo muy complicado separarlas e incluso distinguir el petróleo del barro. Había una capa seca por encima y hubo que arrancar todo eso. Era curioso ver como surgía vida entre tanto caos. Me recordaba a "Wasteland" de T.S.Elliot ("April is the cruelest month...")

Volver Arriba

MARTES 15 de Abril. Cala de Ximprón. Lira, Carnota.

El día que nos dividieron porque necesitaban voluntarios para trabajar en serio en la Cala de Simprón en Lira, pero también necesitaban voluntarios que hiciesen de extras en la pantomima informativa que TVE estaba filmando al mismo tiempo en la playa principal de Carnota, en la bahía, como soporte en imágenes para los recientes comentarios de Aznar diciendo que la recuperación de la costa gallega era completa. Que mejor que la inmensa playa de Carnota, justo en la frontera que la Administración marco para la apertura de la pesca, de Carnota para abajo. Además esa playa es tan amplia que a simple vista, o a vista de cámara no se aprecia que tenga mucho petróleo, sin embargo basta con acercarse a las dunas y agacharse para poder apreciar que la arena esta salpicada de pequeñas galletas, lenguas y lentejas de petróleo, como si hubiera llovido del cielo. Pero no se preocupen, en el telediario no lo van a apreciar, aunque si han pasado la Semana Santa en Carnota seguro que se le habrán llenado los pies de petróleo, muy tóxico y cancerígeno, por cierto. Pero en fin, queda poco mas de un mes para las elecciones y hay que saber venderse aunque sea mintiendo, a ver si cuela.

Volver Arriba

JUEVES 10 de Abril. Cabo Touriñán. Muxía.

Nuestro primer día en la Zona Cero, casi 5 meses después de que el Prestige hiciera su primera llamada de socorro frente a estas costas. El mismo paseo que entonces veíamos cubierto de negro hasta las lámparas de las farolas se veía hoy resplandeciente, mes y medio antes de las elecciones. Recordemos que Muxía no es como las Rías Bajas o Carnota, aquí la gente esta mas dividida entre los que apoyan el Nunca Mais y los incondicionales que defienden al PP. La lonja seguía a disposición de los voluntarios y atendida por los militares, también el pabellón. Al lado de la lonja se estaban preparando dos carpas para los voluntarios que llegarían en Semana Santa de todas partes de España. La lonja estaba a punto de ser devuelta forzosamente a los marineros para sus actividades después de 5 meses sin subastar nada. El problema es que todavía estaban volviendo con sus redes llenas de chapapote cada vez que salían a pescar. Me pregunto que habrá sido de los cientos de recuerdos que los voluntarios de todo el mundo habían dejado a su paso por la lonja. Recuerdo ver camisetas, banderas, pancartas, posters, murales y cartas de voluntarios de sitios tan lejanos como Burkina-Faso o Colombia. Una vez listos nos subimos en un autobús que nos llevo hasta Cabo Touriñan. Por el camino vimos grupos de voluntarios, algunos de FAS. En Cabo Touriñán bajamos caminado a una cala totalmente negra. Era petróleo muy negro, muy pegajoso. Las piedras eran muy grandes y nos dedicamos a quitar lo que pudimos de arriba primero, que era poco y ya estaba muy seco en la superficie superior de las rocas. Lo más grueso estaba debajo, así que tuvimos que mover muchas piedras empujándolas a mano y con barras de hierro. Debajo el panorama era desolador, había mucho chapapote acumulado. Una chica de Barcelona con bastante experiencia en esto, que ya había estado en la zona durante varias semanas, nos dijo que había 21 lugares mas como este en la zona de Muxía, todos igual de afectados. Debajo de la rampa de hormigón que descendía hacia la orilla había aun más petróleo. Fue un día muy duro, con lluvia, humedad y frió. Al regresar a Muxía nos repusimos con una sopa bien caliente aunque demasiado salada que nos sirvieron en la lonja.

Volver Arriba

JUEVES 3 de Abril. Cala "Areas Brancas". Carnota.

