La
pared celular de los hongos está formada principalmente por quitina y ß-1,3
glucans embebidas en una matriz de material amorfo, por lo tanto se espera que para el
éxito de la degradación de la pared celular intervengan más de una enzima (37). Trichoderma spp. son eficientes productores de
polisacaridasas, proteasas y lipasas, compuestos que pueden ser usados en la degradación de la pared de las células del patógeno. (37).
Se han purificado dos
enzimas quitinóliticas (endoquitinasa y quitobiosdasa), obtenidas a partir de Trichoderma
harzianum; se comprobó que el grado de
inhibición del patógeno fue proporcional al nivel de quitina en la pared celular del
hongo atacado, e igualmente se verificó que la combinación de las dos enzimas resultó
ser sinergística (54, 56, 57, 75), aunque la mezcla de estas dos enzimas no es requerida
para la inhibición del hongo atacado (56). Es
interesante resaltar que las dos enzimas se enfrentaron a cultivos de Trichoderma
y éste no se vio afectado por las mismas, a
pesar de tener quitina en sus paredes (75).
Haran
et al. (54) encontraron niveles diferentes de
producción de las enzimas hidrolíticas, cuando Trichoderma
se enfrentó a S. rolfsii o a R. solani, la actividad de una de las enzimas, la
cual se produjo durante la acción parasítica de Trichoderma
y S. rolfsii, no se detectó en la relación Trichoderma y R. solani, resaltando que la expresión de estas
enzimas durante la interacción con el patógeno fue afectada por el hongo patógeno al
cual se enfrentó.