Se acabó la fiesta

Bueno y con la elección y coronación de la señorita Colombia se dió por terminada la fiesta en la ciudad, premiación que ha sido muy comentada en sus resultados y más por los cartageneros quienes sentimos que un vestido nos alejo del titulo, pero no todo es malo para nosotros, pues quedo demostrado ante los ojos del país que somos un pueblo culto a pesar de lo que digan y que podemos realizar eventos en donde prima la originalidad, la alegría y sobre todo el civismo.
Por otro lado me gustaría recordarle a las personas que nos leen no sólo a nivel nacional si no internacional que Cartagena, es más que un festival, reinas y carrozas, que vale la pena que nos visiten no sólo para estos días, sino, en cualquier época, pues le aseguro que usted se acostumbrará a esta ciudad bicéfala y aprenderá a amarla desde el balcón de la nostalgia o desde el bullicio de la modernidad.