Saliendo de Carnota hacia el norte hay una zona de calas y playas pequeñas. Se llega por caminos desde la carretera pero el paseo vale la pena. Hay que pasar por una zona de bosque bajo y prados delimitados por muros de piedras bajos. Es bastante bonito y se ve muy arreglado. Incluso recuerdo una hilera de abetos y un burro pastando por allí. Desde luego había pinos, tojos y todo eso. Hablando ya de la cala, hay que decir que lo que encontramos allí era una barbaridad. Había muchísimo chapapote pero estaba mezclado con arena, como batido todo, no parecía que la arena hubiera llegado allí de forma natural, sino más bien que alguien la hubiera echado por encima. El coordinador, un voluntario de Valladolid nos dijo que creía que los militares habían echado arena por encima de las piedras para que la mezcla del oleaje y la arena raspase el petróleo de las piedras, pero la verdad es que es una barbaridad porque eso podría estar bien si las piedras tuviesen una capa fina de petróleo, pero no era el caso ya que debajo de las piedras había mucha acumulación de chapapote, y al quitarlo tuvimos que desperdiciar mucha arena, que ya solo serviría para la fabricación de ladrillos. Todos nosotros, que ya tenemos bastante experiencia en esto, quedamos muy sorprendidos por la cantidad de petróleo que nos encontramos allí. Hacia falta mascarilla porque el hedor era muy toxico. Además la arena había tapado auténticos charcos de chapapote que al quedar de nuevo al aire después de varios días desprendían un olor muy fuerte. Todos tuvimos la certeza de que aquel chapapote era bastante fresco, de alguna marea negra reciente, y que alguien había tapado con arena para que desde el avión de reconocimiento no se aprecie que la costa esta dañada, mes y medio antes de las elecciones. Por cierto, tuvimos que valernos de palancas y barras de hierro para mover las piedras grandes y alcanzar el petróleo que estaba debajo de ellas. Era muy viscoso y puro, sin apenas agua, como una crema de cacao. No era difícil llenar las espátulas de una sola vez. Al final quedamos reventados como no, pero nos repusimos gracias a la comida caliente que nos sirvieron las señoras voluntarias en la carpa del puerto de Lira, Carnota. Vale la pena decirlo: empanadillas de hojaldre con bechamel y espinacas, lentejas y paella.

Volver Arriba

JUEVES 27 de Marzo. Playa de "O Rostro". Finisterre. Galería 6.

No tengo mucho que contar de este día. La marea estaba alta y eso nos impidió trabajar en las rocas hasta pocas horas antes de regresar. Quienes coordinan los grupos de voluntarios y los destinos deberían tener en cuenta las mareas para sacarnos mejor partido. Empezamos en la arena pero había muy poco que recoger. Bastante menos que el 21 de Febrero en esta misma playa. Cuando pudimos acceder a las rocas, trepando básicamente, encontramos bastante fuel. Eran pegotes frescos y viscosos entre las grietas y en algunas pozas que se formaban entre las rocas. Al final, cuando ya casi estábamos recogiendo, empezaron a llegar galletas la orilla, suelen venir cuando baja la marea. Tuvimos noticias de que esa misma mañana sobre las 8 una excavadora había encontrado unas 8 toneladas de petróleo bajo la arena, como ya había sucedido una semana antes. Recuerdo que había voluntarios de Granada en la playa y otros de Coruña. El pabellón de Finisterre estaba ocupado por los militares. Por cierto, había latas de zumo de mandarina de Murcia, envasado especialmente para los voluntarios que vienen a Galicia y prohibidas para la venta. Galería 6.

Volver Arriba

VIERNES 21 de Marzo. Dunas y marismas de "Boca do Río". Carnota.

El día perfecto, no voy a decir por que, pero si que hizo un tiempo muy bueno, que estuvimos en un sitio muy bonito, con dunas, lago, delfines... Como es costumbre cuando se va a Carnota algunos se quedaron a reciclar material en el Pabellón. De los demás algunos se quejaron porque tuvimos que bajar caminando desde el Ayuntamiento de Carnota hasta la playa principal, abajo en la bahía, aunque el paseo fue muy agradable y fuimos guiados por dos perros muy simpáticos del pueblo que no tenían nada que hacer ese día y nos hicieron compañía el resto del día. En Carnota hasta los perros son amables. Cruzamos un pequeño puente sobre un río, continuamos por una zona de dunas y llegamos a esa playa, una bahía de unos 7 Km. Tuvimos que caminar media playa hacia la derecha y vimos un delfín saltando no muy lejos de la orilla. Luego nos fuimos hacia las dunas, y nos quedamos alrededor de las lagunas recogiendo galletas pequeñas de chapapote. Fue un trabajo cómodo pero interminable porque había muchísimas bolas de fuel entre la arena y si escarbábamos encontrábamos aun más. Seria una locura no retirar ese fuel porque es una playa preciosa muy buena para el turismo y esta echada a perder, tanto que yo no le recomendaría a nadie que caminase descalzo por ahí. Unos días después la Universidad de Vigo utilizó en esos arenales una maquina capaz de detectar fuel bajo la arena y encontraron una carretera de chapapote enterrada y quitaron cerca de 10 toneladas de petróleo.

Volver Arriba

JUEVES 20 de Marzo. Playa de "O Rostro". Finisterre. Galería 6.

Ese día hizo bastante calor y el petróleo estaba derretido y chorreaba por las rocas, desprendiendo bastante olor. Había arena sobre las rocas, supuestamente arrojada por Tragsa para ocultar el petróleo. Al día siguiente la excavadora encontró una capa de 8 toneladas de petróleo enterrado bajo la arena. Galería 6.

Volver Arriba

JUEVES 13 de Marzo. Traba, Laxe.

Nuestra experiencia en Laxe fue la otra cara de la lucha contra el chapapote: la lucha contra las barreras humanas que nos impiden trabajar. Fue una gran decepción, sobretodo para los voluntarios que vinieron aquel día por primera vez y que se fueron a casa de vacío. Primero un viaje pesadísimo de más de tres horas por autopista hasta Santiago y luego por carreteras secundarias hasta la Ría de Corme y Laxe. Desde la carretera ya se podían ver grandes bolas negras en la playa, sin embargo no había ningún voluntario además de nosotros, tampoco vimos ni una sola bandera de Nunca Mais. El pueblo parecía desierto, y por cierto su casco antiguo muy limpio y cuidado, quizás tenga algo que ver en ello que por allí se rueda la serie de la TVG "Mareas Vivas". Cuando llegamos nos ofrecieron un desayuno "estilo portugués" en un restaurante con todos los gastos pagados, acabamos pronto para poder empezar trabajar. No había ningún pabellón donde acogernos al parecer. No parecía que fuera un lugar frecuente entre los que solicitan voluntariado, porque no estaba nada organizado. Al llegar al centro de Laxe nos recibieron unos empleados de Tragsa y nos repartieron primero pegatinas del Ministerio de Medio Ambiente (pocos días después del relevo de Jaume Matas como Ministro). Además nos entregaron a cada uno una hoja del MMA que aclaraba que la labor que íbamos a desempeñar era de "retirada de fuel", no de "limpieza de playas", así que no importaba que la siguiente marea volviera a ensuciar la playa sino que lo retirado ya no volvería al mar. No hace falta que diga que cada uno hizo lo que le pareció mas justo con las pegatinas y las hojas. A continuación nos dieron los equipos, mas nuevos y de estreno que nunca ( casi me atrevería a decir que de diseño ). Eso si, tuvimos que vestirnos en el paseo de la playa, o sea, en la calle. Una vez aderezados bajamos a la playa principal de Laxe. Me llamo la atención que el correspondiente letrero del Ministerio ni siquiera estaba clavado. En la playa había un rastro de bolitas negras y de vez en cuando unos montones de turba. Tremendos pedazos de madera carbonizada que según los lugareños pertenecía a un barco que llevaba cuarenta años hundido en las proximidades y enviando esos trozos pesados de turba. En definitiva, que no era chapapote del Prestige. Parecía una broma, hacer que cuarenta y siete personas recorran toda Galicia para limpiar la playa de pueblo de unos despojos que durante 40 años han debido estar retirando funcionarios del Ayuntamiento correspondiente. Lo mas irónico es que la hoja del Ministerio dijera que no se trababa de limpiar playas sino de retirar fuel. Los capazos por supuesto se llenaron enseguida y aun quedaba mucho mas por recoger, pero el único tractor que había en la playa estaba sin conductor y aun hubo que llamar al encargado ( de Tragsa ) para que viniera a moverlo y así poder descargar en el los capazos. Ante semejante situación decidimos que no íbamos a seguir recogiendo eso y les exigimos a los responsables de Tragsa que nos llevasen a donde estaba el chapapote. El encargado de Tragsa, un ingeniero forestal de fuera de Galicia no dejaba que decirnos cuanta razón teníamos para indignarnos y cuanto derecho a protestar pero no se hacia responsable de lo que había pasado y nos remitía a los encargados de Asuntos Sociales del Ayuntamiento de Laxe y la Xunta de Galicia que habían solicitado ayuda de los voluntarios para Laxe. Nos recomendó que fuéramos al Ayto a presentar una reclamación y así se hizo. Nuestra coordinadora y un voluntario fueron allí y consiguieron presentar la demanda pero a cambio fueron insultados y calificados de pedigüeños que vienen solo por el bocadillo. El chico de Tragsa nos dijo que había los encargados de Asuntos Sociales cobraban por solicitar voluntarios. Todo empezaba a cobrar sentido, también que nos dieran un equipo totalmente nuevo, dando así negocio a las empresas que lo fabrican, entre ellas la de Cuiña. Mientras tanto los voluntarios esperábamos en el puerto a que nos ofreciesen una alternativa. Los tres de Tragsa nos propusieron llevarnos en pequeños grupos hasta la playa de Traba, a 8 km del centro de Laxe. El traslado hubo que hacerlo en coches de la Policía Local y de Tragsa. Pronto nos dimos cuenta de que no daría tiempo a llevarnos a todos y que el día ya estaba perdido. Mientras esperábamos en el puerto había quien se desesperaba discutiendo con algún villano que nos miraba con recelo. Por otra parte un marinero nos recito un poema narrativo que había escrito y publicado sobre el Prestige. Entretanto vimos un camión del Ejercito pasar por delante de nuestras narices y dar la vuelta allí mismo para volverse a ir, como si no pasase nada. A continuación uno de sus coches hizo lo mismo. A la media hora se repitió la misma escena. Parecía que estaban haciendo un circuito, como para figurar por la zona y que parezca que hay presencia y maniobras militares, pero esta vez se detuvieron. Tres o cuatro militares descendieron y se dirigieron hacia nosotros. Uno de ellos venia muy suelto, con unos andares entre Mel Gibson y He-I-Joe, muy machote el, a ver que pasa. Se reunieron a fumar junto al quiosco, sin prisa, que hay tiempo. Todos estábamos pensando que deberían llevarnos a la playa, para eso estaban allí, para ayudar, o no? Al rato nos lo propusieron, y unos ocho voluntarios nos acercamos al camión y subimos como pudimos, esos dichosos camiones tan altos, que es como subir a un caballo. Arriba estaban tres soldados que más bien parecían milicianos, sentados al fondo sobre unos bultos. La chica delante sentada como si estuviera delante de una hoguera en medio de un bosque de noche y mordiéndose las uñas. Detrás, un poco más atrás tenía a cada lado un muchacho recostado sobre los bultos. Los voluntarios íbamos sentados en banquillos a cada lado del camión. Aquello parecía una licuadora en vez de un vehículo. Media hora dando tumbos y golpes con la estampa de los "milicianos" en el centro y al fondo como si nos llevasen a dar "el paseíllo". Aun así eran majos los tres, paisanos de nuestra provincia, aunque estaba claro quien mandaba de los tres. Al llegar a la playa de Traba nos encontramos con una tienda de los militares, otro camión del Ejercito y un puesto de Tragsa llevado por un curioso elemento parlante que me sonaba mucho de vista, yo creo que lo ví en un reportaje de televisión sobre el Prestige, como marinero afectado por la catástrofe. ! Que curioso que los militares y los de Tragsa estuvieran instalados allí y no en la playa de Laxe. Supongo que se reservan para ellos el chapapote, así les dura el empleo mas meses y mientras envían a los voluntarios a donde no hay petróleo para que regresen diciendo que ya no hay chapapote en la Costa de la Muerte. En fin, cogimos los capazos y las espátulas y nos dirigimos a unos acantilados al Sur (a la izquierda) de la Playa de Traba. Allí el paisaje es muy distinto al de Carnota, por ejemplo. Es un paisaje típico de tierras altas, muy nórdico, muy escocés, con prados muy inclinados y muros de piedras bajos y cuadriculados. De pronto atraviesa un camino de tierra y luego los escarpados acantilados. Hacia la derecha una playa enorme, dunas y el mar muy picado con olas altas y constantes. Mar abierto. Bajamos por el acantilado como pudimos, por un sendero, apenas una grieta de tierra. Abajo el fuel estaba casi seco, muy duro y pegajoso, había que raspar lo que se pudiera y lanzar las piedras a la orilla para que se mojasen. Estaba todo muy negro y había bastante, y para colmo no llegaban refuerzos. Solo pudimos trabajar una hora y al regresar, tras superar al parlanchín de Tragsa y el viaje de regreso en la coctelera, nos reencontramos con nuestros compañeros en el puerto de Laxe. No habían podido ir y los militares les dijeron que el otro camión se les había estropeado. Ja. Comimos algo rápido, a algunas se les ocurrió ir a un bar y casi no salen vivas de allí, nos llamaron "bloqueros". Estaba claro de que partido son en ese pueblo. Nos fuimos de allí deseando no volver.

Volver Arriba

SABADO 8/DOMINGO 9 de Marzo. Carnota.

Volver Arriba

JUEVES 6 de Marzo. Ximprón/Ardeleiro. Lira, Carnota. Galería 1.

Lo recuerdo como un día bastante ameno. En Carnota había muy buen ambiente, con muchos voluntarios de otras partes como Albacete. El buen tiempo nos acompañó toda la jornada aunque también nos hizo pasar calor. Un grupo de unos diez se quedaron en la carpa de reciclaje de material que esta junto al pabellón. Desde el Ayuntamiento de Carnota bajamos hacia la Parroquia de Lira, al sur, a las calas que están en mar abierto. El paisaje recuerda algo al que hay a la salida de Bayona en dirección a La Guardia. Nos pusimos las botas en una nave que esta al lado de las calas y bajamos con nuestro coordinador, un bombero voluntario de Valladolid, a la cala de Simprón. Coincidimos con una pareja del Este de Francia que llevaban varias semanas en Carnota como voluntarios. En Simprón el trabajo consistía básicamente en limpiar los cantos rodados del suelo y llevarlos en capazos a la orilla para que las olas las limpiasen por completo. Dispusimos de bastante material de trabajo. Con espátulas raspábamos el petróleo de las piedras lo máximo que podíamos y luego las depositábamos en los capazos para que los llevasen a la orilla. Algunos voluntarios trabajaron en las rocas que están a los lados de la cala. Un chico se metió de llenó entre esas rocas y acabó mareándose por los gases que emanaban de las rocas debido al calor. Había bastante petróleo y sobre todo estaba muy derretido por el calor. Entre las piedras se podía ver como fluía con el agua cala abajo, tiñendo el agua de un color amarillento y aceitoso. Tras cuatro o cinco horas de trabajo paramos y volvimos a la nave industrial para quitarnos las botas en el pasillo de desintoxicación. A continuación nos llevaron a una carpa que esta en el puerto de Lira. La carpa alberga a más de cien personas y esta decorada con los recuerdos de tantos y tantos voluntarios que han pasado por esta localidad de la Costa de la Muerte en los últimos meses. Esta atendida por voluntarias del pueblo que cariñosamente preparan comida caliente cada día para unos 500 voluntarios. Aquel día recompensaron nuestro esfuerzo y nuestra solidaridad con sopa caliente y salpicón. No me puedo olvidar de Gabriele, que ese día estuvo con nosotros y consiguió unas fotografías muy buenas que os recomiendo ver en la Galería 1.

Volver Arriba

VIERNES 21 de Febrero. Playa de "O Rostro". Finisterre.

Salimos de Vigo a las 7:15 como de costumbre y fuimos por autopista hasta Padrón. Entonces salimos y nos dirigimos hacia Negreira, atravesando montanas y prados en dirección a la costa. Nos reencontramos con el mar en Cee, Ría de Corcubión y continuamos bordeando la costa hasta Finisterre. Al llegar pasamos primero por el pabellón. Había un grupo de voluntarios de Ourense que habían pasado la noche allí. El desayuno incluía turrón y recuerdo varias pilas de cajas de naranjas, algo pasadas, cortesía de Levante para los voluntarios. A continuación nos equipamos y volvimos al bus que nos llevó a la playa de "O Rostro". Allí estaban instalados los militares con dos tiendas grandes y un helicóptero. El grupo de Ourense ya estaba trabajando. Empezamos en el arenal, recogiendo granos de fuel con nuestros guantes. Era difícil hacerlo sin instrumental. Nos dieron unas escobillas hechas con juncos arrancados de las dunas y unidos con cinta adhesiva. Pero sólo servían para barrer un poco la arena y separarla de los granos. En general había muy poco petróleo, y sin un tamiz era un trabajo muy tedioso. Me llamó la atención no ver ningún ser vivo entre la arena, cuando normalmente se encontrarían pulgas blancas. Un poco más arriba, en las dunas había un poco más aunque era un trabajo también muy selectivo. Varias horas después fuimos a la derecha de la playa, a retirar fuel de las rocas. Allí el panorama era muy distinto y encontramos bastante fuel. Las rocas que estaban a pie de playa se veían secas, con un tono grisáceo, como si fuera cemento, pero si las rascabas te dabas cuenta de que lo que tenían era arena mezclada con petróleo. Las rocas que estaban hacia el interior y hacia arriba tenían fuel más fresco. Recuerdo que atrapadas entre las rocas había redes impregnadas en fuel muy reciente y negro. Un grupo de nuestros voluntarios consiguieron un "cutter" y cortaron la red que llenó un capazo por completo. La herramienta que nos dieron para las rocas era muy escasa, apenas algunas espátulas y trozos de teja. Las mascarillas fueron muy necesarias porque olía muy fuerte, especialmente cuando extraíamos el chapapote de las grietas, dejando al descubierto petróleo que había estado encerrado y sin ventilarse durante horas y posiblemente días.

Volver Arriba